Capitulo 65. Lo que se ve y lo que se escucha.

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Durante los días siguientes, pasamos todo el tiempo libre o bien en la biblioteca, creo que era momento de olvidarme del caso de Moody de una buena vez, así que aproveche a leer hechizos de agua, después de todo, no puedo manipular el agua sino tengo ninguna existente, encontré unos hechizos, hechizo de creación de agua y el encantamiento aqua eructo, aunque no hay diferencia, tan solo en la intensidad del chorro.

Mientras yo leía sobre hechizos de agua, Harry, Ron y Hermione, leian sobre maleficios, o bien en aulas vacías en las que entrabamos a hurtadillas para practicar. Harry se dedicó en especial al encantamiento aturdidor, que nunca había utilizado. El problema era que las prácticas exigían ciertos sacrificios por parte de nosotros.

—Tu sabes utilizarlo —recriminaba Ron cuando el era el objeto de prueba—. ¿No podríamos secuestrar a la Señora Norris? —sugirió durante la hora de la comida del lunes cuando, tumbado boca arriba en el medio del aula de Encantamientos, empezaba a despertarse después de que Harry le había aplicado el encantamiento aturdidor por quinta vez consecutiva—. Podríamos aturdirla un poco a ella, o podrías utilizar a Dobby, Harry. Estoy seguro de que para ayudarte haría lo que fuera. No es que me queje... —Se puso en pie con cuidado, frotándose el trasero—. Pero me duele todo...

—Bueno, es que sigues sin caer encima de los cojines —dijo Hermione perdiendo la paciencia mientras volvía a acomodar el montón de almohadones que habían usado para practicar el encantamiento repulsor—. ¡Intenta caer hacia atrás!

—¡Cuando uno se desmaya no resulta fácil acertar dónde se cae! —replicó Ron con enfado—. ¿Por qué no te pones tú ahora?

Solte una sonrisa divertida.

—Bueno, creo que Harry ya le ha cogido el truco —me apresure a decir—. Y no tenemos que preocuparnos de los encantamientos de desarme porque hace mucho que es capaz de usarlos... Creo que deberíamos comenzar esta misma tarde con los maleficios y duelos.

—¿Y quien se batiría a duelo contra él? —preguntó Ron, dando entender que no quería ser sujeto de práctica, mire a Hermione, que también parecía echarse atrás con la idea de ser el sujeto de prueba.

Pero ella sabe más hechizos mágicos que yo.

Así que, sin ningún voluntario, intente pensar en quien, pero antes de darme cuenta, los tres me observaban, con duda, miraba sus rostros que sabía que significaba.

—Bien, Destiny se batirá a duelo contigo, Harry —dice Hermione con satisfacción, y echando una mirada a la lista que habían confeccionado en la biblioteca—. Me gusta la pinta de éste, el embrujo obstaculizador. Se supone que debería frenar a cualquiera que intente atacarte. Vamos a comenzar con él.

Sonó la campana. Antes de poder hacer algo. Recogimos los cojines, los metimos en el armario de Flitwick a toda prisa y salimos del aula.

—¡Nos vemos en la cena! —dijo Hermione, y emprendió el camino hacia el aula de Aritmancia, mientras nos debíamos dirigir al de Adivinación, yo cargaba con la teoría de los hechizos de agua, tenia tantas dudas de ellos, que mi mejor opción seria preguntar a Flitwick o McGonagall de ellos.

Por las ventanas entraban amplias franjas de deslumbrante luz solar que atravesaban el corredor. Fuera, el cielo era de un azul tan brillante que parecía esmaltado.

—En el aula de Trelawney hará un calor infernal: nunca apaga el fuego — comentó Ron empezando a subir la escalera que llevaba a la escalerilla plateada y la trampilla.

No se equivocaba. En la sala, tenuemente iluminada, el calor era sofocante. Los vapores perfumados que emanaban del fuego de la chimenea eran más densos que nunca. Me he sentado como siempre, con Neville, después de todo, este siempre esta solo.

Destiny y El Torneo de Los Tres Magos [DEH#4]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora