2da TEMPORADA "Tras una pantalla, Tito Willy" (Willy Fanfic.)

Una vida.

Me quede mirando a Mich, totalmente alelado. No podía creerme que ella estuviera allí, delante de todos, sonriente y dando un concierto privado para nosotros. 

Se había currado la sorpresa, y mucho.

Y al parecer por la cara de todos, ninguno de nosotros teníamos ni idea.

-Te juro que no sabía nada de esto...- dije a Luzu, sin poder apartar los ojos de Mich. Cantaba bien, cantaba realmente bien.

Me sorprende que no me haya dicho nada antes. A ver, no es algo con lo que te presentas, pero no sé, soy su novio, igual comentarlo por encima...También me sorprende no haberla oido nunca, pero ahora que lo hago, he de admitir que da gusto hacerlo.

Ella allí arriba, en el escenario cochambroso de un local enano de Madrid, vestida con una camiseta negra holgada con una cruz dorada, unos shorts vaqueros, unas medias transparentes negras, y unas botas; de lo más rockero, disfrutando de lo que hace con una sonrisa, y nosotros aquí abajo, tarareando aquellas cosas que nos sabemos, silbando, moviendonos al son de la música y pasándolo increíblemente bien.

Un buen cumpleaños, aquel que nos hacía falta a todos. Aquel que cierra una etapa.

Y por supuesto, abre otra.

Enmedio de todo el jolgorio, miro a Mich, y Mich me mira a mi. Lo hace de esa manera suya, propia, especial, con ese brillo y esa tonalidad azul que...me vuelve loco. Me transporta tiempo atrás, al principio de todo. Joder, cuanto ha cambiado mi vida en este tiempo...Ha sido una auténtica montaña rusa, lleno de subidas y bajadas, y ahora me encuentro en el punto más alto, y no le tengo miedo a bajar, porque sé que volveré a subir, y sé quien me va a acompañar.

Miro a mi alrededor. Alex, Luzu, Frank, Lana, y Mich. Ellos me acompañarán. Siempre.

Y oigo los primeros versos de "I Must Be Dreaming." de The Maine. La canción me viene al pelo para el momento. Me dejo llevar, tanto como Mich encima del escenario. Hace la canción suya, la disfruta, y yo con ella. Sé todo lo que esas palabras significan. Miro a Mich, y ella me dedica una sonrisa y me guiña el ojo.

Los pelos de mi nuca se erizan, mis músculos se contraen, y siento una corriente eléctrica por mi espalda. No puedo apartar los ojos de Mich, estoy totalmente hechizado por ella, por su contoneo, por la atmósfera de humo, gente y alcohol. Y entonces lo que más deseo es perder el control, con Mich, que este junto a mí ahora mismo. La idea me impacienta.

Y el concierto termina, pero no lo hace la fiesta. Aunque yo tengo la cabeza en otro lugar. Corro a los pies del escenario, y observo a Mich mientras se baja de él. Me acerco hacia ella, y la abrazo fuertemente contra mi pecho.

-Veo que te ha gustado la sorpresa.- se ríe,  y  su risa me vuelve aún más loco.

-Más me gustas tú.- y la beso. Pero es un beso diferente. Descarga todo lo que siento ahora mismo dentro de mí, y enseña todo lo que deseo. Mich no rechaza ese beso, haciendo los sentimientos mutuos. Solos ella y yo.

Nos separamos, y Mich me mira con ojos de cachorrillo. Maldita sea, sabe como controlarme.

-Te quiero.- y esa dulzura, esa expresión, sus facciones, suaves y tiernas...

-Eres increíble.- la miro, apoyando mi frente en la suya, pues la supero bastante en altura.- A parte de una caja de sorpresas.

-Y yo soy la chica muy afortunada.- se muerde el labio inferior, traviesa, y yo la observo, y siento que podría observarla días, meses, o quizá...

...quizá una vida.