Emotions.

Lindos ojos.

-Oh, lo siento, debo incomodarte, ¿estás bien? – Dijo soltándome.

-No te preocupes, estoy bien. – Dije tímida.

Mis temblores habían ya cesado, podía mantenerme parada, pero no podía dejar de mirarlo. Él en cambio, platicaba con todos y de vez en cuando volteaba a verme sonriendo, yo sentía como si mis mejillas fueran radiadores. En una de esas, volteó a verme y guiñó un ojo. Me paralicé un poco, y no supe cómo más reaccionar, así que me disculpé y me fui al baño, me lavé lacara para sacarme el calor y salí del baño. Estaba tan distraída que no me di cuenta que alguien venía frente a mí, choqué mi cabeza contra algo duro, levanté la mirada y era él.

-¡Lo siento! – Me disculpé sobándole el pecho. Me di cuenta que el chico era delgado con solo verlo, pero al tocarle el duro pecho, me di cuenta que unos pequeños músculos se asomaban. Me volví a sonrojar. – Lo siento, lo siento. – Dejé de tocarlo.

-No te preocupes. – Dijo riendo. – Estoy bien.

-¿Seguro?, es que sé que tengo la cabeza muy dura. – Dije.

"¿Qué?, enserio dijiste eso, tonta?" – Pensé.

-No, está bien. – Dijo despeinándome la cabeza. – Iré al baño. – Dijo sonriendo y yéndose al baño.

Me quedé unos segundos ahí parada, hasta que llegó Aurora y me tomó de la muñeca, arrastrándome hasta los tocadores.

-Cierra ya la boca y límpiate la baba. – Dijo riendo.

-No puedo creerlo, Aurora. ¿Todo ustedes ya lo sabían, y no me lo dijeron?, ¿Cómo pueden vivir sabiendo que me comporté como una tonta enfrente de él?, tuve la peor reacción de mi vida, si me hubieras advertido, no me hubiera portado tan mal, ni hubiera caído.

-Caído en sus brazos. – Dijo en forma de suspiro, después se rió a carcajadas.

-Cállate. – Dije sonriendo.

-Es tan guapo, ¿verdad?

-Claro que sí, tiene los ojos más increíbles – Dije emocionada.

-Qué bueno que te gusten mis ojos. – Dijo su voz ronca y profunda detrás de mí.

-Rayos... - Cerré fuerte los ojos y deseé que fuera un sueño. – Lo siento.

-Deja de disculparte – sonrió sentándose en la silla para que empezáramos a maquillarlo, sin embargo no necesitaba mucho maquillaje, solo resaltar sus ojos, un poco de polvos traslúcidos en la zona central y listo, así que todo lo pude hacer yo, mientras las otras chicas maquillaban a los otros actores. – También tienes lindos ojos. – No dejaba de mirarme mientras le ponía un poco de sombras debajo de los pómulos.

-Gracias – Dije en voz baja.

-¿Siempre eres tímida, o solo conmigo?

-Solo es tímida contigo. – Dijo aurora, sonriendo.

-¿Y eso es bueno o malo? – Le preguntó Asa a Aurora.

-Es... bueno, supongo – Dijo divertida.

No necesité ponerle más maquillaje, él estaba perfecto.