Narra Niall:
Muerto. Me sentía muerto. La manera en la que ______ pronunció esas palabras. La seguridad con que las dijo. ¿Por qué me estaba sintiendo así? ¿Por qué quería un hijo con ella?
-De acuerdo. -Tragué saliva. -Adiós, hermosa. Entiendo que ya no quieras verme. Estoy en el piso seis. Mi habitación es la misma que esta. Llamaré y me iré de Italia mañana. Creo que eso es lo que quieres. -Comencé a voltearme para irme.
-Niall. -Me agarró por un brazo y me detuve. La fierecilla me hizo sentir satisfacción.
-¿Olvidé algo? -Pregunté, sabiendo que esa no había sido la razón porque me había detenido.
-No. -Suspiró.
-¿Entonces? -Me voltee para verla mejor.
-No te vayas. -Me miro justo a mis ojos. Dándome una mirada profunda.
-Hermosa, sabes que no quiero hacerlo, pero tú lo dijiste, no podemos estar juntos. Y ahora esperas un niño que no es mío, entonces no quiero molestarte más. -Dije actuando un poco. Las palabras eran ciertas, pero mi actitud no. Sé que estaba mal hacerlo, pero era la única manera por la cual ella volvería. Y sinceramente... no quiero perderla de nuevo.
-¿Niall? -Dijo en forma de pregunta. Luego miró al suelo.
-¿Si, princesa? -Tome su barbilla en mi mano y levante su mirada.
-Tú eres el...
-¡¿NIALL?! -Gritó desesperada, provocando que ______ y yo brincáramos. - ¿Qué demonios haces aquí? -Su tono era bastante alto. - ¿Estuvieron llorando? ¿Te aprovechaste de ella? ¿Cómo pudiste? -______ se escondió en sus manos para llorar en silencio y la abracé.
-No es lo que crees. -Dije mientras acurrucaba a ______ en mi cuerpo.
-¡Suéltala! No la toques. Esta llorando por tu culpa. ¡Animal! -Sacó a ______ de mis brazos y no me negué, no iba a pelear con ella. -______, mírame. -Esta vez, susurrando. ______ siguió instrucciones. -Dime, ¿Qué hace el aquí? -Ambas me miraron. Este era el fin de mis días. Si ______ le decía que tuvimos sexo y ella estaba borracha, va a matarme.
-Ayer nos encontramos en el bar, me pidió que habláramos y así lo hice. -Dijo volviendo su mirada a ella. No sabía qué hacer. ¿Estar feliz o triste? Feliz porque no nos delató o triste porque ella está mal.
-¿El pasó la noche aquí? -Volvió a subir un poco su tono.
-¿Qué es lo que pasa aquí? ¿Por qué rayos gritan? ¿No ven que estoy tratando de dormir? -Gritó el rizado. Teniendo en cuenta que solo lo cubrían sus bóxers. Luego observó la escena. -M¡erda. -Susurró, pero pude escucharlo. -Nena, ¿Por qué m¡erdas lloras? -Se acercó rápidamente a ella para darle un fuerte y cálido abrazo; lo que produjo en mi algo de rabia.
-Harry, ¿podemos hablar a solas? -Preguntó ella.
-Claro que si, preciosa. -Asintió y aquella última palabra volvió a molestarme. Ambos entraron a la habitación, mientras que yo seguía parado con la pelirroja.
-¿Quieres decirme que demonios sucede contigo? -Pregunté. Creo que estaba algo molesto. Bueno, mejor dicho... demasiado molesto.
-¿Quieres decirme que demonios haces aquí? -Me contestó con una pregunta. ¡Genial!.
-Te hice una pregunta. -Respondí.
-Y yo a ti. -Respondió.
-Bien. Mujeres primero, así que contesta. -Arquee mis cejas.
-¿Cómo te atreves a preguntarme qué demonios me pasa? ¿Acaso eres tonto o te haces? Me pasa que llegas aquí de la nada queriendo llevarte nuevamente a ______ y eso no te lo voy a permitir. La hiciste sufrir, la hiciste llorar, luego te acuestas con una/
-¡BASTA! -Grité. -Ya sé lo que le hice. No hace falta que me lo repitas. -La miré con odio.
-Pues eso es lo que me sucede. No voy a permitir que hagas sufrir otra vez a mi mejor amiga. Y ahora mucho menos.
-¿Y por qué ahora? ¿Qué sucede con ella?
-N- Nada. -Tartamudeó.
-¿No me vas a decir que está esperando un hijo? -Arquee mis cejas nuevamente.
-¿Quién te dijo eso? -Dijo algo nerviosa.
-Ella lo hizo. ¿Te molesta?
-Pues fíjate que sí. -Puso sus manos en su cintura.
-¿Y por qué te molesta, Val?
-¡Porque tú eres el maldito padre! Por eso me molesta.
-¿Qué?
Narras Tú:
No sabía qué hacer. Niall no sabe que espera un hijo, Val está como loca y Harry no para de consolarme. Está más deprimido que yo. Me sigue repitiendo lo mucho que le duele verme llorar. Y si, aquí estaba yo... la tonta de _______ que solo por enamorarse estúpidamente del chico que más le hizo daño, termino así. ¿Pero que mas podía dar? Yo ya no podía cambiar nada, él jugó con mis sentimientos y yo de tonta le creí. Lagrimas y mas lagrimas eran la única presencia que tenía en estos momentos, claro que también a aquel bebe dentro de mí. Muchas en mi lugar tal vez se arrepentirían y quisieran matar a aquella criatura, pero yo no, porque torpemente me deje llevar y ¿Por qué no decirlo? Torpemente sigo enamorada de aquel hombre, del padre de mi hijo. Y ella me lo dijo varias veces: "No te acerques a él, solo te romperá el corazón", pero me deje llevar por su buen rostro y su buen cuerpo... sobre todo por los sentimientos que decía tener hacia mí, ¿Y ahora como estoy? Devastada, decidiéndome entre decirle o no, aunque no cambiaré nada; solo pensará que el bebe es una arma para tenerlo a mí y no lo quiero, lo amo pero no lo quiero tener atado a mi solo por eso.
-Hermosa, debes dejar de llorar. -Se sentó a mi lado.
-Harry, ya no se que mas hacer. Lo intento todo, intento alejarme, pero él regresa. Lo amo, Harry; y ahora no se qué hacer. -Me recosté de su pecho desnudo.
-Hermosa, ¿Qué es lo que sucede? ¿Qué es lo que necesitas? Solo dime y lo haré.
-Harry, necesito saber si decirle o no que él es el padre de mi bebé. -Me separé para ver aquellos ojos color verde.
-¿Qué crees que sea mejor?
-Aun no lo sé. Pero no puedo vivir escondiéndole la verdad y tampoco puedo decírselo para que se quede junto a mi solo por eso. -Miré al suelo.
-______, yo... Yo hablé con él. -Suspiró.
-¿Qué?
-El día de la exhibición él estaba allí. Estaba viendo tus fotografías y logró ver a Val por su cabello. -Lo miré interesada en lo que diría. -Yo le dije que fuéramos a hablar.
-¿Le hiciste daño? -Pregunté. Él soltó una carcajada.
-Hermosa, no soy ese tipo de hombres. Ya te lo dije. -Sonrió.
-Lo siento. -Me avergoncé. Es cierto. Harry jamás haría daño. -Bueno, sigue.
-Bien, pues, sinceramente... -Cambió su expresión. Ahora estaba algo serio. -Él te ama, ______. -Mi corazón dejó de latir. Los escalofríos comenzaron a apoderarse de mí. Lo miré sorprendida.
-Él me... ¿ama? -Pregunté con algo de dificultad.
-______, no quise decírtelo. Veía como sufrías por él y solo quería que lo olvidaras y comenzaras una nueva vida, pero creo que me equivoqué. Tú lo amas y él te ama. Me suplicó que le dijera dónde estabas. No se lo dije y casi llora. -Reímos. -En fin, no dejes que tu oportunidad de ser feliz se te escape. Ve y dile que ese bebé es suyo. Dile que lo amas y solo dile a Val que los deje en paz. Ella está algo hueca. -Reímos. -Okay, no está hueca, pero te ama y te quiere demasiado. Habla con ella. Creo que es lo mejor. Habla con ambos.
-Gracias, Harry. No sé qué haría sin ti. -Sonreí y lo abracé.
-De nada, princesa. Solo no te acerques mucho porque no quiero que provoques una erección inapropiada en mí. -Sonrió y respondió mi abrazo. Reí y me separé de él. Besó mi frente y salimos.
