18.- Riña de hermanos

1.1K 139 34
                                    

La noche había sido un éxito, Androgeo no tuvo ningún problema vigilando a Janine y yo conseguí lo que buscaba, un arma que me ayudase a vencer el poder de su collar. Ahora que en ese aspecto me sentía más tranquila, esperaba dormir mejor esa noche. Sin embargo, mi mente se trasladó a lo siguiente en la lista.

Realmente no creía que hubiese mucho que pensar, pero ahí estaba, sin poder dormir a pesar de que ya no quedaba mucho de la noche. Suspiré dando media vuelta en mi cama y pensé en el juego que Jasón empezó. Definitivamente no podía retroceder ahora, pero tampoco estaba segura de querer seguir con ello.

Para mí la opción más fácil una vez solucionara el tema de Janine, era regresar al mare nostrum junto a los piratas, había sido mi idea original una vez recuperé la bendición de Hades y seguía siendo una opción ahora que no quedaba nada por lo que volver al campamento.

Era la única forma de que no matara a nadie y no tuviera problemas con Percy por ello.

No podría llevar a cabo mi venganza hacia Nico como yo quería, pero eso no significaba que lo iba a perdonar. Como podría cuando el solo tenerlo cerca y saber lo que hizo me daba nauseas.

Tenía que enfrentar la situación, había estado con otra chica, la había tocado mientras yo hacía esfuerzos al otro lado del mundo en busca de una cura para lo que Fortuna hizo. ¿Y todo para qué? Para que pudiera darle una familia. Claro está que eso no fue suficiente sacrificio para él.

No, no había forma de que pudiera perdonar algo así.

Renunciaba al plan de tener una familia, así como a cualquier otro lazo que tuviese con Di Ángelo. Yo me haría cargo ahora.

Supe que era en vano dormir cuando el sol empezó a entrar por mi ventana, guardé mi amuleto en uno de mis cajones y comencé a prepararme para ir al comedor a desayunar. Hoy sí que estaba de humor para comer algo, después de todo, esta sería una de mis últimas cenas aquí.

De camino al comedor, sentí el aura de Thomas y, al voltear en uno de los pasillos, me le encontré dirigiéndose al comedor también. Sonreí registrando los últimos recuerdos de mi lado más débil. Debía ser una pena el que yo este de vuelta para él.

- Thomas, es un gusto volver a verte - le miré divertida - aunque creo que tú no puedes decir lo mismo, ¿cierto?

- No tengo nada contra ti - se encogió de hombros - pero sé que no eres _____ completamente

- Bueno, por lo menos no parece que me tengas miedo - sonreí - vamos a comer, ¿quieres? Hoy es un buen día

Seguí mi camino sin darle más vueltas al asunto, en verdad no me interesaba mucho lo que tuviera que decir. Había sido importante para ambas en el pasado, pero me temía que yo no guarda un pequeño cariño como lo hacía mi otro lado. Mucho menos sabiendo que quería cambiarme.

Fuimos los únicos al llegar al comedor, tomé un bocadillo de la mesa y lo comí mientras examinaba el lugar.

- Parece que estás de buen humor - se acercó mientras estudiaba mis movimientos

- ¿Tú crees? - arquee una ceja - entonces tendré que hacer un mejor trabajo ocultándolo

- Bueno, normalmente no comes nada de aquí con buena gana - señalo el pedazo de pan en mis manos

Miré el pan en mi mano y antes de que pudiera decir algo, Jasón entro seguido de Piper y Nico. Al parecer su recuperación estaba siendo muy buena, ya caminaba sin ayuda.

- Luces bien, Grace - sonreí llamando su atención - te doy puntos por eso

- No creo que sea buena idea molestarlo ahora, _____ - pidió Piper viéndome preocupada

Amores y secretos de la guerra (Nico di angelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora