Luego de aquella magnifica reunión con el Sr. Tomlinson, decidí irme a mi 'hogar' ya estaba algo cansada. La noche me la pase re-mal. No pude casi dormir. Tenía pesadillas, malos recuerdos y varias cosas más. Necesitaba despejarme y distraerme, pero no lo consigo. Luego de una hora, logre dormirme. Fue algo incomodo, porque la mañana siguiente desperté con dolores de cabeza. No sé si es por el embarazo o no, pero es una mala experiencia y justo ahora mi teléfono comenzó a sonar.
-¿Hola? -Contesté.
-Hola, ______. Solo quería avisarte que hoy no habrá clases. No se si ya lo sabias. Las clases serán un día si y dos días no, así que mañana tampoco habrá. Será pasado mañana. -Dijo una voz masculina muy familiar.
-Oh, pues no sabía, pero gracias por avisar, Harry. -Sonreí. -Al rato nos vemos. -Corté.
Al parecer mi amiga había salido, me encontraba sola y no en un buen estado. Decidí levantarme, cocinar algo rápido y luego me vestí con algo cómodo. Luego de vestirme, me cepille los dientes, cabello y puse algo de maquillaje sencillo en mi rostro. Me dirigí a la oficina de Louis y platicamos acerca de las fotografías. Hoy mismo las pondrían en el tamaño adecuado, entonces mañana seria la gran exhibición, y ahora mejor porque Harry me había dicho que no tendría clases de italiano. Fue una muy larga tarde. Me encontraba muy aburrida sola. Mi amiga no estaba, pero no pensaba en llamarla. De seguro tenia cosas que hacer. Harry no sé donde se encuentra, pero de seguro está en las mismas. Entonces solo quedo yo y esta pequeña criatura que llevo en mi vientre. Así que me decidí por ir de compras. Eso si hacía falta. Entraba a cada tienda, me probaba todo lo que me gustaba, compraba todo lo que podía. Observaba ropa, zapatos, bolsos e incluso chicos. Estuve más de tres horas allí. Y podía jurar que me hubiera quedado ahí todo el día, pero finalmente mis pies no podían más. Me dirigí a mi apartamento y de allí, que el destino se encargue de mi.
Narra Niall:
Finalmente estaba aquí. Estaba en Italia. No sabía para donde ir, jamás había venido, pero supongo que hare lo mismo que en México. Solo que espero que esta vez no me secuestren...
-¿Hola? -Contesté la llamada.
-Hola, guapo. ¿Ya llegaste? -Preguntó.
-Sí, sí. Estoy bien, por si preguntas. -Sonreí. -Solo que no tengo información de Italia y mucho menos de ______. ¿Cómo esperas que la encuentre? -Dije.
-Bueno tengo varias cosas que preguntarte y decirte.
-Adelante. -Contesté.
-Primero, ¿Dónde te encuentras?
-Pues llegué a un hotel hace unas horas. Estoy en el piso seis. Me encuentro sentado en un cómodo sillón con la tv encendida. ¿Por? -Pregunté algo confundido, pero después me di cuenta que aun no le había dicho, así que era razonable esa pregunta.
-Pues porque quería saber. -Contestó soltando una pequeña risita.
-Bueno, bueno. Segunda pregunta. -Sonreí.
-Bien. Solo por curiosidad... ¿No se te ah ocurrido llamar a ______? -Preguntó.
-Kelly, no quiero ofenderte, pero eres algo torpe. -Reí por lo bajo.
-¿Por? -Preguntó confundida.
-Porque si la llamo jamás me contestaría. Tiene mi número guardado. -Dije rodeando los ojos.
-Eh, Niall... No quiero ser yo la que te ofenda, pero creo que eres algo estúpido. -Dijo divertida.
- Me estas ofendiendo. -Acepté. - ¿Por qué lo dices?
-Porque existen millones de teléfonos en el mundo, que ______ no tiene grabado en su teléfono. ¡TONTO! -Recalcó la palabra 'tonto' entonces caí en cuenta. Era cierto...
-Eh... Ya lo sabía. -Mentí, pero no valió la pena. La rubia soltó una gran carcajada.
-Claro Horan. Como digas. -Dijo entre risas.
-Está bien, basta. Basta. ¿Alguna otra pregunta? -Dije tratando de no reírme de mi mismo.
-Pues no, pero ahora debo darte una información que me pediste. -Dijo calmándose.
-Entonces comienza. -Dije acomodándome en el sillón.
-Pues al parecer, cuando conocías al padre de ______, trabajaba en otra empresa porno, ¿cierto?
-Sí. -Asentí.
-Bueno, pues su trabajo no era ser estrella de porno. -Eso me llamó la atención. -Era un agente encubierto que se hacía pasar por pornográfico. Al parecer tenían una... misión.
-¿Tenían? -Comenzaba a confundirme...
-Sí. La madre de ______ trabajaba con el. -Añadió. -Son una especie de agentes que trabajan en una compañía que aun no se su nombre. Se dedican a crear una especie de relación con sus víctimas.
-¿Victimas?
-Sí. Tienen expedientes con la información de todas las personas que conocen y de las que no. Los examinan, hacen relación con ellos y luego los atrapan en su propio juego. Son personas que quieren hacer mal o están haciendo algo mal inconscientemente, entonces ahí es donde interfieren los padres de ______ y detienen esto.
-¿______ sabe de esto? -Pregunté.
-Al parecer, no; pero es muy importante que no le digas a nadie, Niall.
-Claro que no, pero aun no se la contestación a mi pregunta... ¿Están vivos o no?
-Bueno, eso es lo que te iba a comentar. Hay cosas que prueban que no, pero hay cosas que dicen que si. Es una información algo complicada. Realmente ahora mismo no lo sé. Cambiando el tema... sobre ______.
-¿Ajaa?
-Pues sus padres, como bien había dicho, le heredaron una casa en Roma, Italia. Queda en la calle ___________ (Invéntala), sector 19. No tiene vecinos. Es una casa totalmente sola en esa calle. Es una casa blanca de dos pisos. Piscina y buen terreno. A pocos metros hay un lago entremedio del bosque. Es muy lindo por allí.
-Perfecto. ¿Segura que está allí? -Pregunte levantándome de mi asiento para ir a buscarla.
-No, Niall. -Me detuve. -No estoy segura, porque aquí dice que nadie esta ocupando esa casa ahora mismo. -Dijo un tanto apenada.
-¡Demonios! -Me volví a sentar.
-Creo que primero deberás buscar por la ciudad, como lo hiciste en México. Pero Niall... -Calló.
-¿Qué pasa Kelly? ¿Por qué te detienes? -Dije algo curioso.
-Hay algo más importante que esto. -Dijo en un tono serio.
-Me estas preocupando Kelly, ¿Qué sucede? -Comencé a preocuparme.
-Estuve buscando información sobre aquel tipo que te secuestró. Busqué en la lista de los más buscados de México y en ellos sale un tipo de ojos claros, algo de cicatrices, nariz algo ancha, piel blanca, estatura alta, brazos fuertes y espalda ancha.
-Puede ser él. Así era exactamente; pero quizás es otra persona. -Dije siendo realista. Aunque me encantaría que fuera él y así darle su merecido.
-Eso no es todo Niall. -Dijo algo desesperada.
-¿Qué es entonces? ¡Dímelo ya! ¡Me desesperas!
-Es que ese hombre... -Calló.
-¡¿Ese hombre que?!
-Se apellida ______ (Tu apellido)...