50.- La tormenta

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3 días no eran suficientes, necesitaba más tiempo antes de que todo fuese como antes, necesitaba que Thomas recordara para que pudiera explicárselo por mí misma. Sin embargo, el poder del mar bravo y la tormenta atraían mis viejos recuerdos, revolviendo así, la otra mitad que se escondía dentro de mí.

Estaba en cubierta, la tormenta había empezado hacía solo unas horas, Percy y Thomas tuvieron que suspender el paseo debido a eso, ahora, se encontraban en el comedor almorzando junto a Nico. Debería de estar ahí, pero tenía problemas para controlarme, así que decidí meterme en mi camarote y no preocupar a nadie.

Lamentaba no poder hablar con Percy sobre lo que pasó en Delfos, pero sabía que podría sacárselo a mi otro yo de alguna forma, después de todos, ninguna estaba dispuesta a hacerle verdadero daño. Eso fue todo lo que pude pensar antes de saber que me encontraba tapada de nuevo.

Pov Percy

Percy: Esto no es bueno, nada bueno – dije mientras Nico y yo veíamos a Thomas tocarse la cabeza de dolor

Nico: Esta recordando, tiene que ser eso – dijo serio

Percy: Tengo que avisarle a _____, ella debe de verlo o...

Nico: Percy – me interrumpió, le mire y supe que estaba estupefacto ante algo

Percy: Que...que pasa? – dije confundido

Nico: No siento su aura – dijo abriendo mucho los ojos – solo...solo siento el aura de su otra versión – dijo viéndome

Percy: ¿Qué?, no, ¡no!. Se suponía que iba a preguntarle muchas cosas hoy...

Nico: A mí también me pone mal, pero tenemos que encargarnos de lo primero, Thomas está recordando, le duele pero va a recordar todo.

Mire hacía el castaño y cada vez se retorcía menos, al parecer todo estaba por terminar. La tormenta había sido una mala señal desde el principio, solo hubiese deseado preverlo antes. Quien se encontraba ahí fuera ya no era del todo mi hermana, y estábamos a su cargo.

Antes de que pudiéramos acercarnos, Thomas bajó las manos de su cabeza aun temblando un poco, tenía la nariz roja y los ojos algo llorosos, pero su voz denotó mucha seguridad cuando habló.

Thomas: Quiero verla, ¿dónde está? – dijo viéndome

Sabíamos de quien hablaba, pero me atreví a hacerme el confundido

Percy: ¿A quién te refieres?

Thomas: _____, necesito verla de nuevo. No puedo creer que no la reconociera antes – dijo más para sí mismo

Nico y yo nos miramos, ¿cómo decirle lo que _____ estaba pasando en este momento?, sobretodo que ahora la chica que él conocía no estaba disponible, si quería hablar, tendría que hacerlo con su otra mitad.

Sin embargo, la puerta se abrió y por ella entró mi hermana. Thomas no lo dudo, creo que ni si quiera notó que tenía un aspecto diferente al de esta mañana, simplemente se lanzó a abrazarla como si la vida se le fuera en ello.

Pensé que le alejaría o algo, pero no se movió, ni si quiera le devolvió el abrazó. Parecía que se debatía internamente sobre qué hacer, después de todo, ______ había estado enamorada de ese chico, y ambas parten estaban unidas por la misma causa, él.

Al final, Thomas se separó sonriendo, podía notar lo feliz que le hacía volver a ver a mi hermana, pero lo siguiente que hizo nos sorprendió a todos, y temí por su vida.

Sin esperar respuesta o algo, tomó a mi hermana de las mejillas y la besó, sin duda estaba seguro de que seguía sintiendo lo mismo, de que le seguía perteneciendo. Y eso fue exactamente lo que enfadó a mi amigo, sobre todo porque sorprendentemente, _____ le devolvió el beso.

Amores y secretos de la guerra (Nico di angelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora