Capítulo 1

2.5K 125 5
                                    

*Elliot Stabler*

Este caso me tiene muy ocupado desde hace unos días, con Liv hemos estado yendo de acá por allá, siguiendo pistas de un presunto asesino en serie, sólo que él no sigue el mismo patrón y algo no cuadra; hemos interrogado a un sospechoso toda la noche y tengo hambre. Levanto la vista de mis papeles y ahí esta ella, concentrada, mordiendo una lapicera.

-Liv

-Humm? Ella sale de sus pensamientos y me mira

-Llevamos toda la noche aquí, quieres ir a comer algo?

Ella suspira y tira la lapicera sobre la mesa haciéndola rebotar

-Si por favor, me gustaría salir de acá un rato

-Perfecto. Dije una sonrisa apareció en mi rostro

-Por qué sonríes Stabler? dijo Liv en tono burlón

-Por nada Benson! dije dándole un pequeño golpe el brazo sin la intención de lastimarla, y traté de borrar la sonrisa de mi rostro rápidamente

Salimos y fuimos al auto, mientras yo conducía hacia un bar que estaba cerca íbamos hablando de diferentes cosas y haciendo chistes, pero nada del trabajo.

Una vez que llegamos, nos sentamos, mientras Liv se acomodaba en su asiento yo no podía dejar de mirarla, creo que abrí un poco la boca *¿En qué estás pensando Stabler? Basta!* dije para mí mismo

-¿Qué van a pedir? dijo la camarera que se acercó a nuestra mesa

-Mmmh yo un sándwich completo, dije. Y tú Liv?

Ella me dio una mirada y luego a la camarera

-Lo mismo por favor

-¿Y para tomar? Preguntó la mujer

-Unas cervezas. Respondí

La mujer se fue, Liv estaba en silencio, parecía preocupada, sus ojos lo decían todo.

-Estás bien? Pregunté en tono suave

-Creo, dijo pasándose las manos por la cara

-En qué pensabas?

-Ah no creo que quieras saberlo, y una mueca de risa apareció en su rostro

-Oh sí que quiero! y reí

Ella suspiró y dijo:

-Pienso... -y miró hacia un lado- que tú eres la relación más larga que he tenido con un hombre

Me quedé helado ante tal declaración, no sabía qué responder. ¿Estaría enojada por eso o solamente era un pensamiento? Ella no levantaba la cabeza, en eso llegan nuestros sándwichs y cervezas.

-Gracias, dije mirando a la camarera para que se retire

Liv comenzó a comer y para romper el silencio dije:

-Eso me halaga, y trate de reir

Liv sólo me dio una mirada y rió triste

-Voy al baño, dijo y se levantó

Sólo espero que haya hablado su corazón, pensé y di un largo sorbo a mi cerveza.


                                                                                                                                                                           Continuará...




Te amaré el resto de mis díasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora