80.- Reconstruyendo la familia

1.8K 156 11
                                    


Pov tu

El aire de verano soplaba tranquilamente en el lago mientras Percy y yo esperábamos a que mi padre hiciera su aparición, debo mencionar que ya tenía 2 minutos de retraso.

- Y yo aquí que pensé que estaba más desesperado que esto - me senté en la arena - ¿aún no puedo irme? - le miré con fastidio

- Debe de haber tenido un percance, en verdad esto era tan importante para él como para ti

- Para mí no es importante - miré mis uñas, indiferente

- Por favor, _______

- ¿Qué quieres de mí? - le vi mal - no soy yo quien está retrasada

- 5 minutos más, es todo lo que pido - juntó ambas manos viéndome con ojos de cachorro

- Bien, pero tus ojos no son los que me convencen - miré hacia otro lado

Le escuché reír y de repente sentí a Nico cerca.

¡Rayos!, creía que se quedaría dormido hasta que todo esto acabara.

- ¿Qué hacen aquí tan temprano? - apareció frente a nosotros aún con un aire soñoliento

Percy me miró arqueando una ceja, confundido de que no lo supiera.

- Te lo dije - me encogí de hombros - no importante como para mencionarlo

- Estamos esperando a nuestro padre - Percy explicó sin decir nada ante mi reacción

Suspiré terminando de caerme sobre la arena cuando Nico me fulminó con la mirada. Claramente estaba ofendido de que no se lo contase

- No me dijiste nada - me reprochó

- No importante - repetí con fastidió - Dioses, ¿Qué le ven de interesante?

- Oh, no sé, tal vez el hecho de que has evitado a tu padre por odio y, ahora, acabas de aceptar arreglar las cosas con él - Nico metió sus manos en los bolsillos de su pantalón casualmente - sin mencionar que me aventaste un vaso cuando lo mencioné

- No te lo aventé por eso, sino por lo que dijiste después - le vi mal - mejor no me hagas recordarlo - volví a sentarme correctamente

- Como sea, cálmense, no quiero otra pelea más - advirtió Percy - siento que ya está aquí

Y, en efecto, el agua comenzó a temblar y de ella salió nuestro padre. Vestía sus típicas bermudas junto con una camisa colorida. Su gusto no cambiaba ni con los años.

- ¡Papá, sabía que vendrías! - Percy corrió a saludarle

- No me lo perdería por nada, pero lamento la tardanza. Un pequeño problema con Anfitrite - se rascó la parte trasera del cuello

- Ya debe estar enterada de todo, ¿le importaría que fuese de visita? - sonreí diabólicamente - estoy segura que nos divertiremos, justo como en los viejos tiempos...

- _______ - Nico me miró pidiéndome que pare, pero este no era su problema

- Me encantaría torcerle el cuello, lastimosamente Percy no parece muy feliz con ello - suspiré

- Hola a ti también, hija - se acercó a mi aún sentada en la arena - la vida en el campamento no parece sentarte tan mal - intentó alagar

- Sí, claro - me encogí de hombros - luego de haber asesinado a mi esposo, el panorama parece ser más prometedor

- Veo que tu lengua sigue tan afilada como siempre - resopló

Amores y secretos de la guerra (Nico di angelo y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora