Te amaré el resto de mis días

Capítulo 26

*Olivia Benson*

Finalmente aquí estamos, en tantas idas y vueltas la vida nos ha dejado parados uno frente a otro, bailando lento la mejor pieza de música que nos ha tocado en mucho tiempo, y no me refiero solamente a la canción que suena de fondo en este instante sino... a esta nueva etapa de nuestra vida, sí NUESTRA vida, juntos como siempre contra los males del mundo. Quién sabe qué nos esperará de aquí en adelante, es todo un misterio, pero lo enfrentaremos juntos... juntos...

Sentir la mirada de Elliot sobre la mía me saca de mis pensamientos. La fiesta que nos prepararon es hermosa, hacía mucho no me divertía de esta manera, aún así ya quiero irme con Elliot y estar solos, alejados de todo.

-¿Estás bien? -preguntó él con tono suave debido a que todos nos miran bailar en medio de la pista-.

-No podría estar mejor -respondí en un susurro- ¿Crees que estaría muy mal si nos vamos luego de terminar esta canción?

-Creo que estaría muy bien -dijo sonriendo-.

Calvin se quedaría con la tía Mandy mientras nos íbamos de luna de miel, realmente no estoy muy contenta de dejarlo pero confío en mi amiga y sé que mi pequeño estará bien. Luego de despedirnos de todos y dejarle muchas instrucciones a Calvin de cómo debe comportarse con su tía, subimos al auto y Elliot comienza a conducir, alejándonos de nuestros amigos. 

Luego de unas horas llegamos a Chicago, estaremos aquí quince días y espero sean las mejores "vacaciones" en mucho tiempo. El viaje fue muy agotador y solo estoy pensando en quitarme los zapatos y dormir, pero Elliot no... puedo sentir su mirada clavada en mi espalda asi que decido darme vuelta.

-¿Se te perdió algo por aquí? -pregunto e instintivamente levanto mi ceja izquierda-.

Ell sonrie y se acerca a mi despacio.

-Mmm no -responde- sólo observo ese vestido que traes puesto, te queda hermoso.

Obviamente no es el de la fiesta, me lo cambié por uno más cómodo para viajar mejor.

-Lo sé -digo riéndo pequeñamente-.

-Eres terrible Benson -dice por última vez Elliot antes de pegar sus labios a los míos-.

Puedo seguir sus besos mientras siento su mano jugar en mi pelo, la otra apretar mi cintura llevándome hacia él, y muchas sensaciones juntas en mi cuerpo. Me separo unos instantes y apoyo mi frente contra la suya, recuperando el aliento, sus ojos celestes me miran como si fuera lo único en este mundo

-¿Me permites? -susurra mientras pone su mano sobre el cierre de mi vestido-.

-Claro que sí -le digo sonriendo-.

Entonces su leve sonrisa me ganó por completo, acaricié cariñosamente su cuello con mi mano derecha y lo besé suavemente mientras mis mejillas se ruborizaban como si fuera una adolescente.

Así lentamente nos dejamos llevar por todos los sentimientos retenidos en largo tiempo, esos que ahora éramos libres de expresar, uniéndonos en una sola persona.

6 meses después...

*Unidad de Víctimas especiales*

Fin había llegado de ver a Warner con nuevas pistas sobre el caso en el que estaban trabajando

-Claramente no fue un suicidio -dijo a todos mientras ponía los resultados de Warner en la pantalla-.

-Entonces un hijo de perra la violó, la mató e hizo que pareciera un suicidio porque creyó que así no lo atraparíamos -dijo Elliot furioso-.

-Exacto. El dedo índice de la víctima estaba dañado por la artrosis y jamás podría haber jalado el gatillo ella sola.