052. Chaeyoung como muñeca de pruebas.

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Mina suspiró feliz. Era el penúltimo apartamento que veía y era el menos costoso de todos, además de ser sensacionalmente lindo y fresco. Todos los días después de salir del trabajo por dos semanas seguidas viajaba hacia la fila de departamentos cerca de su vecindario, claro que completamente sola, ya que todo era una sorpresa. Aguantando un sinfín de viejas amargadas que trataban de amargarle la vida también con sus tontas historias y costos altísimos.

Dahyun se había dado por vencida después de una interminable búsqueda por su parte. Su tiempo era reducido cada vez más por la falta de personal en la empresa donde trabajaba, cosa que estaba consumiéndose su alma poco a poco. ¡Lo bueno es que pronto llegarían los demás y tendría tiempo para sus propias cosas!

Pero hasta ahora, lo único que hacía era comer, dormir y levantarse para ir a la nueva empresa en ascenso. Mina usualmente dejaba su plato de comida listo en el microondas, aunque otras veces estaba igual de ocupada —ya se sabe por qué— y todo quedaba en sus manos, ¡pero no intentaba cocinar por sí misma! Eso sería como un absoluto suicidio.


Para la semana siguiente, las cosas de Kim Dahyun no estaban en casa. Chaeyoung estaba solo un poquito triste, pero no era como si no la fuera a ver nunca más. Se aprendió el camino de ida y vuelta en menos de dos días y como si fuera una experta, todas las tardes cuando Mina se encontraba en el trabajo, Chaeyoung se iba por su cuenta hacia el nuevo hogar de su querida hermana.

Aprovechaba esas pequeñas salidas para descubrir el nuevo mundo que tenía en frente de su cara, sonriendo a la cámara en la cabina de fotos en medio de un centro comercial.

"¡Para Mina!" Estaba escrito en una de las esquinas, el japonés no era su fuerte, ni decirlo ni mucho menos escribirlo. Pero ahí estaba, con una extraña caligrafía escrito el nombre de la japonesa junto a unos pequeños dibujos hechos por ella misma con marcadores de colores. No era demasiado, pero sabía que a Myoui le gustarían.

¡Incluso se tomó un par de fotos con unos lentes de sol que se compró! Los cuales debía decir que le quedaban demasiado bien. Las aventuras de Chaeyoung por el mundo era algo digno de ver, su carita emocionada cada vez que veía algo que no estaba acostumbrada a observar era realmente divertido.

THE WILD KITTEN。 ── MICHAENGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora