Me pregunto cuántas veces he estado justo aquí, pensando en que hacer, como actuar o que decir pero me doy cuenta de que es estúpido pensarlo, analizarlo tanto, simplemente tengo que armarme de valor y hacerlo, no es tan difícil, no es la primera vez que estoy entre entrar o regresarme por donde vine.
Suspiró, puedo hacerlo y lo hago, finalmente entro a la mansión, luego de estar observando la puerta por un rato, como si la puerta fuera tan interesante de ver.
Ya en el interior de esta, noto lo sola que está, no se escucha ni un ruido, por lo que, deduzco que no hay nadie y que todos sigan en la clínica.
Avanzo hasta las escaleras, no me detengo hasta llegar al pasillo y posteriormente, a mi habitación. No quería volver a la mansión pero era necesario, tenía que venir por mis cosas o por lo menos, algunas de ellas. Emilia insistió en acompañarme pero preferí hacerlo sola para que ella no tuviera más opción que ir al Red Sharks y encontrarse con Matteo.
Ya en mi habitación, busco una mochila en la cual guardar alguna de mis pertenencias pero cuando dejo la mochila sobre mi cama con la intención de ir por mis cosas para comenzar a empacar, me detengo al ver una hoja sobre esta.
Otro maldito anónimo.
Ni siquiera tomo la hoja, la leo desde donde estoy de pie.
«Llego el momento que tanto esperamos, mi plan está por concretarse en cualquier momento así que está más alerta que nunca, en cualquier momento tendremos que partir muy lejos de aquí»
Palidezco, ¿Qué acabó de leer?
Está vez, si tomo la hoja en mis manos y la releo un par de veces más tratando de asimilar lo que dice.
¿Acaso a Sharon se le zafó un tornillo? ¿Cómo que «llego el momento que tanto esperamos»? En todo caso, será el que ella esperaba, además, ¿De qué plan habla si nunca me hablo de que iba? Y peor aún, ¿Cómo que en cualquier momento tendremos que partir muy lejos de aquí? Esta loca si cree que me voy a ir con ella, cuando ella se fue y me dejó, me perdió, que ahora no vuelva con que tenemos que irnos porque yo ni loca me voy y mucho menos con ella.
Pienso en romper la hoja tal como lo hice la última vez que recibí un anónimo pero no lo hago al recordar que hay una persona que me puede explicar todo esto, aparte de Sharon, es decir, Rey, al fin y al cabo, él es quien deja los anónimos y no estoy dispuesta a quedarme con la duda esta vez.
Avanzó decidida hasta salir de mi habitación con la hoja en mano y casi corriendo llego hasta las escaleras y de la misma forma, abajo estas.
En el living, sigue sin haber ni un alma, por lo que, no lo pienso mucho cuando me dirijo hasta la cocina pero me detengo al poner un pie en el comedor encontrándome con Maggie sentada de espalda a mí observando atentamente una laptop que se encuentra sobre la mesa.
No se percata de mi presencia, por lo que me acerco hacia ella con cuidado hasta situarme a su lado.
—¿Qué haces? —Inquiero provocando que ella se sobresalte.
—¡Ámbar! ¡Casi me matas del susto! —Frunzo el entrecejo, ¿Desde cuándo tanta confianza?—. Veo que ya encontraste el anónimo, se suponía que debías verlo ayer pero con todo lo del Alfredo creo que ni a tu habitación entraste —Sonríe un poco dejándome por un momento sin habla.
—¿Qué? ¿Cómo... cómo sabes cuando debía encontrar el anónimo? —Ella se encoge de hombros.
—Porque fui yo quien lo deje en tu habitación —Suelta como si nada haciéndome retroceder un poco.
—¿Qué? ¿Vos? Pero, eso no tiene sentido, pensé que Rey era él que lo hacía —No hago más que observarla confundida.
—De los anónimos siempre me encargue yo, Rey era quien estaba atento a los movimientos de todos —Me explica y sólo así comprendo todo.
—¿Vos trabajas para mi madrina? —No me atreve a afirmarlo por lo que espero a que ella lo haga.
—En efecto y llegaste justo a tiempo, sólo presiono aceptar —Señala la página abierta en la laptop—. Y todo estará listo.
—¿De qué hablas? ¿Qué estás haciendo? —Inquiero, sin comprender aun lo que hace con la laptop.
—Por concretar el plan, estamos a un paso de que la fortuna Benson sea nuestra —Abro los ojos sorprendida—. Cuando presione aceptar la fortuna será transferida a una cuenta al exterior y no habrá motivo para seguir aquí.
—¡¿Qué?! ¡No! Es decir... ¿Cómo? —Ni siquiera soy capaz de decir las cosas con claridad, lo que acaba de decirme me ha caído tan frío como un balde de agua lo haría.
—Fácil, con los datos de la cuenta bancaria de los Valentes todo es pan comido, lo difícil fue obtener dicho datos, estuve todo un mes tratando de obtenerlos y luego de tanto, al fin los tengo. Sólo necesito que esto termine de cargar...
—¡No! —La interrumpo—. Vos no podes hacer eso.
—¿Qué decís? —Ella me observa confundida—. ¿Cómo que no puedo?
Trato de pensar en algo lógico para decirle y evitar que haga semejante locura pero antes de que ella o yo podamos emitir palabra, alguien más lo hace.
—Ámbar, Maggie. ¿Qué sucede acá? —Ambas volteamos encontrándonos con Mónica y Miguel.
Maggie y yo nos observamos y esa simple acción provoca que los Valentes avancen más hacia donde estamos.
Miguel trata de observar la pantalla de laptop detrás de Maggie pero ella se mueve impidiendo que él pueda ver algo. —¿Qué hacen con esa laptop?
—¿Qué tienes ahí, Ámbar? —Aparto la mirada de Maggie y enfoco a Mónica, quien observa la hoja en mi mano con curiosidad. Yo trato de hablar pero de mis labios no salen más que balbuceos ante los nervios—. Déjame ver —Me alarmó pero antes de que pueda evitarlo, ella toma la hoja y comienza a leerla.
Mi corazón se acelera a más no poder.
—Ámbar, ¿Qué es esto? —Cuestiona Mónica tras leer el anónimo mientras Miguel se acerca un poco hacia ella para leerlo.
¿Me podría tragar la tierra?
—¿Qué está pasando aquí? —Repite Miguel.
—Lo que sucede aquí es que el plan de Sharon está por concretarse —Todos dirigimos la mirada hacia Rey, quien viene llegando—. Y Maggie está apunto de transferir la fortuna Benson a una cuenta en el exterior.
Los Valentes se miran entre sí y seguidamente, Mónica dirige su mirada hacia mí.
—Ámbar, ¿Tú sabías todo esto? —Inquiere para inmediatamente señalar el anónimo—. ¿Tú eres parte de esto? ¿Todo este tiempo nos estuvieron engañando?
xxx
Fecha de publicación: 16/07/2018
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Coseme | Terminada - Editando
FanfictionSu vida era "perfecta", ella tenía todo lo que cualquiera quisiera tener, pero sin previo aviso y como un huracán, llegó ella, esa chiquita que con su inocencia, se metió en su vida: en su casa, en su colegio, en su pista y se lo arrebato todo: su p...