Antes de empezar el relato, decir que irá sobre la tercera generación y serán adultos. Gracias.
Había tenido un duro día de trabajo y por la tarde había quedado con su madre par tomar el té, estaba cansada y solo quería llegar a su casa y darse un baño con Lorcan. Abrió la puerta con un movimiento de varita y subió a su habitación. Antes de llegar a la puerta, es más antes de siquiera llegar al pasillo se oyeron voces, voces provinientes de su cuarto, eran dos, y una de ellas era un risa de mujer. La otra la reconocía a la perfección, era la de Lorcan. Por su cabeza estaba pasando lo peor, ¿acaso Lorcan la engañaba? Fue prácticamente corriendo hacia la puerta de su habitación y con un alohomora abrió la puerta pillando a su marido y a otra mujer en la cama besándose. Lorcan se separó de la chica y rápidamente salió de la cama.
-Lily- se acercó a ella. - no es lo que parece.- intentó tocarla.
-No me toques- dijo la pelirroja en un hilo de la voz.
Apartó de un empujón a Lorcan y en vez ponerse a llorar y a discutir, cogió una bolsa grande y empezó a meter la ropa que más a mano tenía. Que tonta había sido, todo el mundo se lo advirtió, un Scamander nunca cambia.
-¿Lily que haces? - el chico preguntó a su mujer y ésta sólo lo miró para acto seguido salir de la habitación dando un portazo.
Lorcan salió corriendo tras ella pero era demasiado tarde había cogido su abrigo y se había marchado.
La pelirroja se encontraba en una cafetería pensando a donde ir, ¿a casa de sus padres? No, no podía, no podría ver la cara de su madre después de contarla lo de Lorcan. ¿A casa de albus o de James? Tampoco, lo mataría. - suspiró - sólo la quedaba una opción. Dejó unas monedas en la mesa y se levantó.
Antes de llamar al timbre volvió a suspirar, no sabía que decir, que hacer, como decírselo. Cerró los ojos y llamó.
-¿Lils? - preguntó el rubio.
-Scor- la pelirroja soltó la bolsa en el suelo y se tiró a los hombros del rubio rompiendo en llanto.
-Hey ¿Qué ha pasado? - el rubio le acariciaba el pelo mientas ella seguía llorando.
-Scorpius ¿quien es? - otra pelirroja fue a la entrada. - ¿Lily?
Lily les contó todo a sus amigos, se moría de la vergüenza y no podía mirarles a los ojos.
-Yo... Yo no sabía a donde ir, lo siento. - dijo sentada en un sofá con la mirad al suelo.
-Puedes quedarte el tiempo que quieras- dijo rose. - ahora que ese Scamander ya puede huir del país si no quiere morir.
Scorpius la miró. - tienes razón Rosi.
Lily cerró los ojos, sentía vergüenza por su marido, la había estado engañando y a saber por cuanto tiempo, se sentía estúpida por no haberlo averiguado antes.
-Lily deberías descansar, ¿por qué no te acuestas un rato?. - preguntó su prima.
-Yo, yo no quiero causaros problemas.
-Nos nos causas nada. - dijo la pelirroja levantando a sí prima y llevándola al piso de arriba para que se acostara un rato.
-Scor, tenemos que avisar a alguien.
-¿a quien Rose?- pregunto el rubio.
-Pues a Albus, él ya sabes que tiene más afecto por Lily. - dijo la pelirroja. - mándale un patronus y dile que venga que es urgente. Lily no puede huir de ellos toda la vida.
Scorpius suspiró, ella tenía razón.
A la media hora un azabache se encontraba en casa de sus amigos.
-Y bien, ¿cuál es el problema?
Rose y Scorpius se miraron entre sí, no sabían que decir ni cómo explicárselo a Albus.
-Lily está aquí. - soltó Rose.
-¿Como Lily? ¿Porque? - dijo Albus.
-Albus, Lorcan a engañado a lily con otra mujer. - soltó Scorpius. - ¿Qué? Es que si no no se lo hubiéramos dicho nunca. - dijo mirando a su mujer.
-Scorpius lo que me estas diciendo es broma ¿verdad? - dijo Albus que ya tenía la varita preparada en la mano para ir a buscas a Lorcan.
-No Al, Lily se ha encontrado a lorcan está tarde con otra mujer en la cama. - dijo Rose esta vez.
Hola, los errores serán corregidos en su debido momento.
Gracias por leer.