NHALINIE
Me levanté como a las 9 de la mañana, me metí a la ducha como por media hora, cuando salí, estaba el apartamento un poco oscuro... solo entraba la luz del sol.
Salí a la cocina envuelta en la bata toalla, preparé algo para desayunar y lo traje a mi cuarto.
Mientras desayunaba, estaba pensando en qué ropa ponerme para ir a visitar a Brooks.
Él no sabía que yo iba, pero yo estaba segura de que él estaba ahí porque los domingos no trabajamos en la clínica ya que contratan a doctores de horario especial para horarios especiales.
Después de desayunar me paré frente al armario, y miré toda mi ropa.
Después de media hora mirando, aún no sabía que ponerme. No sé por qué me estaba matando tanto la cabeza si solo iría a ver a Brooks y a pasar el día con él
Me senté en la cama frustrada por no saber que ponerme.
Miré un momento mi zapatera y divisé mis converse blancas, salí corriendo y las tomé entre mis manos, en ese preciso instante recordé un vestido ancho que tengo, es blanco con finas rayas azules.
Lo busqué entre toda mi ropa y efectivamente lo conseguí.
Me enfundé rápidamente en él y me miré al espejo, me veía bien, me gustaba, estaba bien vestida sin verme demasiado arreglada.
Me puse un poco de brillo en los labios, colonia, crema y tomé mi bolso dispuesta a salir de casa.
Subí a mi camioneta y cuando pasé por un súper mercado me dio un antojo de comer arroz mixto con papas fritas.
Me bajé, compré todo lo que necesitaba y me encaminé al departamento de Brooks.
Cuando le avisé al portero que me abriera la puerta se sorprendió, fue extraño pero lo saludé normal y le dije que no le avisara a Brooks que iba a subir.
Cuando llegué a su departamento di tres golpes suaves y esperé.
Cuando se abrió lentamente la puerta casi se me cae la baba de la boca.
Brooks estaba sin camisa – de nuevo – y el pantalón con el cierre abajo y el botón abierto, se le notaba la marquilla Calvin Klein de su bóxer y yo pasé un poco de saliva.
-Buenos días, princesa - dijo él un tanto asombrado y yo levanté inmediatamente la mirada hacia sus ojos. Se veían más claros hoy que el resto de los días, el reflejo de la luz del día le daba casi de frente en su rostro haciendo resaltar sus hermosas pecas. Sus labios se veían bastante rojos y entreabiertos.
Caí en cuenta de que estaba observándolo como una idiota...
-Oh buenos días, Brooks, ¿Cómo te encuentras? – él me miró en silencio y fue algo incómodo.
¿Será que tiene otros planes?
¿Será que he sido inoportuna?
¡Jesús! Qué vergüenza.
-Estoy muy bien, ¿Quieres pasar? – su pregunta me sacó un poco de mis pensamientos.
-Bueno, de hecho, pues, hoy es domingo y supuse que estabas aquí sin hacer nada y pues traje esto – dile levantando las bolsas hasta la cintura para que las viera – para ver si preparamos juntos un delicioso arroz mixto con papas fritas.
Brooks se mordió su labio inferior.
¡Jesús!
-Claro, es la mejor proposición que me han hecho en este día. – me quitó las bolsas de las manos y dio media vuelta hacia el interior del departamento.

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Vida Clandestina
AléatoireDe día es la mejor de las psicólogas, te atiende, te da consejos y escucha con atención cada uno de tus problemas, pero de noche, su vida es completamente diferente, nadie la conoce por su nombre real, nadie sabe que es psicóloga, ella es... Nani e...