I Can't Survive Without You

Capítulo 6

Grace POV

Reviso mi móvil una vez más, solo han pasado cinco minutos pero ya me estoy desesperando. Mamá prometió venir por mí y aún no ha llegado.

— Sí quieres nos vamos juntas —murmura Millie a mi lado.

Nos hemos pasado todo el recreo juntas y la verdad es que ha sido bueno. No me esperaba encontrarme a estas alturas del año con alguien como ella, pero aún así no puedo tener total confianza... A penas la conozco y no puedo lograr abrirme a ella completamente.

— No, tengo que esperar a mamá.

— ¿Por qué te avergüenza el hecho de tener dos mamás? Es completamente normal.

— Ya lo sé —le digo mirándola.

No habíamos hablado de esto en todo el día porque yo no quise, pero sospeche que en el algún momento lo preguntaría, vi la ansiedad en sus ojos.

— ¿Y entonces?

— Imagina una cosa, Millie —murmuro—. Imagina estar en un colegio lleno de gente estúpida que no entiende las cosas como nosotras...

— No tengo para qué imaginarlo, ya estamos en eso —sonríe.

— Entonces ya sabes el por qué lo oculto y... —bajo la vista—, no me avergüenza tener dos mamás... Estoy muy orgullosa de ser hija de ellas, solo que... A pesar de todo, a pesar de que veo las cosas diferente, también siento de forma diferente y la gente me hace daño... Aunque ellos no lo vean.

— Te entiendo —me dice y toma un mechón de su cabello—, y quiero que sepas que yo jamás me me reiría o te haría sentir mal por eso... Ya sabes que no pienso como los demás... ¿Y sabes? cuando era más pequeña, me sentía mal por ser diferente, porque la gente no me entendía, no lograban ver lo que yo o sentir lo que yo... Y ahora estoy muy contenta de ser así.

— ¿Cómo puedes estar contenta si sabes que jamás podremos encajar con los demás?

— Eso no es lo importante Grace, lo importante es que siempre sabremos la verdad, jamás nos dejaremos engañar... La gente es cruel pero a menudo que vayamos creciendo, ya no nos dañará tanto, porque sabremos con quienes podemos estar y con quienes no.

— ¿Tú has elegido ya?

— Sí —me mira—, de todos lo que están aquí... Te elegí a ti.

— ¡Grace! —escucho a mamá venir desde lejos— ¡Cariño! —pero no logro separar la vista de Millie.

— Gracias —susurro.

— Seremos buenas amigas ¿Sabes? Aunque no estemos acostumbradas a utilizar esa palabra —se ríe.

— Hola cariño... —me dice mamá, ya está aquí y está agitada.

Volteo a mirarla y automáticamente mis ojos rastrean toda su persona.

Su blusa está arrugada por el frente, al igual que su falda. No pudo haber sido por estar sentada, ninguna falda se arruga de esa manera aunque estuviera dos horas sentadas en una silla. Su cabello se ha ondulado, pero es obvio ya que por la mañana salió con el cabello húmedo.
Le falta abrochar el último botón de su blusa... Espera... ¿Qué?

Subo la mirada hasta su cara, el rímel se a corrido un poco bajo sus ojos, su cuello está rojo y no es porque acaba de correr... No... Esto...

¡Oh Dios mío!

— ¡Mamá! —exclamo y se ha dado cuenta de que yo me he dado cuenta, acaba de sonrojarse hasta las orejas— ¡Estuviste con...!

— ¿Quién es tu amiga, cariño?