Mi Doctora Favorita [Minayeon][FINALIZADA]

Estúpida Mina

Había vuelto a mi casa hecha un desastre por la ira que sentía, porque carajos Nayeon debía abrazar a una chica mientras su novia estaba en el aula de enfrente haciendo un examen.

En fin, no me detuve a pensar muy bien las cosas, solo sabía que estaba muy enojada y me molestaba estar enojada, porque mis impulsos me decían que llamara a Nayeon para desahogarme y sentirme mejor, pero mi orgullo y yo no lo permitiríamos, porque a final de cuentas eso es lo que las chicas hacen, ¿no? .

Comencé a recibir algunos mensajes de Mi coneja, pero no los abrí para evitar responder. Según lo que decía estaba bastante confundida y no sabía porque me había molestado ¿es en serio, Nayeon?.

Fui a dormir temprano para evitar torturarme con la idea de que ella pudiera irse con otra chica e inevitablemente Terminé en lágrimas hasta caer en un profundo sueño que más bien parecía coma, que quizás era cierto, ya que estaba en estado de coma si presentabas una muy baja puntuación en la escala de Glasgow, o en palabras sencillas, si no tenías respuestas motoras, verbales u oculares y según mi mamá, le costó algo así como una hora despertarme, pero no, no se preocupen, solo bromeo, el estado de coma es algo mucho más serio.

Llegué a la universidad a eso de las 9, había perdido la primera clase, psiquiatría y lo agradecía infinitamente.

Pasé de clase en clase como pude hasta que finalmente llegó clínica quirúrgica, donde supuse vería a Nayeon, así que Llegué temprano para encontrar a alguien, platicar y poder ignorar tranquilamente a mi residente.

— ¡Minari!- me llamaron cuando Pasé por la puerta del servicio.

Me giré a buscar y vi a Irene, perfecto.

—Hola— dije y la saludé con un beso en la mejilla.

—Alguien está de buen humor hoy, eh—dijo bromeando.

—Para nada—le dije y me Miró un poco confundida

Pensé un par de segundos si era buena idea o no contarle a ella lo que pasaba, pero, para ser sinceros, que podía pasar si le decía, a nadie le importaba.

—Resumiéndolo, ayer Nayeon estaba abrazando a una chica y estoy enojada con ella, ¿crees que me podrías besar cuando ella llegue? —me miraba ahora muy confundida

—Deberías tener más respeto por tu novia— dijo bastante seria

—¿Novia?.

—¿No lo es? Vaya, todos creíamos eso, creo que hasta el profesor lo piensa.

—Bueno si, pero no sabía que todos lo sabían- dije algo Incómoda.—en fin, ¿me ayudas?.

Me miró dudándolo, supuse que sería mucho más fácil de convencer.

—Te invito el café a la salida— dije en un intento de sobornarla.

—Que sea mañana temprano—sonreí de lado y asentí

—Solo me besas, cerca de los labios, pero no demasiado, o quizás termine odiándote—asintió segura y se acercó a mi hasta quedar pegada a mi costado

Nayeon estaba tardando en llegar y pensé seriamente si esto era correcto, a mi me partiría el corazón si Nayeon me lo hiciera a mí.

En fin, ya después tendría tiempo de disculparme

Después de unos cuantos minutos la vi acercarse y le di un codazo a Irene para que supiera que venía y me Besó, justo como se lo pedí y sonreí por ello.

De reojo vi a Nayeon que Pasó por un lado y asintió con la cabeza sin mostrar molestia ni nada ¿tan poco le importaba?.

—Gracias—le dije a mi amiga después de que Nayeon pasara.

Me despedí y Entré a la sala donde Nayeon hablaba con el profesor y mis compañeros aprovechaban para seguir conversando un rato hasta la clase.

Cuando terminaron de hablar Nayeon me Miró con una mezcla de decepción y enojo. Estúpida Mina, estúpida Mina, estúpida Mina.

Salió de la sala y el doctor dio la clase disculpándose antes por Nayeon que tenía mucho trabajo y necesitaba ir a atender el piso de cirugía.

Terminamos la clase y esperaba encontrarla por los pasillos, pero no fue así, y lo mismo ocurrió el resto de la semana, ni una llamada, ni mensaje, yo intenté llamarla, pero simplemente no tomaba mis llamadas, creo que ahora si había echado todo a perder.