Era la octava carta que recibía este mes, la segunda de la semana, no sabía que hacer, cada carta decía una cosa diferente, y siempre terminaba con el mismo nombre, Dolohov.
Ginny se encontraba leyendo la carta que hace unos minutos una lechuza le había traido a su despacho del ministerio, cada carta era una amenaza nueva, y si no hacía lo que el decía haría daño a su familia.
Las lágrimas estaban asomando por sus ojos, esta vez era diferente, no solo la había amenazado también la había dicho que se reuniera con el esta tarde si no quería quedarse viuda.
Dejó la carta encima de la mesa y posó sus manos sobre la cabeza, no sabía que hacer.
-Ginny?.- la voz de Hermione hizo a la pelirroja sobresaltarse y coger la carta para ponerla detrás de ella.
-Hermione.- sonrió.- ¿que haces aquí?
-He terminado hoy temprano mi trabajo.- dijo sentándose.- y como Harry y Ron tienen una reunión, he pasado a verte.- la miró.- oye, ¿estas bien?.
-Si.- la pelirroja sonrió varias veces.- estoy muy bien.
-Ginny, ¿que tienes ahí detrás?- Hermione se levantó para ver que tenía Ginny.
-No es nada Herms.- la carta estaba flotando en el aire detrás de Ginny.
Hermione que no acepta un "no" por respuesta, vio la carta flotando.
-¿Que es esto?.- la castaña la cogió y la abrió para leerla.
Ginny, que ya no podía ocultársela, se sentó.
-¿Otra vez?.- preguntó Hermione.- Ginny por favor, es la segunda de esta semana.
-Lo sé. Pero no puedo hacer nada Hermione, tengo que ir.
-JÁ! Ni loca te dejo ir allí, y menos sola, y a reunirte con ese "señor".- dijo la castaña.
-Tengo que ir.- la pelirroja volvía a tener lágrimas.- me está amenazando con hacer daño a Harry.
-Ginny, me da igual. No puedes arriesgarte a que te pase algo, y encima en tu estado, estas loca si piensas que te voy a dejar salir de aquí.
-Hermione sabes que si algo le pasa a Harry yo me muero.- dijo la chica.- Yo me muero.
-Si, y si algo te pasa a ti o a alguno de vuestros hijos el se muere.- dijo la castaña caminando hacia la puerta.
-¿Donde vas?.
-¿No es obvio? A contarle a Harry lo que está pasando.- dijo Hermione enseñándola la carta.
Ginny fue corriendo hacia Hermione.- No puedes contárselo.
-¿Porque?, vamos a ver Ginny, acepté no decirle nada a Harry cuando me lo contaste por que me lo pediste por favor, pero ahora, aunque me lo pidas se lo tengo que decir, por Merlín ¿es que no te entra en la cabeza?, es por tu seguridad y la de tu hijo.
Ginny cerró los ojos sabiendo que Hermione tenía razón.
-O se lo dices tú, o se lo digo yo.- Hermione esperó un segundo para que su amiga la respondiera.
-Vale!- dijo Ginny.- se lo digo yo, pero acompañame.
Ambas chicas salieron camino a la planta de aurores. Cuando llegaron, las dejaron pasar puesto que la ministra de magia estaba ahí.
Los chicos estaban en una reunión cuando uno de los aurores avisó de que Ginny y Hermione estaban allí.
-Jefe, Weasley, sus mujeres están en la puerta.- avisó el auror.
-Seguimos luego.- dijo Harry.- que pasen.
Hermione y Ginny entraron, y ambas fueron a saludar a sus maridos.
-Ginny. ¿Estas bien?- preguntó Harry.
-Si.- dijo Ginny para besarle.- tenemos que contaros una cosa.- miró a Hermione.- tengo que contaros una cosa.
-Ginny, ¿que pasa?.- Harry sabía que algo la pasaba, la conocía demasiado bien.
-Durante este mes he estado recibiendo unas cartas, en concreto dos por semanas.- dijo Ginny sin poder quitar la vista de Harry.- al principio, no sabía quien era ya que firmaba de forma anónima, pero cuando recibí la quinta carta, había firma, siempre me decía lo mismo, que hiciera una serie de cosas y que si no lo hacía me amenazaba diciendo que te haría daño.- seguía con la vista fija en su marido.- Hoy he recibido otra, diciéndome que me tenía que ver esta tarde con el, y que si no lo hacia el mismo vendría a matarte Harry.- estaba nerviosa.- las cartas son de Dolohov.
Ron y Harry se miraron.
-¿Y porque no me lo habías dicho antes?.- preguntó Harry quitándola practicamente la carta que llevaba en sus manos.
-Tenía miedo Harry, no sabía que hacer, estaba asustada, y recurrí a Hermione.- la miró.- Pero por favor no os enfadéis con ella, yo misma la pedí que no os dijera nada, sobre todo a ti Harry.
Harry la miró, no estaba enfadado con ella, por Merlín nunca lo estaría, estaba confuso, ¿porque Dolohov la envió a ella las cartas y no a el?.
Ron, quitó la carta a Harry antes de que pudiera terminar de leerla.
-Sabes perfectamente que no te dejaremos ir a reunirte con el ¿verdad?- dijo Ron.
-Pero si no lo hago hará daño a Harry.- dijo Ginny que fue hasta Harry para mirarle.- no quiero que te hagan daño.
-Por Merlín Ginny, no pienso dejar que vayas, me moriría si te pasara algo a ti, y lo sabes, sin ti yo no puedo vivir.- la miró.- y si le pasara algo a alguno de nuestros hijos, también me moriría.- dijo el azabache tocando su vientre de apenas dos meses.
Ginny, abrazó a Harry, en sus brazos se sentía segura, protegida.
-Nosotros iremos a por el.- dijo Harry mirando a Ron.
-¿Que?. preguntó Hermione.- no.
-Herms mi amor.- Ron la miró.- ahora Harry y yo vamos a ir a por ese imbécil y vosotras os vais a quedar aquí quietas, ¿vale?.- la besó.
Ginny miró asustada a Harry.
-Tranquila, todo va a estar bien. ¿donde te ha dicho de reunirte con el?
-Me mandó una nota aparte diciendo que en la posada que esta abandonada del callejón Diagón.
-Esta bien.- Harry la besó.- ¿mejor porque no vas a casa de Ron? Estaréis mejor.
Hermione asintió, besando a Ron y diciéndole que tuviera ciudado, acto seguido abrazó a Harry y Ginny a su hermano.
Cuando se separaron, Harry y Ron ya se habían ido.
Holaaaa, bueno este capítulo también tendrá segunda parte.
La verdad que cuando pensé en hacer este relato, en mi cabeza me lo imaginaba mejor.
No creo que sea buenoo, pero escribiré la segunda parte.
Nos leemos pronto,
Ines.
Por cierto, antes de nada, me he cambiado el user, por si me buscáis y no me encontráis.
Un saludo :)
![](https://img.wattpad.com/cover/110430747-288-k449353.jpg)