43

2 0 0
                                    

NHALINIE

Nos habían interrumpido, una de las enfermeras había tocado la puerta – gracias a Dios no la abrió – para preguntarle a Brooks si me había visto, ya que una paciente me estaba esperando en el consultorio.

Brooks soltó una palabrota y me bajó de su cintura.

Yo, con las piernas un poco temblorosas y húmeda hasta más no poder, me bajé de encima de él y me quedé parada y recostada en la pared para tomar un poco de aire y lograr que mi cuerpo empezara a trabajar normal.

Lo que había pasado había sido demasiado intenso.

Miré a Brooks después de que se fue la enfermera y este me miro con una sonrisa hermosa la cual le devolví.

Se sentó en el sofá de su consultorio y me fui tras de él un momento.

Me senté a su lado y tomé una de sus manos con las dos mías.

Él se acercó, me dio un rápido beso en los labios y luego se alejó.

-Tengo que irme – eso era algo que él ya sabía – sonrió.

-Tenemos algo pendiente, en la noche iré a tu casa y dialogaremos un rato. Llevaré algo para comer – me dijo él y yo le sonreí.

-Sí, también recuerda que iremos a ver a tu padre. Mañana mismo iremos – hizo un gesto como pensativo pero luego asintió – me voy – le recordé.

-Nos vemos en un rato, preciosa – me atrajo hacia él y me sentó en sus piernas. Su mano derecha empezó a subir desde mi rodilla hasta mi muslo mientras me besaba, cuando la iba acercando a mi entrepierna se la detuve y me puse de pie.

-Me están esperando – le dije y él me miró con fingida indignación, soltó una palabrota para luego sonreír.

-Te amo – me dijo él y yo casi me atraganto con mi propia saliva, casi me da un infarto en ese momento – le sonreí de nuevo y me fui.

Él sabía que yo no podía corresponderle tan rápido y menos con una frase tan fuerte como esa.

Yo tenía que descubrir qué era exactamente lo que sentía por él...

Pero de algo sí estoy segura. Lo que siento por Broler no se puede ni siquiera aproximar a todo lo que Brooks me produce y me hace sentir...

Yo también siento muchas cosas por él....

______ * ____

Había caminado hasta mi consultorio y atendí a dos pacientes, en momentos tenía que pedir disculpas porque mi mente no dejaba de pensar en lo que había pasado hacía unos momentos atrás y perdía completamente el hilo de la plática de las personas que me hablaban.

Tenía mucho por hacer, entre eso, hablar con Broler... pero no hoy.

Hoy no iría a las carreras, sinceramente estaba pensando en renunciar, lo que había pasado con aquella droga era muy peligroso y no quería verme envuelta en eso.

Temblé de solo pensar en que si aquellos idiotas no nos hubiesen sacado de la carrera, posiblemente seriamos nosotros los que estuviéramos en la cárcel.

¡Jesús!

Me sentía demasiado feliz en ese momento y ansiaba que mis citas de hoy con los pacientes por fin terminaran para ir a casa y arreglarme para estar un rato con Brooks.

_____ * _____

Eran las 8 de la noche y el departamento estaba solo...

Me ardía el estómago de solo pensarme sola con Brooks aquí.

Vida ClandestinaWhere stories live. Discover now