La Cita Cincuenta y Siete.
Capitulo 7.
Permanecí inmóvil aun sosteniendo el picaporte de la puerta mientras observaba como en sus manos estaba uno de mis dibujos, lo observaba atentamente y en sus ojos apareció un brillo inusual.
-Estos dibujos... ¿Son tuyos? - pregunto y esparció sobre el escritorio la variedad de bocetos.
-No son específicamente míos- mordí mi labio al darme cuenta a que me había referido al protagonista principal. - Pero si te refieres a quien los dibujos... Si fui yo.
Asintió seriamente para luego una sonrisa aparecer en su rostro. En estos momentos me sentía como si estuviera por darle un examen oral al peor profesor del secundario.
-Es impresionante. - admite y fruncí mi ceño ante sus palabras. Poso su vista en la mía y en pasos lentos comenzó a acercarse a mí. - Se le da muy bien expresar bocetos, es decir, dibujas muy bien a las personas.
-Lo siento, Jungkook. - me disculpe precipitadamente sintiéndome muy mal, por culpa de los dibujos. - He sido bastante imprudente al retratarte sin ningún permiso tuyo. Sin embargo...
- ¿Te molestaría hacer otro retrato especialmente para mí, YoSook?- sus pasos se detuvieron a una escasa distancia de mí y coloco sus manos en los bolsillos de su pantalón deportivo.- Seria un honor modelar para usted
- ¿Qué? - me sorprendí y espere alguna signo de negativa o de broma pero por su expresión era una realidad.- ¿Estás hablando en serio?
-Claro, ¿por qué no? - miro hacia un lado de la habitación mientras vacilaba en sus propios pensamientos.- A decir verdad, sería algo nuevo. Nunca me han dibujado.
-No sé si podría dibujarlo, no lo hago tan bien. - Apoye mi cuerpo sobre la puerta y cruce mi brazo sobre mi pecho - No quiero que tu primer retrato te desilusione.
-No estoy de acuerdo contigo. - respondió muy seguro y tomo mi mano, llevándome hasta tenerme frente al escritorio- Estos dibujos son estupendos sin dudas. A pesar que no se mucho sobre el arte o la técnica, pero están bellísimos- admitió y, luego de tanto tiempo, alguien volvía a valorar un trabajo realizo por mí.
-Entonces, luego dime donde quieres hacerlo- respondí y sonreí al darme cuenta que comenzaba a sentirme mucho más relajada con la presencia de Jungkook, más en confianza.
-Sera un placer ser tu modelo- sonríe y mira hacia abajo, ambos nos damos cuenta que nuestras manos aún siguen unidas, pero ninguno esta incomodo ante ello. - ¿Desde cuándo dibujas?
-A partir de los nueves años comencé a aprender ciertas técnicas y a medida que pasaba el tiempo comenzaba a interesarme más y más en aprender.
-Desde muy joven te has interesado. Yo a esa edad me encontraba trepando árboles o corriendo por todo el terreno de mi jardín- sonrió alegre ante sus recuerdos. -No digo que el arte este mal aprender desde niño, pero... ¿no te interesaba jugar o hacer otras cosas que no sea estar acompañada de un profesor?
-Pues, preferia estar acompañada de un profesor antes que no estar acompañada por nadie. - luego de aquellas palabras me di cuenta que había sonado bastante crudo y triste, pero era la realidad que una vez me tocó vivir- Me refiero a que mis padres no podían cuidar de mí y estar a cargo de una empleada era demasiada responsabilidad y ya sabes...
-Tu padre adora la empresa- suspira y apoya su cuerpo sobre el mueble. - Tanto, que descuida a su familia.
-Mi padre siempre amo su empresa, siempre la prefirió ante que su propia familia- sonrió pensando en algunos momentos de mi infancia, las veces en que mi padre llegaba tarde, las veces en las que no podía- quería- jugar conmigo o las largas discusiones entre mi madre y él. - Siempre la prefirió antes que a su hogar.
- ¿Sueles verla seguido? - lo miro confundida y él solo exhala, como buscando las palabras correctas.- A tu madre.
-Solo a veces. No tenemos un estrecho trato. - suspire y lentamente me encamine hasta la puerta hasta volver a apoyarme en ella. - Debo decir que la familia Jung es bastante complicada.
-Toda familia es complicada...
Ambos nos sumimos en un silencio, mi vista recorrió el lugar y sonreí al darme cuenta que jamás hubiera pensado que un Jeon estaría aquí, en mi casa.
- ¿Cómo la prensa pudo haberse enterado de lo nuestro? - pregunte al reparar con el periódico que me había prácticamente tirado en mi cara
-Eso... Se los conté a mi padre, probablemente mi madre no pudo contenerse y se lo dijo a sus amigas. Allí seguramente no pudo mantenerse en secreto.
- ¿Se los contaste? - abrí mis ojos sorprendidas y una sensación parecida al susto se produjo en mi estomago.-¿C-como reaccionaron?
-Mi padre... neutro como siempre. En vez, mi madre se siente realizada al saber que pronto su hijo se va a casar- negó mientras soltaba algunas risas perdido en su pensamiento. - creo que tenía todo sumamente planteado hace varios años.
-Siempre asegurada tu futuro.
-Hablando de ello. - se reincorpora y vuelve a observar los papeles- Necesito hacerte otro trato...
- ¿Otro? - sonreí y, al igual que él, me reincorpore corrigiendo mi postura.- Debería asustarme.
-Oh no, para nada. - niega mientras se acerca hasta llegar a mí, sus ojos marrones me tranquilizan y me atraen. - Jamás te haría daño. Asique ¿nos encontramos esta noche en el mismo lugar de siempre?
- ¿Y por qué no puedes decírmelo ahora? Estamos solos.
-Porque a la noche consigo mejor lo que quiero- un latente doble sentido predomino sus palabras, debía admitir que verlo con una actitud superior me encantaba.
-Está bien, si lo quieres así. - abrí la puerta y apoye mi frente en esta, mientras observaba como el personal hacia el mantenimiento al jardín.- Entonces, ¿A la misma hora de siempre?
-Estoy de acuerdo- me observo fijamente unos segundos más hasta alejarse unos breves centímetros. -Nos veremos esta noche. - camino nos mínimos metros fuera de la habitación. Sin embargo, se volteo rápidamente y sonrió. - Espera, he olvidado algo. - nuevamente entro a la habitación para tomar uno de sus retrato.- Me llevare esto, espero que no te moleste.
Y con esa estúpida pero encantadora sonrisa se retiró.
@LeeMochi22🍭
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La Cita Cincuenta Y Siete
Teen FictionYoSook, hija del empresario más codiciosos y millonario busca a toda costa revelarse frente a su familia. Pasando así por cincuenta y seis citas totalmente fallidas. Pero... la cita cincuenta y siete ¿podría cambiar algo? ▪Republicada el dia 21/02/2...