Grace POV
Se les veía tan feliz, nunca antes habían estado así. Tal vez lo estuvieron pero yo aún no era consciente ni razonable, pero ahora lo sé y esa felicidad es única para mí.
Durante la mañana mientras comíamos galletas navideñas, me dedique a abrir mis otros regalos. Tía Hellen me regaló la saga completa de las aventuras de Sherlock Holmes, fue maravilloso, amaba ese tipo de libros y este en particular me encantó por ser de una edición muy antigua. Las páginas olían de maravilla.
Mí siguiente regalo; mami confesó que había sido ayudada por Millie y ella misma me lo reconoció antes de que lo abriera. Por solo saber que Millie le había dado el dato, me emocioné más en abrirlo, claramente ella sabía que me iba a gustar.
Eran muchas estrellas, demasiadas, de distintos tamaños y colores. Eran parecidas a las que ella tenía en su habitación, solo con la diferencia de que las mías eran colgantes. Algunas se conectaban a la corriente y se les encendía una luz suave que iluminaba gran parte de mi cuarto. Entre mamá y yo las pusimos por toda mi habitación , entre risas terminamos y las que necesitaban corriente las coloque cerca de mi cama, justo arriba de la cabecera. Se veía realmente hermoso, imaginaba cómo sería en la noche cuando la habitación estuviera a oscuras, mientras tanto las veía con las cortinas aún cerradas, era maravilloso. Me emocionaba saber que habían hecho esto por mí. Ahora podría pensar en Millie cada vez que me fuera a la cama y también pensaría en ella cada mañana al despertar.
Recibí ropa nueva y algunos suéteres que me habían gustado hace unos días atrás cuando salimos una vez a comprar. Pero creo que hasta ahora el regalo que más me impresionó fueron esos pequeños zapatos de bebé.
Todavía tengo la sensación de ellos en mis manos, no podía creerlo. Aun sigo pensando en ello...
Estuve sentada en el suelo luego de hacer lo de mi cuarto, no sé si mi insistencia de que quería ver las estrellas colgadas era más importante que los otros regalos, o tal vez la insistencia era porque sabía que Millie había sido de la idea y se la había dicho a mami para que pudiera darmelas. Esto me pone tan extraña a veces.
Me quedé esperando el turno de mamá para abrir su regalo, su expresión juguetona al tomar la bolsa entre sus manos me causo gracia y a veces me sonrojaba por las caras graciosas que ponía. ¿Podía ser tan ridícula a veces? Sí, lo era. Aunque su cara cambió completamente cuando vio el interior de la bolsa. De hecho comenzó a gritar de la emoción y miraba a mami como tratando de pedir alguna explicación. Ella lo saco del envoltorio y lo mostró por primera vez. Tenía buenas razones para gritar, era ese perfume que estuvo pidiendo desde hace tanto tiempo atrás. Mami nunca le había tomado en cuenta por la obvia razón de que era un regalo muy caro. Me dio risa verle la cara a mamá cuando lo vio por décimo quinta vez y se lanzó sobre mami para darle besos por toda la cara.
Eso era lo que más amaba de mi pequeña familia, aquí no existían regalos grandes y caros y si eran costosos, era porque se sabía que serían significativos, la alegría se rebosaba de nuestros cuerpos y era realmente agradable vernos así. Ya había perdido la cuenta de cuántas veces mamá había pedido ese perfume, no lo vendían aquí y por supuesto había que traerlo del extranjero. Francia para ser exacta. Ella decía que siempre le gustó porque le recordaba a su mamá. No era un recuerdo triste pero era tan importante que esto era un tesoro invaluable para ella. No me sorprendieron sus lágrimas luego de dos minutos que estuvo mirando la botella semicircular, sonrió más amplio cuando olió por primera vez. Ellas se besaron con una sonrisa aún dibujada en sus bocas.
"Me haces tan feliz, Taylor" le dijo ella y puso su cabeza en su hombro para tratar de contener sus lágrimas.
Mamá tenía también un regalo. Ambas habían protestado de que no debían salirse del límite pero claramente nunca respetaban el límite de dinero. Yo disfrutaba mirarlas, creo que ese era un gran regalo para mí.
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I Can't Survive Without You
FanfictionCuando Taylor conoció a Karlie, estaba embarazada de su primera hija. Ninguna de las dos sabía que luego de enterarse, iban a emprender un viaje el cual ambas estarían destinadas a estar juntas... Se enamoraron, ninguna pudo evitarlo. Fueron echas u...