Labios De Miel ♥ Aristemo

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Narra Aristóteles

Después de girarme y verlo, lo abracé con un brazo mientras el otro se encontraba en mi almohada.

Sentí que se movió un poco y dio un pequeño bostezo.

–¿Ari?

–Dime Temo...

–Nada. Dijo somnoliento.

Se acurrucó de nuevo en mi pecho y así nos quedamos hasta la mañana siguiente.

Desperté y me fijé en la hora.

7:30 a.m.

En dos horas será la sesión de fotos. Voy a levantar a Temo para que vaya a cambiarse de ropa y yo aprovecho y también me visto para la sesión.

–Temo, despierta. Susurré suavemente.

Comenzó a moverse un poco y abrió sus bonitos ojos poco a poco para luego tallarlos.

–Buenos días. Dijo sonriendo.

–Buenos días Temo, te despierto para que vayamos a ponernos galanes para El photoshoot. Dije.

–Ah, claro, vamos a juntar esto y luego nos vamos a cambiar. Déjame levantarme.

Nos levantamos y comenzamos a juntar todo.

–¿Cómo dormiste?

–Bien Ari, por la noche sentí un poco de frío, pero yo creo que el edredón me cubrió bien, después de un rato ya no tuve frío.

–Podría ser el edredón o mis brazos. Sonreí.

–¿Cómo?

–Te abracé un rato anoche. Mentí.

En realidad lo abracé toda la santa noche.

–Bueno, gracias. Dijo sonrojado.

–De nada Temo. Ya está, vamos a cambiarnos, nos vemos a las nueve afuera de tu casa, ¿okay?

–Va, nos vemos allá. Sonrió.

(...)

Narra Temo

Caminé hasta mi casa y al entrar me encontré con mi papá en la cocina.

–Buenos días. Sonreí.

–Buen día hijo. ¿Cómo dormiste?

–Bien papá. ¿Y los niños?

–Lupita se va a ir a la escuela con la Frida y el Julio está suspendido, haremos el aseo del edificio hoy. ¿Vas a salir Temo?

–Sí papá. Aristóteles me invitó a su sesión de fotos para Cklass, dice que chance y me toman unas fotos a mí. Sonreí.

–Ándale pues, pero con esos trapos no te van a tomar ni las medidas. Ándele, póngase bien mijo. Nos vemos al rato, porque quiero hablar contigo y con Lupita. Dijo.

–¿Ahora eres Pancho López el señor moda o qué onda?

–Simón. Dijo para luego reír.

–¿Y hablar con nosotros? ¿Qué pasa?

–Es que quiero que hablemos con la Lupita sobre el... Los sobre el amor. Dijo.

–Ella es muy inteligente, te prometo que estará bien papá, pero si quieres hablar está bien. Voy a vestirme.

–Sí, ándale.

(...)

–¿Listo? Dije desde la puerta de mi casa.