SON EXTRAORDINARIOS

21|Habilidad

Al finalizar la cena Martha le agradeció la oferta y gesto agradable de Melanie, quien supo llevar a Alain en todas esas horas y ahora, quería ser su niñera.

—Pero Melanie, no es tan sencillo, todo es un trabajo, desde que se levanta, lo que come, lo que usa, cuando le dan crisis.

—Créame que sé en lo que me estoy involucrando, pero por eso quiero hacerlo, me haría bien una entrada de dinero y sería un gran placer cuidarlo, me agradó mucho.

—Al menos le agradaste rápido tu también —,lo pensó unos segundos —,la niñera anterior lo quería medicar y por eso no le he encontrado alguien de su talla y con paciencia.

—Hagamos algo, usted me hace una prueba de una semana, si creo que no estoy capacitada para cuidarlo, entonces seguirá con su búsqueda.

—¿Eso crees? —Melanie asintió y luego Martha aceptó y la abrazó —Ay, gracias de verdad.

—Estará en buenas manos, y como solo lo tendrá a él, toda su atención se enfocará en Alain. —Apoyó la madre de Melanie.

—Bueno amiga, si tú lo dices, mañana vengo—, dijo mirando esta vez con reto a Melanie —.Te daré las instrucciones y veremos.

—De acuerdo.

•

La mañana siguiente fue diferente, la madre de Melanie entró a la habitación despertándola.

—Hija, es tu padre.
Ella abrió los ojos sintiéndose desubicada, cuando miró el teléfono en su dirección
—Lo llamé para que lo felicites, y quiere decirte algo.

Entonces entró como un rayo de luz el recordatorio del cumpleaños de su padre, se levantó un poco en su cama y sintió un pequeño cosquilleo de nervios, no había hablado con él desde que se había mudado, había estado molesta pero el sueño no le permitió recordar su enojo, a parte era su día y por cualquiera razón seguía siendo su papá.

**
—¿Hola?

—¡Melanie cariñito! —dijo tan emocionado de oír su voz, Melanie sintió nostalgia, así recordaba de niña que iba a despertarla con su madre, llamándola "cariñito".

—Feliz cumpleaños papá.

—Gracias hija, no sabes el gran placer que me da oír tu voz, ¿qué tal es todo? ¿Te agrada el colegio? ¿Tus profesores? —su emoción seguía latente en su voz, la mamá salió del cuarto dándole privacidad.

—De nada, todo está bien, me agrada el clima y mis profesores también, son buenos.

—¿Ya tienes amigos?

—Si, tengo una amiga...

—Te extraño tanto cariñito, quería enviarte un pasaje para que vinieras este fin de semana a pasar mi cumpleaños conmigo, ¿te parece bien?

—Si, me agradaría ir y comer de tus pasteles, pero debo ver que no tenga muchos deberes.

—Cuando tomes la decisión me avisas ¿si?

—Está bien, te aviso en un mensaje y em... disfruta tu día —ella seguía incomoda pero todo lo que dijo fue sincero.

—Está bien te amo.

—Yo igual papá, adiós.

—Adiós Mel.
**

—¡Mamá! —le gritó para que volviera a entrar a su habitación, pareció haber estado cerca ya que no tardó mucho en entrar.

—¿Te dijo?

—¿Sobre ir a visitarlo?

—Si. —Se sentó en la cama.