I Can't Survive Without You

Capítulo 4

Taylor POV

Esta es la décima, ¡La décima llamada que hace en menos de dos minutos! No sé rinde, es como en el comienzo...

Recuerdo haber entrado al edificio más grande de toda mi vida. Estaba asustada, a penas tenía diecinueve años y estaba comenzando mi pasantía como reportera.

No iba a ir muchos días al periódico, a penas iba en el segundo año de la carrera, pero creo que fueron los días suficientes como para enamorarme de ella.

Mi maestra en jefe me había dado un documento que debía entregar para confirmar mi asistencia al lugar, subí al ascensor con las piernas temblando de miedo. Todo era tan grande, todo era tan caro y lujoso, pero también temblaba de felicidad porque muy dentro de mí, soñaba con este momento. Quería trabajar aquí para toda la vida.

Al llegar al décimo quinto piso, camino por entre la multitud que caminaba de aquí para allá, todos buscando al editor en jefe que al parecer se había perdido. Consultaba a algunos que se cruzaban en mi camino y nadie se daba el tiempo de ayudarme, claro... ¿Quién le iba prestar atención a una chiquilla de diecinueve años?

Encontré la puerta abierta, y entre sin más creyendo que era la oficina correcta. Me detengo y la veo a ella.

Con ese labial rojo y esa chaqueta gris con las mangas dobladas. Su cabello desordenado a pesar de la coleta que llevaba puesta. Estaba concentrada leyendo, sus ojos verdes se movían deprisa tras esos lentes. Me paralice, lo juro, hasta deje de temblar porque mi cuerpo se había quedado en shock.

Ella levantó la vista y clavó esos penetrantes ojos en mí, me miró tanto que incluso pensé que ya había pasado una hora y todavía estaba parada ahí. Me sonroje y baje la vista.

Ella estaba sonriendo.

— ¿Te puedo ayudar en algo?

Fue la única que pregunto lo que necesitaba.

— Disculpa si la molesto... Mi nombre es Taylor Swift, vengo de la Universidad...

—  Ah... ¿Vienes a hacer tu pasantía?

— Sí —conteste tan bajo como pude.

Que me interrumpiera fue lo más importante de todo en ese momento.

— Bienvenida Taylor, mi nombre es Karlie Kloss... puedes decirme solo Karlie y también me puedes tutear... No soy tan mayor ¿O crees que sí? —sonrió y se levantó de su silla para acercarse.

Estuve a punto de desmayarme por lo increíblemente alta que era y sólo llevaba zapatillas.

— No... Yo... No he... Yo...

— Dime qué traes ahí —dice acercándose más y coge los papeles que traía en mis manos.

Sonríe al leerlo y luego me dirige una mirada que por poco me lleva al cielo que me deja caer en picada.

— Te diré algo, el editor en jefe no está, pero soy un tipo de... Suplente, por así decirlo ¿Qué tal si yo guardo esto y te muestro tu lugar de trabajo?

— Eso estaría bien... Seño... Karlie —mis mejillas ardían, lo recuerdo tan bien.

Ella sonrió otra vez para luego voltear, dejando mis documentos sobre su escritorio.

¿Cómo iba a saber yo que ella también se había enamorado de mí en ese mismo momento? Ella tenía veinticinco años y no lo supe hasta que me besó por primera vez.

Y fue ese mismo día.

Es hilarante recordarlo, íbamos tan deprisa. Ninguna de las dos se pudo contener, más bien ella, no me quitó jamás los ojos de encima. Yo ni me lo imaginé, nunca lo habría hecho... Mis estudios eran primero que todo y bueno... En ese tiempo recién había terminado con mi novio...