Capítulo 23

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Karlie POV

Habían pasado cuatro días desde la última vez que peleamos, o bueno... Si a eso se le podía llamar una "pelea" con Taylor.

Recuerdo lo furiosa que estaba ella, y por dentro sentí tanto odio por Toni... Antonia... Ugh... como sea, por haber escogido un día como ese para venir a mi oficina y pedir perdón... ¿En serio quería pedir perdón?
En ese momento yo no sabía por qué pedía perdón cuando ninguna de las dos estaba consciente esa noche... Pero si se refería al perdón de haber hablado demás cuando estuvo con Taylor, realmente se lo habría aceptado.
Pero no tuve tiempo para reflexionar aquello, Taylor fue más impulsiva que yo en ese caso.

Recuerdo haber llegado a casa con ella en silencio. Grace se había ido a su cuarto con Millie y no salieron de ahí hasta la cena.
Cena que preparamos entre yo y Taylor luego de habernos "reconciliado".
No podía dejar que se enojara, no así... No quería que estuviera distante despues de ese increíble día, cuando habíamos tenido nuestro momento de felicidad juntas en la clínica (con solo recordarlo se me pone la piel de gallina, me pongo a pensar un poco más y probablemente este embarazada pero aún no lo sabemos y ¡Dios qué nervios!).

Mirarla así, cortando vegetales como si quisiera realmente asesinar no solo las zanahorias, sino que también la cebolla, los tomates y para que decir la pobre mesa bajo todo ese golpeteo del cuchillo.

— Taylor —la llamé y ella siguió cortando con más fuerza—. Eh... —la detengo ubicándome detrás de ella, poniendo mis manos sobre las suyas— no quiero que te cortes un dedo, mujer... Detente.

Ella simplemente suspiro y dejó caer el cuchillo sobre la mesa. Se llevó el dorso de su mano a su frente, totalmente frustrada. Yo la voltee para que me mirara. Aún me duele recordar que tenía sus ojos llenos de lágrimas.

— Odio sentirme así —solloza—, odio estar enojada contigo por eso... No quiero recordarlo pero está en mi cabeza todo el tiempo... Esa mujer es una maldita pesadilla.

— Lo siento... Lo lamento tanto de que hayas tenido que ver eso, que hayas tenido que hablarle, no sabía que iría.

— Ya no importa... Ya ni siquiera quiero hablar de ella, solo quiero... Terminar la cena, tomar una ducha y dormir.

Ella se había soltado de mí y fue hasta el otro mesón para poder coger más vegetales que a mí parecer eran innecesarios. Me di cuenta que solo tenía ganas de triturar más cosas con el cuchillo. No lo iba a permitir.

La tomé por sorpresa de los brazos y la voltee otra vez hacia mí, la tomé de su trasero y la levanté para dejarla sobre el mesón, arrasando con todas las verduras que habían encima. Ella se quedó sin aliento y sus ojos atónitos me calentaron un poco más de lo que ya estaba. Estaba tensa con las manos apretadas, pero no se resistía y respiré... Respiré muy cerca de su boca.

— No quiero que estés enojada conmigo, no ahora, no hoy... No después de que acabo de hacer la cosa más loca de toda mi vida... —me apreté a ella empujando mis caderas hasta que se abriera por completo a mí—. Ahora te haré el amor aquí y no me dirás nada con respecto de que Grace y Millie podrán descubrirnos, no me arruines esto...

— Pero es que... Gra...

— Shhh... —la silencio y beso sus labios devorando hasta la última lágrima que derramó sobre ellos.

Había que culpar a las hormonas en ese momento.

Sonrío recordando que esa noche cenamos contentas, felices... incluso más alegres de costumbre al ver que nuestra  hija también estaba  feliz. El drama lo  habíamos dejado atrás.

I Can't Survive Without You Donde viven las historias. Descúbrelo ahora