Historia resubida por problemas técnicos 🤠
Capítulos editados y más dramáticos ahre.
Hannah es divertida.
Shawn es inteligente.
A Hannah le gustan los memes.
Shawn ni siquiera los conoce.
Hannah es alegre.
Shawn es muy serio.
Hannah es despreocupad...
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Ella se me quedó mirando por un tiempo corto hasta que sus labios se posaron sobre los míos dejando un pequeño beso en ellos.
Me negaba a dejarla ir con solo un beso, así que volví a juntar nuestros labios en un beso desesperado. La fui acostando en la cama y me puse encima de ella pero sin aplastarla y seguir con nuestro beso. Mi tiempo de oxigeno se estaba agotando por lo que me separe un poco de ella para tomar aire y después seguí con lo nuestro.
Mis manos viajaron por su cuerpo deleitándome con sus curvas, hasta que escuche pisadas fuera de la habitación. Me separé de Hannah con la poca cordura que me quedaba y la admiré. Su blusa estaba un poco arrugada y levantada dejando ver el final de sus pechos por lo que tuve que voltear la cabeza y así evitar la tentación.
De repente, la puerta fue abierta y mi madre apareció en el marco de esta.
Sentí mi corazón acelerarse a tal punto de querer salir de mi pecho. Nuestra madre nos miró sorprendida.
—Shawn Peter Raúl Mendes —Hablo duramente dando una escalofriante mirada. — ¿Qué le estabas haciendo a tu hermana?
Mi cuerpo se tensó y di una sonrisa fingida.
—Ha-hannah estaba triste y y-yo le hice cosquillas. —Balbuceé asustado.
En una página de Internet leí sobre un artículo en donde dos hermanos se enamoraban y una vez sus padres los descubrieron teniendo sexo en la habitación de ellos. Enviaron lejos a la chica y el chico, se suicidó ya que lo había separado por completo de su hermana.
No sé si sea verdad pero no quiero que envíen a mi Hannah a otra parte que no sea conmigo.
—Es la verdad, —Me respaldó Hannah sentándose en la cama mientras acomodaba su pequeña blusa. —Dan me mintió.
El rostro de mamá se suavizo poco a poco y fue a abrazar a mi hermana diciéndole muchas palabras tratando de hacerla sentir mejor mientras que a mí, me dedico una acusadora mirada.3
Salí de la habitación sintiéndome como un patán que se aprovechaba de su hermana menor. Me senté a lado de mi papá y el partido de Hockey ya estaba comenzado.
Trate de no pensar en Hannah siendo separada de mí y concentrarme en el juego pero todo eso acabó cuando bajo mi mamá con sus miradas de ''Tenemos que hablar''. Tragué saliva duramente y me levanté rápidamente para ir a mi habitación.
— ¡Shawn! Ven aquí. —Escuché la voz de mi papá. Joder. Acabo de llegar aquí.
Baje las escaleras lentamente y vi a mi mamá diciéndole algo al oído a mi papá quien asentía serio, después volteó a verme.
—Los dejare solos. —Murmuró mi mamá y subió las escaleras hasta que vi que entro a la habitación de Hannah. Avance despacio hacia mi papá y vi que palmeó a su lado el sofá.
—Siéntate. —Ordeno. Así que lo hice.
— ¿Qué pasa, papá? —Traté de sonar despreocupado pero en realidad moría de nervios.
—Tenemos que hablar de algo... serio. —Su rostro se suavizó un poco. —Tu sabes que existen cambios en las personales, tanto físicos como emocionales y psicológicos. Pero ahora te diré que en nosotros los hombres nos ocurren más a menudo. En este momento te encuentras en una etapa tan... especial. —Creo que ya se adonde quiere llevar esto. —Sabes que cuando los hombres se excitan puede ocasionar una erección...
—Papá...
—Déjame terminar. —Gruñó y después siguió hablando. —Eso ocurre cuando ves o haces algo comprometedor. Dime, ¿has tenido una erección?
Maldición.
—No creo que esto sea una buena idea... —Hable incómodo.
—Lo es, ahora respóndeme. ¿Sí o no?
Suspire y asentí.
—Sí, papá.
— ¿Y qué hiciste para que la tuvieras?
Joder, esto se está volviendo personal.
—Papá, ¿en serio quieres hablar de esto?
—Eres mi hijo, nada más me interesa que tu salud sexual.
—No necesito tener salud sexual, papá.
—Claro que sí, ¿piensas vivir solo y arrugado por siempre?
—No... Quiero decir, todo será a su tiempo.
—Uy si, ¿crees que tu madre y yo esperamos tanto tiempo para tenerlos a ustedes?
¿Por qué me persiguen las desgracias?
—Papá, o quiero hablar de esto.
—Entonces explícame ¿Por qué estabas arriba de Hannah en su habitación?
Abrí mis ojos sorprendido.
—Pa-papá —Logre articular perplejo. —Ya les dije que ella estaba triste y le hice cosquillas. Fue solo eso.
— ¿En serio?
—Sí.
— ¿Seguro?
—Que sí, papá
—Voy a confiar en ti. —Dijo y volteó la cabeza para seguir viendo el Hockey.
