Seguimos unos minutos entre besos, en realidad se sentía genial cuando Nayeon me tenía entre sus brazos y me dejaba subir a sus piernas para seguir besándola.
Los besos fueron aumentando de tono hasta que me encontré peligrosamente cerca del broche de su sostén y ella se apartó un poco de mi.
- Mina, no... No creo, para- me pidió después de balbucear algunas otras palabras.
- Yo... lo siento- dije bajando la mirada, era vergonzoso estar así con Nayeon y terminara por cortarme.
Quedamos unos minutos sin decir nada mientras volvíamos a la normalidad.
- ¿Mina?- Habló Nayeon.- la miré sin responder- Minari- volvió a insistir.
- ¿Nunca te dijeron que no debías comenzar con algo que no tenías planeado terminar?- pregunté con cierto tono de molestia.
- Cariño... yo no empecé nada- dijo tímida.
- Como sea- dije resignada.- está bien- dije aun sin mirarla.
-Minari... sabes que es algo que las dos morimos de ganas por hacer, pero aun es muy pronto para esto, preciosa, ¿y si quedas embarazada?- preguntó riendo- ¿vemos la película?- la miré con indignación fingida
- Que tonta eres- dije medio enojada.- si, ya que.
Me levanté de sus piernas y me senté lo más lejos que pude, aunque fue en vano.
Nayeon se levantó a poner una película, mientras yo intentaba no mirarla. Tenía esa extraña mezcla entre odio y vergüenza.
Puso la película y volvió al sillón, se sentó a lado de mi y me abrazó, no estoy segura de como pasó, pero terminamos recostadas en el sofá, ella detrás de mi envolviendo mi cintura y acariciando mi cabello.
-Minari- dijo ella después de mucho tiempo en silencio, comenzaba a gustarme la manera en que pronunciaba mi nombre, no lo había notado antes, pero era simplemente mágico
-Dime.
- En algún momento ambas estaremos listas para esto, por ahora me gusta tenerte de la manera en que eres mía, pequeña.
- No entiendo.
- Me gusta lo que eres, me gusta hablar contigo, que me acompañes al hospital, que te sonrojes cada vez que digo algo, que te pongas nerviosa cuando estamos juntas y hagas comentarios extraños. Me gustas tú por lo que eres en este momento y no quiero que cambie de alguna manera por querer tenerte en la cama todo en tiempo, ¿entiendes?- preguntó y yo me sonrojé.
- No creo que seas tan buena como para caer en ese extremo, eh- dije evitando reír.- tampoco es que tu tengas manos de Marfan- bromeé, tomé su mano y entrelacé nuestros dedos. Giré a verla y estaba tan sonrojada como yo.
Como pude gire todo mi cuerpo para quedar acostada frente a ella, era bastante incomodo,
porque estaba a nada de caer, pero me gustaba más mirarla que solo sentirla detrás de mi.
- Sabes que es broma, ¿no?- sonrió y asintió.
- No sé cómo es que tardaste tanto en llegar a mi vida, Mina y no quiero que cambien las cosas, Aún me queda mucho de la Mina inocente y torpe por disfrutar- dijo y me dio un pequeño beso en los labios.
- Aunque no me guste la idea, creo que lo torpe nunca se me quitará, no te preocupes- dije riendo.
- Como sea, no quiero cambiar esto aún.
- Está bien- dije resignada.
Terminamos de ver la película, bueno, ella terminó de ver la película, yo me quedé dormida, quizás aún estaba algo confundida, no era mi idea venir a casa de mi novia solo para ver películas.
Me despertó por después de un par de horas para ir a dormir a su cama y no estar tan incómodas.
Otra vez me quedé parada frente a su gigante cama como tonta, la idea de ver a Nayeon dormir ahí era simplemente hermosa.
- ¿Tengo que preocuparme de que me puedas dejar por mi cama?- preguntó Mi coneja riendo y la miré enfadada.
- Eres una tonta- me acerqué despacio a ella y la abracé por el cuello, si la besaba no podía contar como una noche tan mala, o ¿si?
Sentí sus manos recorriendo mi cintura y detenerse en mi espalda y me jalo más hacia ella.
La miré por un momento a los ojos, sus profundos ojos. Sentía su aliento en mis labios, que causaban cosquilleo en toda mi cara. Me incliné hacía ella y la distancia entre nuestros labios terminó y comenzó a besarme, era tranquilizante la manera en que lo hacía, muy lento como disfrutando el momento a diferencia de los míos desesperados buscando algo más.
Pasó una de sus manos a mi mejilla para acariciar mi rostro y apartarse de mi poco a poco.
-Vamos a dormir, Pinguin- susurró Aún rozando mis labios.
Me prestó algo de ropa y me cambie en su cuarto, ya no me importaba eso, y supongo que a ella tampoco, aunque ella se cambió en el baño cuando vio que me quedaría ahí.
- Buenas noches, Nayeon- dije después de meternos en la cama, nos quedamos como en el sillón, ella detrás de mí abrazándome y yo disfrutando del roce de su cuerpo con el mío.
- Buenas noches Minari- Apartó el cabello de mi nuca y dejo un beso.
- Sabes que te quiero demasiado, ¿no?- le pregunte intentando girar mi cara para verla.
- Estaba al tanto, si-dijo sonriendo y yo rodé los ojos.- y te quiero mucho más, aunque no lo creas- me dio un beso en la mejilla y volví a mi posición anterior.
Pasó sus manos por debajo de la camisa de la pijama y solo las dejó ahí, yo aproveché para entrelazar nuestros dedos y dormir con la sensación de que al menos estaba en la misma cama que la chica de mis sueños.
#especial de halloween :3 para la mayoría de mis fics
ESTÁS LEYENDO
Mi Doctora Favorita [Minayeon][FINALIZADA]
FanfictionEl problema con ella, era que al igual que muchos de los medicos residentes en el hospital era: a) Narcisita. b) Odiosamente egocentrica. c) Tenia complejo de Dios. d) Si no eras un residente, no existias ante sus ojos. ¿Como se supone que actuas fr...