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Ella tenía muchos sentimientos
por repartir. Él los necesitaba
para ser feliz. ¿Y por qué no?
El mismo camino decidieron elegir.
Porque ella se convirtió en
su gran perdición. En una
...
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医院
.
El hospital
.
Para cuando Shōto despertó, ______ seguía dormida. El chico sintió que algo cálido y suave envolvía su dedo meñique, así que se reincorporó y se sorprendió al ver a la chica allí. Todoroki sólo recordaba que ella iba corriendo hacia él, desesperada por alcanzarlo y llevarlo a la enfermería. Al darse de cuenta, miró a su alrededor y, efectivamente, estaban en la enfermería.
—Así que fue realidad... —murmuró.
—El amor... —repitió Recovery Girl, pero para el chico.
Éste se sobresaltó y miró a la mujer que tenía delante, que rodaba los ojos.
—¿El amor? —repitió Todoroki.
—______ se ha quedado ahí todo el rato. Aunque bueno, no podía ir a otra parte si estaba dormida —añadió con sorna—. Pero se preocupa por ti tanto como tú te preocupas por ella —advirtió, más serena—. Aprovechad que sois jóvenes. Ah, y dentro de poco es la ceremonia de premiación, creo que tenéis que recoger algo.
Dicho eso, desapareció.
Las palabras que la heroína le dedicó rondaron en la mente de Shōto, fugaces. Su mente las analizaba, las clasificaba, pero el amor adolescente no se resolvía tan fácilmente. Miró de nuevo a su amiga, su espalda, bajando y subiendo pausadamente, durmiendo tranquilamente; su pelo alborotado; sus labios fruncidos pero relajados, sus pestañas... De alguna manera, un sentimiento nuevo recorrió su cuerpo.
Pero... ¿El amor?
—Buenos días —murmuró la joven mientras se desperezaba.
—Sólo he estado inconsciente unas horas.
—¿Aun es por la tarde? —susurró ella, con sueño.
—Sí.
—Vaya —suspiró—. ¿Dónde...? —su rostro se encendió repentinamente—. ¡El Festival Deportivo!
—¿Qué, si no?
El rostro de ella se puso rojizo.
—Me había olvidado por completo —admitió—. ¿Qué tenemos qué hacer ahora?
—Ceremonia de premiación.
—¿Y yo que pinto ahí?
—Has quedado tercera.
—¿He quedado tercera? —repitió, incrédula.
—Claro. Te enfrentaste a mí, ¿recuerdas?
Y ahí la mente de ______ hizo clic. Miró su mano. Miró sus dedos. Miró a Shōto. Se cuestionó su existencia. Entonces, reaccionó.
