Capítulo 40.

1.2K 114 69
                                    


—No, no... ¿Qué paso? —Me acerco hacia ella—. Sharon... ¡Madrina! ¡Háblame! ¡Decime algo! —Suelto desesperada, mi intención era quitarle el arma para evitar una tragedia, no hacer que sucediera una y ahora que veo como, tras el disparo impactar en su abdomen, la sangre no deja de fluir, no puedo sentirme peor; todo es mi culpa.

—Ambar... —Masculla ella y puedo notar como su mano intenta tomar la mía, por lo que me apresuro a acercar mi mano a la de ella dejando que la tome—. Ándate... sálvate.

—¿Qué? No, yo no me voy sin vos, vamos a salir de acá juntas —Menciono mientras limpio mis lágrimas antes de intentar levantarla.

—Este es mi final, he causado mucho daño y... —Ella tose un poco—. Y no merezco que intentes ayudarme.

—No, yo no voy a dejarte morir, a pesar de todo el daño que me has causado, sos mi madrina y... —Sollozo sin poder evitarlo—. Yo te quiero...

—Y yo a... vos pero me equivoque demasiado —De vuelta, las lágrimas se hacen presentes y no solo de mi parte sino también de la de ella.

—No, nunca es tarde para cambiar... yo te voy a ayudar, te lo prometo —Insisto pero antes de que yo pueda agregar algo más, siento como me toman del brazo alejándome de ella—. ¡No! ¡Soltame!

—¡Tenemos que salir de aquí! ¡El fuego no tardara en intensificarse! —Es Rey quien habla mientras sigue insistiendo en apartarme de ella.

—¡No, no! ¡Yo no la voy a dejar! ¡Soltame!

—¡Luna y vos tienen que salir de aquí! —Niego desesperadamente con la cabeza intentando a su vez que me suelte.

—¡No! ¡Déjame, soltame!

—¡Salgan ahora que pueden, yo me encargo de Sharon!

—¡No, yo...!

—¡Yo me encargo! —Me asegura logrando que me calme un poco y observe a mi alrededor como el fuego continua expandiéndose y consumiendo todo a su paso, por lo que regreso mi mirada a Rey, puesto que él tiene razón, sino salimos ahora mismo de la mansión luego será muy tarde e imposible, así que dirigiendo mi mirada una última vez hacia donde Sharon se encuentra, me resigno a hacer lo que Rey me pidió haciéndome a un lado para que él se acerque a ella mientras que yo, me alejo en dirección hacia Luna, quien permanece sentada en la silla pero, según puedo observar, ya ha sido desatada seguramente por Rey, no obstante, no logro comprender porque si ya está desatada sigue aquí en vez de haber salido por ayuda, ¿Qué diablos le sucede a Luna?

—Luna, ¿Qué haces? Tenemos que salir de aquí —Le digo pero ella ni parece notar que estoy frente a ella, su mirada esta fija en el fuego—. Luna... ¡Luna!

—Se... se incendia la... la mansión, co-como en mi... su-sueño —Balbucea.

—Sí, se incendia y por eso, tenemos que... —No logro terminar de hablar ya que, sin poder evitarlo, comienzo a toser debido al humo que invade el lugar.

—Va-Vamos a mo... morir —Sigue ella, esta vez, sollozando.

—No, eso no va a suceder —Digo aun tosiendo.

La tomo de la mano mientras con la otra trato de apartar el humo para poder ver mejor para, seguidamente, jalarla colocándola de pie.

Mentiría si no les dijera que no estoy asustada porque en verdad lo estoy, no quiero ni pensar en que sucederá si el fuego continua expandiéndose tan rápido como se encuentra haciéndolo. Suspiro, debo apartar los pensamientos negativos de mi mente y concentrarme, no hay tiempo que perder, mientras más rápido salgamos de la mansión más rápido podremos ir por ayuda, aunque a estas alturas ya se deben haber percatado de lo que sucede, ¿no?

Coseme | Terminada - EditandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora