Destiny y El Torneo de Los Tres Magos [DEH#4]

Capitulo 67. Dos hechizos y un beso.

—¿También Dumbledore cree que Quien-tú-sabes está recuperando fuerzas? —murmuró Ron.

Harry ya había hecho partícipes a Ron y Hermione de todo cuanto habíamos visto en el pensadero y de casi todo lo que Dumbledore nos había dicho y mostrado después. Y, naturalmente, también había hecho partícipe a Sirius, a quien había enviado una lechuza en cuanto salió del despacho de Dumbledore. Aquella noche los cuatro tuvimos que quedarnos hasta tarde hablando de todas esas cosas en la sala común.

Ron miraba la chimenea.

—¿Miedo, Ron? —le pregunte cuando parecía que este temblaba.

—Nada ¿Y confía en Snape? —preguntó Ron—. ¿De verdad confía en Snape, aunque sabe que fue un mortífago?

—Sí —respondió Harry.

—¿Y Fudge cree que Madame Máxime atacó a Crouch? —preguntó Ron, volviéndose hacia nosotros.

—Sí —repuse—, pero sólo porque Crouch desapareció junto al carruaje de Beauxbatons.

—Nosotros nunca sospechamos de ella —comentó Ron pensativo—. Tiene sangre de gigante, y no quiere admitirlo...

—Claro que no quiere admitirlo —dijo Hermione bruscamente, levantando la mirada—. Mira lo que le pasó a Hagrid cuando Rita se enteró de lo de su madre. Mira a Fudge, llegando a rápidas conclusiones sobre ella, sólo porque es semigigante. ¿Para qué iba a querer que lo supieran?, ¿para hacerse víctima de ese tipo de prejuicios? En su lugar, sabiendo lo que me esperaba por decir la verdad, también yo diría que tengo el esqueleto grande. —De pronto Hermione miró el reloj y exclamó asustada—: ¡No hemos practicado nada! ¡Tendríamos que haber preparado el embrujo obstaculizador! ¡Mañana tendremos que ponernos a ello muy en serio! Vamos, Harry, tienes que dormir.

Subimos al dormitorio, Hermione y yo. Me puse la pijama, y dejaba caerme a la cama, estaba algo frustrada... estaba tan segura de que era él el impostor, pero... me he equivocado, nunca me he equivocado en cosas así, siempre tengo razón sobre las personas.

Tal vez y alguien busque incriminarle, Karakov, intentando ganarse la confianza de su maestro... Dumbledore cree en Snape, yo debería hacer lo mismo... Snape tan solo es incomprendido por todo el alumnado, incluyéndome a mí, yo también dudo de su inocencia.

—¿Has avanzado en algo de Rita? —me preguntó Hermione.

—Creo que me he olvidado de eso —respondí mirándola, cuando Rames y Ruddy, ocupaban espacio en mi cama, en búsqueda de mimos.

—No has sido tu misma, con esa suposición de que Moody es el impostor —solté un gruñido con el comentario, y tome un suéter junto con las correas de los perros—. ¿Qué haces? —preguntó confundida, viéndome colocar mis zapatos.

—Debo salir, tengo cosas que practicar antes de cualquier cosa —tomé también el libro de hechizos avanzados que tome.

Salí del castillo, había un poco frio, pero Ruddy y James, lo ignoraban porque solo querían jugar fuera del cuarto, donde no les he tomado mucho tiempo, como antes, pero las cosas ya cambiaron, no mas pensamientos de conspiración, solo me quedaba desenmascarar a Rita.

—Eso suena divertido —mire mi mano desilusionada, pero no es así, pegue mi mano contra el suelo, y habia destruido una gran parte del suelo, no llegaba al kilómetro, pero la profundidad fue mucha, tome mi varita, y con mi mano derecha, me concentre en las piedras que quedaron el camino.

Esto me cuesta mucho, pensaba intentando cargar con todas ellas en mi mente, deje que se quedaran encima del hueco que habia hecho, y luego, concentraba mi mano izquierda con el poder del aire, incrementaría más, sería una explosión contenida.

Fue así, las piedras explotaron, cayéndose en polvo.

—Veamos.

El profesor Flitwick me enseño el movimiento de mano, y McGonagall la pronunciación correcta del hechizo, por lo que me concentre en realizar el hechizo potente.

—Aguamenti —conjure realizando el movimiento de ondulación, pero solo salieron unas gotas de él, gire los ojos frustrada, como un gruñido—. Aguamenti.

Esta vez salió un chorro, parecido al de una manguera de agua, el cual no duro mucho tiempo, atrayendo el libro hacia mí, busque el hechizo nuevamente... puedo crear un chorro de agua o una ola... quiero la ola.

Mejorare mi concentración y la intención. Por lo que en mi mente se quedo una gran ola.

—Aguamenti —salió con mayor intensidad el agua de la varita, y logre llenar por la mitad ese pequeño hueco que había creado de agua, salte de felicidad, y pase la página, para aprender el siguiente hechizo de agua, aqua ercuto, creo que va de la mano ante intención y concentración.

Respire hondo.

—¡Aqua Eructo! —hice el mismo movimiento, pero lo que salió de mi varita, fue un potente chorro de agua, que me hizo alejar de mi lugar, también, destruyo mas de lo que yo hice, mire incrédula la obra de destrucción que había hecho.

Por primera vez, no se equivocaban con mi apodo.

—Des —me sacan de mis pensamientos, y alce la mirada, Cedric se acercaba a mi, estaba en una pijama amarilla, también llevaba una sudadera oscura, su cabello castaño lo tenia todo alborotado—. ¿Qué haces?

Este se acercaba curioso, y miraba el libro.

—Aqua eructo —dice este con sorpresa—. ¿No es un hechizo avanzado?

—Un poco así, cuesta mucha energía —respondí señalando todo lo que retrocedí por culpa del hechizo.

—Tambien despertaste a gran parte del dormitorio de Hufflepuff —le mire apenada y este se sentaba donde yo estaba observando el libro de hechizos—. ¿Para que aprendes hechizos de agua?

—Creo que son útiles —respondo dejando que mi trasero cayera en el suelo, y miraba a mi varita, como si fuese lo mas interesante—. ¿Te estas preparando para tu tercera prueba?

—Si, la profesora Sprout me esta ayudando —respondió Cedric suavemente—, no falta mucho, quería decirte Des que... a pesar de todo, te sigo queriendo.

Le miré sorprendida, este estaba lo suficientemente cerca de mí, su cuerpo se pegó a mí, sentí su pecho, su corazón tamboreaba nervioso, sus ojos grises brillaban.

—No como amigo, durante nuestro mi primer encuentro, supe que eras la indicada... solo espero que cuando todo esto acabe me des una segunda o... otra oportunidad —solté una sonrisa divertida desviando la mirada avergonzada, por la cercanía tan de repente de que había tenido, sentí su suave mano toca mi mejilla, haciendo que le vea—. tan solo quiero... besarte una vez.

Sus labios tocaron los míos, y fue tan terrorífico, porque en mi cabeza, se reproducía un sueño que tuve tiempo atrás... su muerte. 

Suspenso... voy a hacer capitulos diarios. 

Ya he acabado de escribir toda la saga, aunque creo que habran problemas de redacción, y un poco de congruencia, pero intentare redactarlo mejor, gracias por leer, y no se les olvide votar y comentar.