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Salí del cuarto de cirugías apresuradamente

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Salí del cuarto de cirugías apresuradamente.

— ¡Shawn! ¡Espera! —Gritó alguien detrás de mí.

Me volteé y vi a Katia caminando velozmente hacia mí.

— ¿Qué sucede? ¿Taylor está bien?

—Sí, de hecho, lo llevaran a una habitación para que siga se recuperando. Pero no vine a decirte esto. Y-yo solo quería preguntarte algo... —Dijo nerviosa.

—Dime.

— ¿Te gustó?

Carajo.

— ¿El qué? —Respondí haciéndome el que no entendía.

—Tu sabes... el.... el beso. —Dijo aún más sonrojada.

—Eh, yo... mm... no lo recuerdo... lo siento, tengo que irme, de verdad, tengo mucha prisa. —No quería lastimar a Katia. Pero en realidad, ella no me interesaba en absoluto.

—Shawn espera, necesito decirte algo.

— ¿Qué...? —No pude terminar lo que iba a decir porque Katia ya tenía sus labios sobre los míos besándome desesperadamente.

La tomé de los hombros intentando alejarla de mí pero ella enrolló sus brazos sobre mi cuello casi asfixiándome.

Abrí los ojos por un momento y pude ver de reojo como Hannah me miraba decepcionada mientras avanzaba rápidamente hacia la salida.

Cuando al fin logre zafarme del beso de Katia me disculpe y salí corriendo hacia Hannah.

—Hey, Hannah —Musité llamando su atención pero también ganándome una mirada glacial.

— ¿Qué demonios quieres? —Vociferó.

—Lo lamento, eso que viste no fue lo que creías. De verdad, ella me beso yo no...

— ¡Shawn! —Exclamó al borde de la histeria. —No me interesa lo que hiciste con ella o no, ya eres mayor de edad y deberías de saber lo que es correcto y lo que no lo es. —Habló y siguió caminando.

—Pero, joder Hannah, te debe de interesar lo que me sucede. —Musité caminando colocándome a lado de ella.

— ¿Por qué? ¿Por qué soy tu hermana? Hecho.

Eso me dolió.

—No, mierda, no no no. Estamos juntos en esto, maldición. Hazme caso, Hannah. —Hablé desesperado.

—Déjame en paz, no quiero escuchar tus lloriqueos.

— ¡Hannah! ¡No son lloriqueos!...

— ¡Hannah! ¡Creí que no vendrías! —Dijo un chico abrazándola cortamente.

—Sammy, ¿qué haces aquí? Deberías de estar cenando en tu habitación. —Murmuré sorprendido. ¿Ella había estado con él?

—Doctor Shawn, lo siento. Quería salir de esas cuatro paredes, nunca creí encontrarlo aquí. Además, no pasó nada, lo juro, me encontré con esta hermosa chica y me cuido mientras estaba fuera del alcance de los medicamentos. —Dijo totalmente apenado.

— ¿Ella te cuidó?

— ¡Sí! —Dijo mirando a Hannah notando un brillo especial en sus ojos. — Ella me dio mi medicina y me acompaño a caminar por el patio del hospital un rato, aunque realmente solo fueron unos cinco minutos. Es muy amigable, ¿la conoce?

—Sí, ella es mi... — ¿Qué diría? Lo normal idiota, ''Ella es mi hermana''. Pero yo no quería decir eso. Supongo que si no lo fuera probablemente diría: Ella es mía.

Pero no es así.

—Soy su hermana menor. —Dijo Hannah al ver que no respondía.

— ¿Hermana? ¿Menor? —Repitió confundido Sammy. — ¿Cuántos años tienes? —Le preguntó a Hannah.

—Dieciséis. —Dijo sonrojada.

—Joder, soy un maldito pedófilo aprovechado. —Murmuró despeinando su cabello.

— ¿Qué? ¿Por qué? ¿Qué le hiciste? —Lo bombardeé con preguntas.

La rabia estaba creciendo en mi interior.

— ¿Ah? ¡Nada! doctor Shawn, yo jamás tocaría a una mujer sin su consentimiento, y menos si es su hermana.

—No importa Sammy, yo confió en ti. —Dijo Hannah, haciendo que los celos llegaran a mí en un abrir y cerrar de ojos.

Los dos se quedaron viendo tiernamente como dos adolescentes enamorados.

Los minutos pasaron lentamente.

—Sammy, lamento pero, deberíamos irnos. Tenemos cosas que hacer. —trate de ser lo más amable posible, pues Sammy no merecía que estuviera con un ataque de celos en este momento.

—Sammy, ¿cuántos años tienes? —Murmuró Hannah tomándolo de la mano.

Respira...

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—Veintiuno. —Sonrió un poco tímido. Hannah sonrió y le dio un beso en la mejilla.

—Nos vemos mañana.

— ¿Volverás? —Preguntó ilusionado.

—Claro que sí. —Sonrió sinceramente y se abrazaron cariñosamente.+

—Es hora de irnos, Hannah. —Reproché.

—Hasta mañana, pequeña Hannah. —Dijo Sammy suspirando enamorado.

—Hasta mañana, Sammy. —Rió juguetonamente.

Sammy, ¿por qué te tuviste que enamorar de mi Hannah?

Mi hermano. (Shawn Mendes) O R I G I N A LDonde viven las historias. Descúbrelo ahora