Narras Tú:
Luego de aquel delicioso desayuno, decidí ayudar a Val con los platos y las cosas que habíamos usado. Dejamos la cocina exacta. Pusimos algo de música y nos sentamos en aquel cómodo sillón a pintarnos las uñas. Estuvimos alrededor de tres horas haciendo eso y recogiendo y limpiando un poco. -Hermosa, hoy habrá una fiesta de antifaces en casa de Liam, ¿lo recuerdas? Estudiamos con el en la secundaria. -Dijo Val. -Oh, por supuesto. ¿Y vas a ir? -Pregunte amablemente. -¿Cómo que si voy a ir? ¿Sola? ¡Amiga, iras conmigo! -Dijo divertida. -Pero es que a mi no me han invitado, no puedo llegar así porque si. -______, ya hable de eso con Liam, y me dijo que estaba bien. Tu iras conmigo, y no se dice mas nada. -Se levanto de aquel sillón y dio un leve brinco de felicidad. -Ahora busquemos lo que nos vamos a poner. -Sonrió. Me agarro por la mano y me llevo corriendo hasta su closet. Tenia una gran cantidad de hermosos vestidos en el. -Vaya, son hermosos. -Dije sonriendo. -¿Cuál te pondrás tu? -Pregunte. -Este. -Cogió un vestido negro que asentía muy bien con su color de piel. Era algo ajustado y escotado. No se veía nada mal. Y me aseguro de que puesto se le verá más hermoso. -Es hermoso. -Sonreí. -Te quedara perfecto. -Ella sonrió también. -Bueno, tu turno. Escoge uno. El que quieras. -Puse mi vista en los vestidos. -Em, ¿Qué dices de este? -Escogí un vestido color crema largo y no tan ajustado. -Cariño, te veras horrible en el. -Hizo una mueca y negó con la cabeza. Me quito el vestido y lo arrojo a la cama. -Vamos, elige otro. -Sonrió. -Bien. -Suspire. -¿Qué tal este? -Saque uno negro no tan parecido al de mi amiga, pero un poco mas ajustado. -Oye, no quiero que te veas igual que yo. -Lo tomo y lo tiro a la cama también. -Pruébate este. -Dijo sacando un vestido rojo como la sangre. Ajustado, escotado y con unos hermosos brillos en el. Era el traje perfecto. Me dirigí al baño y lo puse en mi cuerpo. ¡Vaya! Qué hermoso era. Salí a la habitación de mi amiga y me dirigí a donde se encontraba. Abrió los ojos, de asombrada. -______, es perfecto. Te queda perfecto. Y tu color de piel y el color de tu cabello, hacen una perfecta conexión con él. Te veras preciosa. -Dijo aun asombrada. Estaba más emocionada que yo. La verdad es que si me quedaba muy bien. -Dejaras a todos los chicos con la boca abierta. -Sonrió divertida. No pude evitar soltar una carcajada. -Hay Valentina, ¿sabes que te amo, verdad? -Dije dándole un abrazo a la pelirroja. -También te amo, ______. -Dijo correspondiendo a mi abrazo. -Gracias por siempre estar aquí. -Sonreí y me aleje un poco. -Siempre lo estaré. -Sonrió también. -Bien, ahora quítate el vestido y busquemos nuestro antifaz.