Inazuma Eleven (personaje y lector)

Yuto Kidou 3

Mis padres. Con esas dos palabras pueden hacer que pase de una sonrisa enorme a la peor de mis muecas

Son tan raros como yo soy demasiado insegura conmigo misma. Cuando les conté que tengo novio lo único que dijeras es que "si lo escogiste tú es porque realmente vale la pena". No lo quieren conocer hasta este momento porque, según ellos, tomó tan malas decisiones en la vida que me voy a separar de Kidou en nada de tiempo.

Cuando se lo dije a Yuto, este se notaba bastante decepcionado de ellos, a pesar de ser adoptado su padre, por lo que me dijo, tenía muchas ganas de conocer a "la chica que hizo que su hijo pensara en otra cosa que no fueran el fútbol y la escuela".

Eso es peor. Que padres nos tocó a los dos

Así que convencí a mis padres en visitarlos a ellos en su casa aceptando la invitación, al enterarse quien es su padrastro, así que este fin de semana irían ellos; en cuanto a mi, no me dejan ir, según ellos es para que no sepa lo que se tratará la charla y, supuesta mente, había prometido ordenar toda la casa.

Me espera un día largo. No veo la hora de que me vaya de esta casa y que dejen de tratarme así.

Llego el sábado, me desperté a las seis para poder limpiar todo; empecé desde el ático y el tercer piso, el cual es solo sacar polvo. Nadie usa ese lugar. Siguió el segundo piso, el cual baldee, seque y ensere los pisos, después el baño, las habitaciones, dejando la de mis padres que seguían dormidos, para después ponerme con la escalera, la cual tarda demasiado tiempo. Cuando me di cuenta ya eran las nueve, me fui a preparar mi desayuno y una vez que lo terminara seguir con el piso de abajo que sería el más complicado.

Madre: gracias por calentar el agua- dijo sonriéndome, mi madre es más considerada que mi padre, pero tampoco lo es demasiado- cuando volvamos te contaré que pasó- me susurro, ya me parecía que ella quería que yo fuera, seguramente para humillarme delante del chico y que él me dejara.

TN: esta bien madre- sonreí mientras me dirigía a la sala la cual empecé a limpiar.

A los pocos minutos aparece mi padre el cual pasa de largo yendo directamente a la cocina para preparar su desayuno, cuando salieron yo ya tenía listo toda la sala.

Padre: nos vamos, seguramente estaremos hasta la tarde fuera, cuida la casa- dijo saliendo por la puerta a paso apresurado.

Madre: no abras la puerta a ningún desconocido y si pasa algo no dudes en llamarme- asentí sonriendo levemente.

Después de escuchar el motor del auto alejarse solté un suspiro de alivio, termine de lavar la casa y me senté un buen rato en el sillón de la sala, me quede dormida un buen rato, si no fuera porque me dio hambre seguro que hubiera seguido de largo. Al ver que era medio día me fui a la cocina y me hice mi comida favorita.

Una vez termine de comer y de lavar todo me puse a ver varias películas de diferentes temas. Mientras cada tanto me mensajeaba con Kidou diciendo cómo iba, según él, la visita de mis padres en su casa. Él los recibió así que, según él les cayó bien a los dos haciendo que la reunión siguiera sin ninguna complicación.

A eso de las ocho, y después de quedarme dormida en el cálido sofá, en donde estaba recostada, escuche el sonido de la puerta principal dándome cuenta que ya llegaron a la casa, después de soltar un pequeño bostezo me dirijo a darles la bienvenida.

TN: bienvenidos.

Madre: estamos en casa- sonrió amplia mente.

TN: ¿que pasa, madre?- pregunté extrañada por la sonrisa de ella.

Madre: tu padre lo acepto después de hablar mucho tiempo con él y con su padre, lo terminó aprobando y aceptando como tu novio- me emocione y no pude evitar sonreír- además, el señor te quiere ver la próxima semana.

Mientras me dirigía a mi habitación para decidirme que me voy a poner para el fin de semana que viene, en eso me llego un mensaje de Kidou diciéndome que iba a mi casa mañana para que saliéramos a algún lado; acepte la invitación y me puse a ver, también, lo que usare mañana.

Una vez que supe lo que utilizare mañana en la cita y también lo que usaré para ver a mi suegro. Lo se, soy una adelantada, pero prefiero prevenir a que encuentre alguna mancha en las prendas, agujero o cualquier cosa que me haga arrepentir de usarla. Me fui a dormir temprano mientras pensaba en este día tan productivo y con una sonrisa en mis labios, que no se ven todos los días, me quede dormida.