Inazuma Eleven (personaje y lector)

Kazemaru Ichirouta (final)

Y pronto, el gran día llego. El cabello de TN iba atado en un hermosa y sencilla trenza. Que resaltaba su rostro y sobre todo, sus brillantes ojos, casi no tenía maquillaje. Un poco de rubor, sombra y delineador por allí. Algo de brillo labial por allá. Se veía completamente hermosa.

No se sentía nerviosa, en absoluto. De alguna forma, se sentía con profunda paz. Y de repente, la imagen de un Ichirouta ansioso y sudoroso llego a su cabeza, quitándole una risotada. Tenía el dulce presentimiento, que esta vez sería la novia quien esperaría por su novio.

Ichirouta miraba su reflejo, sudoroso, ansioso y tembloroso como una hoja siendo sacudida por el viento. Paso saliva y bebió el que podría ser, el tercer vaso de agua. Fuera, podía oír los murmullos suaves de los invitados.

Endou: Tranquilízate. De todas formas, una ambulancia está fuera, por si te desmayas. —despreocupada mente.

Ichirouta: No tengo miedo Endou, simplemente estoy entusiasmado, por fin estaremos legalmente juntos —murmuró, decidió sentarse hasta que llegara su hora.

TN entrelazo su brazo con el señor Kazemaru. Y de a poco, la fue guiando hasta Ichirouta, quien tiene una hermosa sonrisa dulce y amorosa estaba plasmada en su rostro, su cabello lo tenía hacia atrás, dejando que ella apreciara su frente, sus dos ojos y todo el contorno de su rostro, hasta su mandíbula.

Saludo con una sonrisa a la madre de Ichirouta,  podía oír los suaves sollozos de felicidad y emoción de su madre política, y el agarre firme de su padre político. Ante los ojos de Ichirouta, él veía a la mujer mas hermosa de todo el mundo. Se sentía tan afortunado y terriblemente agradecido con todos.

Poco a poco, TN se fue acercando. El firme agarre del señor Kazemaru se aflojo y con sumo cuidado, entregó a la chica a su hijo.

TN sonrió al sentir la mano enorme de Ichirouta cubrir la suya. El chico tenía las mejillas sonrojadas y podía ver esos pozos dorados con rojo brillar como una llama que está consumiendo todo a su paso.

Sacerdote: Kazemaru Ichirouta, aceptas como esposa a TN A para...- no prestaron atención en las palabras que está diciendo el sacerdote, las sabían de memoria, solo querían llegar a las respuestas que darían paso a su vida uno junto al otro

Ichirouta: Si, acepto.

Escucho suaves "sniff" provenientes de su chica, tenía los ojos llorosos. Puras lágrimas de felicidad. La pregunta, se volvió a repetir. Y de sus labios rosados, salieron las siguientes palabras.

TN: Si, acepto.

Sacerdote: Puede besar a la novia.

Ichirouta con sumo cuidado, pasó sus brazos alrededor de la cintura femenina y la pego a su cuerpo. Sus labios se conectaron en un beso apasionado y cargado con amor. No fue un beso muy largo, pero tampoco muy corto. Era exacto. Perfecto. Indescriptible. La cargó en brazos y corrió con ella, siendo esperados por la limusina. Los pétalos de rosas y arroz se mezclaron en el vestido y cabello de ambos.

La pareja de recién casados no dejaban de sonreír y que sus ojos brillaran con un brillo que hacía que todos se sintieran en otra dimensión al ver el enorme amor que salía de los ojos de estos dos amantes que no han dejado de amarse pese a las adversidades que han vivido a lo largo de los años de estar juntos.