Emotions.

El camino a casa

Regresamos a nuestro lado de la playa, por el camino, Asa y yo hablábamos de nosotros mismos, Asa si escuchaba y él no presumía absolutamente de nada, parecía ser una persona sencilla, a excepción del hecho de que le encantaban los videojuegos, pero no me podía quejar, a mí también me encantaban.

Cuando llegamos con nuestros amigos, algunos empezaron a aullar y hacer burla porque veníamos juntos. Henry sentado cerca de la fogata con Raiza, solo voteó a vernos como si estar juntos fuera un pecado.

-¿Disfrutaron juntos? – Preguntó Henry.

-Sí. – Dije sonriendo y restándole importancia a su molestia. - ¿En dónde está Aurora? – Me dirigí a Raiza.

-No lo sé, ¿no estaba contigo? – Preguntó ella.

-La perdí, y ya quiero irme a casa. – Dije pensativa.

-Si quieres, yo te llevo. – Dijo Asa.

-Oh, muchas gracias – Dije volteando a verlo y tocando su brazo en forma de agradecimiento.

Algo pasó en ese instante, sentí de nuevo electricidad en el cuerpo, como cuando llegó y me habló, me estremecí. Asa se sonrojó, pude notarlo, y sin decir nada, serio, me dio la espalda y empezó a caminar.

-Sígueme. – Dijo caminando fuera de la playa. – Adiós a todos. – Dijo despidiéndose generalmente.

-Claro... - Sonreí. – Adiós chicos, nos vemos luego. – Dije corriendo detrás de Asa. – ¡Asa, esperame!

Asa paró para que lo alcanzara, pero no volteaba a verme.

-Gracias por llevarme – Dije al llegar a su lado.

-No hay por qué agradecer.

Caminamos unos minutos hasta llegar a un estacionamiento en donde estaba su coche, él lo abrió y me dejó entrar, después subió y comenzó a manejar.

-Pon tu dirección. – Me dio su teléfono.

Puse mi dirección en el GPS y luego se lo di a Asa. En el camino íbamos en silencio, pero esta vez sí estaba un poco incómoda.

-¿Sucede algo? – Pregunté.

-Mmm.... No me agradó la manera en la que te habló Henry.

-Lo sé, a mí tampoco, si quieres, mañana explico a todos que solo fuimos a caminar, para que no malinterpreten por el comentario del chico...

-No, no te preocupes, tranquila. – Dijo con voz suave. – Es solo que, ¿quién se cree?

Yo sonreí. - ¿Puedo poner una canción?, es un largo trayecto. – Dije.

-Claro.

Conecté mi teléfono a su estéreo y empecé a correr la canción: "Emotions" de Mariah Carey.

-No puede ser. – Dijo riendo. – esa canción es viejísima, y no pareces el tipo de persona a la que le guste ese tipo de música, pensé que serías más del estilo indie, rockero y eso.

Reí. – Claro, claro, aburrida y siempre viste de negro, ¿no?.

-No, es decir, tu personalidad...

-Es que me encanta esta canción, ¿sabes?, tiene tanto, - seguí la letra de la canción: - "Feeling inside", tú sabes – Reímos los dos.

-Bueno, no parece mala. No me has contado mucho de ti.

-Ni tú me has contado de ti.

-Es verdad, ni hemos hablado tanto.

-¿Quieres hablar ahora?

-Es tarde, ¿no crees?

-Claro – Voltee hacia la ventana.

-Pero, si quieres, podríamos salir o algo.

-¿No te importan los rumores ocasionados por Henry?

-Como crees... es solo un grosero.

-Entonces, deberíamos salir a tomar algo un día... - Dije.

¿Qué?, no podía creerlo, Asa Butterfield estaba invitándome a salir, tal vez no fuera como una cita, ¿o sí?, pero tal vez no del estilo romántico.

Llegamos a mi casa después de unos minutos, él me acompañó hasta la puerta y espero a que entrara. Yo subí a mi habitación corriendo como adolescente emocionada y me asomé por la ventana. Lo vi caminando hacia su coche, entonces volteó hacia la casa y logró verme en la ventana, me saludó con la mano y lo siguiente me hizo suspirar: Lanzó un beso al aire.

Mi reacción, además de suspirar, fue "atrapar" el beso y "ponerlo" en mi pecho. Fue algo cómico, tonto o tal vez romántico, no estoy segura, pero en el momento, yo me sentía muy feliz.

Asa se metió a su coche y se fue, yo me fui a bañar y cambiarme para dormir, saliendo, me tiré a la cama alucinando un nuevo encuentro con Asa, y así, sonriendo como una completa tonta, me quedé dormida.