– ¿Has cenado algo?– me preguntó Joss mientras salíamos de la sala.
– No, la verdad es que no he comido desde el viaje.
– Entonces vamos a comer.
Caminamos por la estancia hasta dar con la puerta de entrada y desde ahí por el pasillo. Tal como lo creí hace unas horas cuando entre y vi a Callum él venía de la cocina y al fin pude conocerla, aunque en realidad no fue una buena impresión. Había tanto desorden que apenas pude reconocer la enorme mesada en la que supongo debemos comer, ya que casualmente estaba rodeada por 15 sillas.
– ¿Cómo es que todo está tan sucio si apenas llegaron ayer?
- Ya te dije, tuvimos la fiesta de bienvenida.
– ¿Y así es como queda cada vez que hay una fiesta?
– Pues si, por desgracia el fin de semana siguiente debemos organizar la fiesta para todas las fraternidades, pero de ahí cada fin de semana respecta a una fraternidad distinta. Cuando pasen todas volveremos a empezar nosotros.
– ¿Hacen fiestas cada semana?
– Si ¿qué esperabas? ¿Por qué no te gustan?
– Nunca he ido a una.– respondí alzando los hombros.
– ¿Qué? ¿Por qué?– preguntó asombrado.
– Mi madre es... estricta. ¿A ti si te gustan?
– No exactamente, pero voy para estar con mi novio Thom, a él se le dan muy bien.– contestó abriendo la nevera.– ¿Prefieres comer pizza o hamburguesa?
– No lo sé. Jamás he comido comida congelada.
– ¿De qué planeta vienes, Tyler de la madre estricta?
Lancé una risa por su expresión hacia mi y los gestos de su cara.
– No estoy muy segura, pero apenas salí de él y no quiero volver.– respondí.– ¿Qué me recomiendas comer tú?
– Yo quiero una hamburguesa, están buenas.
– De acuerdo, entonces yo también.
Luego de calentar dos hamburguesas y prepararlas me entregó una. Mamá sólo me había dejado probarlas un par de veces, pero siempre eran de lentejas o verduras, así que no olían de esta manera.
– Cómela, no va a hacerte daño.– dijo al ver mi rostro inseguro.
Cerré los ojos y dí un mordisco y... fue como si abrieran las puertas del paraíso sólo para mi.
– Oh Dios, esto está buenisimo.
– Y es solo el comienzo, pequeña e inexperimentada Tyler. Acá cenaras cosas como esta todos los días así que ve acostumbrandote.
– Bien, espero resistirlo.– contesté antes de mi siguiente mascada.– Cuéntame algo de aquí o de los chicos.
– De acuerdo, aunque no se que quieres saber.
– Lo que sea, un poco de cada uno, supongo.
– Bien.– dijo pensativo.– Ya lo tengo. Podrías saber que Oliver se enteró que va a ser padre, nos lo contó ayer, la verdad es que no lo podía creer ya que, bueno, él y Vera llevan juntos mucho tiempo, casi desde primer año, podrían estar acostumbrados a usar protección.
– Woow.– dije sorprendida, recuerdo a Oliver, él de los ojos cansados.– ¿Alguno más es padre o tiene novia?
– No, no hay más padres, pero si que hay relaciones. Mark tiene novia, la conocerás de seguro, estás juntos desde el instituto y pasa la mayor parte del tiempo aquí con Marion, aunque ella venga por Nate.

ESTÁS LEYENDO
Fraternizados
Teen FictionCuando Tyler solo era una niña un accidente automovilistico cobró la vida de su padre, hermana y abuelo, dejando un terrible sentimiento de perdida y dolor en su madre, quien tras lo ocurrido se volvió aprensiva con lo único que le quedaba en la vid...