Un Par De Lunáticos Coreanos

Capítulo: 48 "¡NO entres! "

El ambiente el auto ya no es el mismo que el de la mañana. Ahora todos van en un silencio incómodo. Chin Hwa quiso que me sentara a lado de él.

Hace un rato miró toda la escena que armamos Robert y yo. Me vio llorar, creí que está furioso al igual que mamá.

— ¿Sabías que estoy orgulloso de ti? —Chin Hwa dijo de repente. —Rompiste todas las reglas de Oman ha. Acabaste con el ego de ciertas personas —Mira por el espejo retrovisor a Dae Hyun.

—Oye ¡Mi ego sigue intacto! Pero las ideas de Jenna y su amiga son muy buenas, deberías dedicarte a los negocios. Te quisiera en mi equipo de trabajo, así como tu madre y mi Hyun son equipo. — Dae Hyun sonríe.

—A Jenna no le interesa eso Dae Hyun —Mamá dice—Ella será una gran actriz.

—Será una de las buenas—Dice Chin Hwa y toma mi mano—Que nada ni nadie apague tu estrella Jenna, por qué brillas cegando a todo el mundo.

Robert no habla, ni siquiera mira a nadie, sólo asiente a las preguntas que le hace mamá. Al llegar a casa bajo de la Jeep. Me quedo estática al ver el auto de Chung hee aparcado en el estacionamiento.

Está sentado al lado del estanque. Me sonríe en cuanto me ve, pero al instante se le borra la sonrisa cuando me ve sollozar.

—Rubia... ¿Qué te pasa? —cubro mi rostro avergonzada y siento como me enreda en sus brazos.

—Chung hee... —Chin Hwa dice acercándose a nosotros—lleva a Jenna a caminar, necesitamos hablar con...

Me separo de Chung hee para ver a Robert estático a lado de mamá.

—De acuerdo. — Chung hee se separa de mí e hizo que caminara junto a él.

No veo a Dae Hyun por ningún lado antes de salir, supongo que fue adentro de casa cuando vio a Chung hee. Salimos de casa y caminamos por la calle, el sol está dando sus últimos rayos, debe ser tarde ya.

—Habla Jenna ¿Que sucedió para verte así? Nunca te había visto así. —Chung hee está preocupado odio verlo así.

Le dedico una sonrisa.

—Robert y yo terminamos. Definitivamente. —Él me mira sorprendido—Conoció a otra persona y...

—Olvida todo ¿Quieres? Odio verte a sí por un patán. ¿Qué tan especial es para que tu ánimo esté así? ¡Es muy.... Americano! Admítelo los coreanos somos más apuestos.— Yo suelto una risa.

—Todos son muy parecidos. De hecho creo que ya no tanto, me he acostumbrado a mirar a los coreanos que ahora no se parecen. —Digo limpiando mis lágrimas.

— ¡Ja! Obvio que no somos parecidos. Pero si los coreanos somos más apuestos que los chinos y japoneses.

Ver tan ofendido a Chung hee me provoca mucha gracia. Su vanidad no debe ser destruida.

—Pues yo no sabría diferenciar entre todos, yo a todos los asiáticos antes de conocer a Chin Hwa creía que eran chinos. Admítelo también ustedes piensan que todos los extranjeros son americanos aunque sean canadienses, latinos o ingleses.

Chung hee asiente.

—Buen punto rubia —Me recargo en su hombro y suspiro—Tranquila pasará ese dolor cuando terminas con alguien o rompen tu corazón.

— ¿Lo has experimentado? —Le pregunto.

—Últimamente cuando pienso en la chica que tanto amo. —Suspira con nostalgia.

—Estamos jodidos. —Digo cerrando los ojos.

—Muy jodidos Jenna...

Después de tranquilizarme decido volver a casa junto a Chung hee. Entramos a casa y nos encontramos a Robert, Chin Hwa y mamá sentados en la sala.