/// Nunca más ///

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El ambiente era increíblemente relajado. Similar a las premiaciones, los invitados estaban agrupados en distintas mesas, desde donde podían disfrutar de la música, la comida y los espectáculos preparados para esa noche de celebración. Por supuesto que estaba programada una fiesta sin protocolo, pero eso era para después, entrada la noche.

Muchos de los idols más famosos de Corea estaban reunidos allí. _______ sentía encima la mirada JB, quien estaba con su grupo algunas mesas más allá de la de ella. A ella le tocó sentarse al lado de la mesa principal, la de BTS en pleno. Allí se encontraba sentada junto a Sundeuk, los managers y los principales productores de la BigHit. Si bien habían entrado todos juntos, los chicos de la banda en ese momento no estaban, pues estaban preparando una presentación especial. En la mesa de ellos, se veía la solitaria figura de Tiffany, que esperaba a su amado Taehyung salir al escenario. Por lo que había escuchado, el mismo Bang Sihyuk había movido las piezas para que Tiffany se sentara separada de su grupo, también asistente, en la mesa de honor junto al resto de BTS.

_______ la observó disimuladamente. No podía negar su atractivo, aun en su simple vestido negro ajustado, el contraste con su blanquísima piel, su cabello levemente ondulado, suelto, cayendo sobre un hombro. Era todo lo opuesto a ella, con sus caderas anchas, su piel morena y piernas contorneadas. Tal vez era eso lo que había conseguido que Taehyung finalmente se quedara con ella. Era linda y no podía negarlo. Eso solo aumentó su sensación de desasosiego y las ganas de salir de allí. Pero sabía que no podía dejar a Sundeuk allí, ni a los demás chicos. Si bien ahora todos parecían adorar a Tiffany, seguían siendo amables con ella y jamás la habían dejado excluida de ninguna actividad que hacían. Volvió a posar su mirada sobre Tiffany, quien escribía activamente en su móvil. Sintió curiosidad... ¿con quién hablaría? Ay, _______, eso no te importa. Ya deja de verla, no debe importarte.

/Narra Taehyung/

Las observo desde el escenario, escondido tras el telón. Ambas sentadas a muy poca distancia la una de la otra. Por una parte, Tiffany, mi novia y la mujer que más odio en este momento. Nunca pensé que pudiera albergar sentimientos tan potentes y negativos hacia alguien. Y ahora siento que este odio me envenena, aunque debo poner una careta de amor y romanticismo. Un poco más allá, observo a ________ conversar animadamente con Sundeuk y los managers. Se ve increíble en ese vestido rojo. No puedo evitar recordar nuestros mejores momentos, su risa, su humor, sus besos, su cuerpo sobre el mío- ¿Podré recuperarla algún día? ¿Habré perdido para siempre con ese payaso de JB? Son las interrogantes que me acosan día y noche.

- ¿Estás listo, hyung? – me interrumpió Jungkook, poniendo su mano sobre mi hombro, sacándome de mis pensamientos. Suspiré.

- Siempre. - Le dije sonriendo bobamente. Le di una última mirada a _______ por detrás de la cortina y tomé la posición inicial. Era hora del espectáculo.

Por fin el host anunció a los chicos. Todos aplaudieron y la performance partió magistralmente. Todos bailaban al ritmo de BS&T, incluyendo a los managers. 

_______ cerró los ojos y trató de disimular el encanto que Taehyung parecía ejercer sobre ella. La pose extremadamente masculina y sexy de la canción le hacía recordar irremediablemente. Porque sabía que ese Taehyung sensual que veía bailar en frente de ella no era nada al Taehyung que ella conocía en la intimidad. 

Sintió un escalofrío recorrer su cuerpo de solo pensar en las veces en que ella y Taehyung había hecho el amor deliciosamente. Miles de flashbacks asaltaban su mente: su habitación en el departamento de Sundeuk, la ducha de la Big Hit, la casa de veraneo.

Se sintió sofocada de pronto y decidió ir a la baño a refrescarse. Así al menos se ahorraría tener que ver a Taehyung en el escenario.

Entró al baño se miró al espejo. El reflejo le devolvía una imagen muy diferente a la primera vez que pisó Corea. Ya no era la tonta sufriente sin remedio, que lloraba solo con recordar a Felipe. Si bien ahora sufría por Taehyung, se sabía diferente, más fuerte, más entera y dueña de sus acciones. Eso la hacía sentir mucho más segura y tranquila de sí misma. Ya había entendido que ella no era menos que otras, sino que son las acciones de otros las que a veces nos hacen sentir menoscabadas. Pero nunca más. No sabía cuánto más sufriría por Taehyung en secreto, pero él jamás lo sabría. Ese era su plan: dejar de amarlo sin que él lo supiera realmente.

- Oh, estás aquí.- dijo la voz que la sacó de sus pensamientos.

________ levantó la vista frente al espejo y vio a Tiffany en el umbral de la puerta. Estaba cruzada de brazos con la vista fija en ella y una expresión peligrosa en el rostro. _______ pensó en salir corriendo. Pero no más. Suspiró y dio la vuelta, quedando de frente a Tiffany.

- Hola, Tif. ¿Necesitas algo? – respondió ________, mirándola a los ojos, sin dejarse intimidar por la mirada fiera de la otra.

- Si, _______. A ti. – respondió ella, al tiempo que echaba seguro a la puerta del baño.