Ginny y Hermione seguían buscando algún rastro de Ron y de Harry, llevaban mas de medio día entrando y saliendo de lugares preguntando por ambos y nadie había visto nada.
-Como sigamos sin encontrarlos me voy a desesperar y voy a llamar a los demás aurores.- decía la pelirroja.
-Ginn, por favor, no te desesperes mas, no pueden estar muy lejos, hemos recorrido casi todo el callejón Diagon, aun nos quedan sitios por ver.- decía Hermione acercándose a Ginny para trsnquilizarla.
La pelirroja suspiró, aun la quedaba algo de esperanza.
-Esta bien, vamos a buscar a los sitios que quedan, no pienso parar hasta encontrar a Harry.
Mientras tanto en el hostal, la lucha seguía.
-Potter, ¿quieres hacer esto por las buenas, donde nadie saldrá perjudicado, o por las malas, donde mucha gente saldrá perjudicada incluidas la hermosa pelirroja y la hermosa castaña?
Ron, al oír eso quiso lanzarse a matar a ese bastardo, pero Harry lo cogió.
-Ron, ¿se puede saber que haces?- preguntó Harry.- no hagas ninguna tontería y déjame a mi ocuparme de este canaya, salir todos fuera, ya.
Los aurores, muy poco convencidos, salieron del hostal, excepto Ron.
-¿Que haces? ¿Porque no sales?
-Harry, no me parece buena idea, tienes a Ginny, nos tienes a nosotros, tienes una familia, no puedo dejar que te expongas.- decía el pelirrojo mirando a su mejor amigo.
-Ron, por favor, hazme caso y sal afuera, sino quieres que yo mismo te heche, yo puedo con este imbécil, confia en mi.
Ron suspiró, sabiendo que era inútil seguir reprochando a su amigo, así que le obedeció y salió.
Ginny y Hermione seguían calle por calle, hasta que finalmente, Hermione vio de lejos a Ron.
-Oh dios mio, Ron- la chica se tiró a los brazos de su novio para acto seguido besarlo.- me tenías muy preocupada.
-Ron, ¿donde esta Harry?.- preguntaba Ginny.
-Ginn.-dijo Ron.-el esta bien.
-No andes con tonterías y dime donde esta Harry.
-Esta dentro, con Rookwood.
-¿QUE? ¿Y HABEIS DEJADO QUE SE QUEDE SOLO?- gritaba la pelirroja.
Ginny, entró dentro no sin escuchar los gritos de Hermione y de Ron detrás de ella.
-Ginny.-Ron la cogió por la cintura.- ahora soy yo el que te pregunta si estas loca, crees que piensas que te voy a dejar entrar?
-Ron sueltame, quiero ir con Harry, no quiero que le pase nada.
-Que no, es que no lo entiendes?
-Que me sueltes.- le dio con la varita en las manos haciendo que Ron la soltara para salir corriendo hacia dentro.
-Vamos Potter, rindete ya.- decía Rookwood sonriendo victorioso.
-No pienso rendirme hasta que te vea metido en Azkaban.-dijo el azabache, con sangre en casi toda la cara.
-Esta bien Potter, que gane el mejor.-Rookwood volvió a poner varita en alto y empezó a lanzar hechizos contra Harry.
-Desmaius. Reducto.- Harry hacía lo mismo
-HARRY!- gritó Ginny cuando lo vio.
Rookwood y Harry pararon, y se giraron viendo como la pelirroja estaba parada en frente de ellos con la respiración agitada.
-Ginny- Harry se acercó a ella- ¿que diablos haces aquí?
-Buscarte. Eso hago aquí.
-Vaya Potter, despierta es incluso muchísimo mas hermosa.- dijo Rookwood haciendo que Harry se girara a mirarle.
-Ginny por favor sal fuera.-se miraban.
-Tu estas loco si piensas que voy a dejarte.- dijo Ginny.- Harry, no quiero perderte.
-Y no lo vas hacer, por favor Ginn, sal fuera.- Harry se acercó mas a ella. entrelazó sus manos, y la besó.
-Harry, no quiero verte después en brazos de otra persona sin vida, no quiero.- Ginny tenía lágrimas en los ojos, ese era su mayor miedo, perderle.
Harry limpió las lágrimas de sus ojos.- No me va a pasar nada.
-Venga Potter, después de matarte tengo otras cosas que hacer como conocer a tu chica- Rookwood sonrió.
A Harry se le llenó la sangre de ira y cuando vio que Rookwood se distraía un poco, aprovechó.
-Avada Kedavra.- Harry lanzó la maldición contra Rookwood.
Rookwood se encontraba tirado en el suelo, Harry había terminado con el después de 3 años siguiéndole.
Todos loos aurores y Hermione, entraron al hostal para ver que había pasado.
Ron se acercó a Harry.- No vuelvas a decir que te dejemos solo, porque te las verás conmigo tío.- ambos rieron y se abrazaron.
-Me alegro de que estés bien Harry.- Hermione abrazó a Harry.
Todos salieron, los aurores con Rookwood a cuestas y Ginny y Harry se quedaron dentro.
-No vuelvas a irte sin avisar Harry Potter.
-Lo siento, pero tenía que capturar a ese imbécil.- dijo el azabache, tranquilizando a la pelirroja.
-Gracias a Merlin que estas bien, vámonos a casa a curarte las heridas.- dijo Ginny con sus manos entrelazadas.
-Te dije que no me pasaría nada Ginn.
-Lo se Harry, pero nunca respiro tranquila hasta que no llegas a casa y veo que estas bien.- Ginny lo besó.
Harry la cogió las manos y la miró.
-Puedes respirar tranquila Ginn, estoy aquí contigo.- dijo el azabache retirándola una lágrima.
Ginny lo besó, sabiendo que no sería su último beso.
Holaaaaa,
Bueno, se que he tardado mas de una semana en subir, pero aquí esta la segunda parte.
Espero que os haya gustado y que haya muchos votos y comentarios.
Quería pediros que si no es mucha molestia echárais un ojo a mi novela "La chica invisible" que está en mi perfil, sería un placer para mi que la leyerais.
Muchas gracias también, por los casi 2000 leídos, de verdad, nunca pensé que estas pequeñas historias llegarían a tantos leídos, sois los mejores a pesar de ser invisibles.
Intentaré actualizar pronto.
Un saludo,
una chica feliz.
