Se miraron unos segundos más sin pedir permiso y sin saber qué hacer hasta que salieron de ahí. En el camino no se dijeron nada luego Melanie observó a Stella.
—Lamento la tardanza, me distraje.
Williams caminaba cerca del lugar y Eiden se dirigió a él y entre las personas, de nuevo se encontraban los cuatro juntos y sin planearlo.
—¿Se sentarán con nosotras? —Invitó Stell pero con la mirada dirigida a Williams.
Él le contestó:
—Gracias por el ofrecimiento pero no.—¿No comerán? —Preguntó Stella y el joven volvió a contestar de manera casi lejana.
—No en el cafetín. —Stella le iba a preguntar el ¿por qué? Pero Melanie se adelantó en interrumpirla.
—Está bien, nos vemos luego en tal caso. —Jaló de mano a Stella quien estaba extraña por sus ansias, dejando a los chicos atrás.
~~~
—¿Explicación de lo que acaba de pasar?— dijo Stella confundida mientras depositaba su desayuno en la bandeja
El cafetín se inundaba de olores y murmullos, entraba gran cantidad de luz por los ventanales y parecía ser más habitado que afuera.
—Es que sentí que tal vez no se quieren involucrar con nosotras —dijo sintiéndose extraña ante la situación. Una intuición que nunca fallaba en la joven. Incluso hablar de ellos le provocaba un diminuto escalofríos.
—¿Sólo porque no comen aquí?
—Son cordiales pero su respuesta claramente fue molesta.
—Pues ya veré si eso es cierto —.Dijo ya retirándose para ir en dirección a su mesa, Melanie se sentó y la miró de ojos entrecerrados.
—¿Te llama la atención Williams no es así?— dijo curiosa y su amiga se sorprendió.
—¿Cómo lo sabes? —Melanie soltó una pequeña carcajada —¿Qué?
—Solo pregunté, y te acabas de delatar.
Stella rió nerviosamente y pasó un rulo de su cabello detrás de su oreja sonando penosa.
—Siento que puede ser lindo por dentro tanto como lo es por fuera.
—Pues sinceramente lo es...
—¿Imaginas que se fije en alguna de nosotras?
—Pues, no competiré. —Rió para finalizar Melanie. Ella no quería precisamente su atención.
Miró a Stella pensando en si debía contarle aquel secreto, el haber presentido desde antes que se encontraría con aquellos seres, pero pensó que aún no estaba preparada para oír aquella cosa descabellada.
~~~
—Le gustas. —Dijo Eiden sentándose en un banco blanco que permanecía debajo de un árbol a las afueras del cafetín.
El patio era ese lugar donde no iban todos los estudiantes, la mayoría se quedaba adentro, por lo tanto era tan tranquilo que se podía oír las aves que pasaban picoteando los trozos de alimentos que caían al césped, era un lindo día y un sitio perfecto para dos amantes de la soledad.
—¿A quién te refieres? —Dijo Williams
—Stella.
—Algo así presentía. —Dijo el muchacho sin interés alguno. Siempre ocurría.
—¿Y a ti te gusta?
—Llama la atención.
—Su amiga llama la atención —Respondió Eiden entre dientes bajando su mirada.

ESTÁS LEYENDO
SON EXTRAORDINARIOS
Bí ẩn / Giật gânUn don puede ser una bendición tanto como una maldición... Premoniciones, empatía psíquica, hablar y sentir personas que ya fallecieron, ¿es todo esto posible?... un grupo de jóvenes viven una etapa complicada al llevar consigo grandes dones incontr...