La semana paso sin más, Nayeon siguió cubriendo la clase del doctor pero intentaba evitarme lo máximo posible, si podía no me hacía preguntas, intentaba que otro pasara lista por ella y se sentaba lo más lejos posible de mi lugar, supongo que debía seguir muy molesta conmigo.
Hasta el jueves, comenzó a cambiar un poquito su ánimo, lo que me costó algo de trabajo que pasara. El miércoles por la tarde, conseguí que uno de los amigos de mi hermano, fuera a la sala de residentes a dejar flores para Nayeon, supongo que sabría que eran mías, no esperaba que pudiera haberme reemplazado tan pronto. Dejé que mi hermano escribiera una tarjeta ya que a mí no se me daba bien ese tipo de cosas y lo llevaron.
Alguien tenía que ceder ante su orgullo, y Nayeon valía la pena el intento.
.Hola- saludó cuando Entré ese día a la sala de clases, siempre era la primera en llegar, así que tuve que asegurarme que no hubiera alguien más a quien saludara.
-Hola- respondí después de asegurarme que era la única persona además de Nayeon en el salón y ella rió después de lo que hice.
- ¿Cómo has estado?- me preguntó después de un tiempo al ver que nadie más llegaba.
- Podría estar mejor- dije con amargura.- ¿y tú?
- De hecho... genial- terminó por decir.- ¿sabes?, ayer alguien me mandó flores, lo cual ha hecho que la semana pase un poquito mejor.
- Me alegro- dije sin ánimo.
- Se que has sido tú, Mina- dijo sonriendo y se sentó a mi lado.
- Pero eso no cambia nada- dije, aunque sonó mas a pregunta.
- Las flores no lo cambian, lo cambias tú. Ayer estuve pensando, y es algo tonto no tenerte conmigo, ayer me sentía mal y luego Llegó tu detalle y solo pensé en ir contigo, luego recordé que me había portado lo suficientemente tonta como para no hablarte y me enojé conmigo misma, aunque me enojé mas, después de recordar la fiesta.
-En fin, es algo que intentaré pasar por alto, si podemos ignorar los problemitas que hemos tenido y vuelves a estar conmigo- sonreí al escucharla.
-¿Es en serio?- pregunté divertida.- ni siquiera deberías preguntar eso.
- Gracias Minari- dijo y me Abrazó para después volver al escritorio.
- ¿Que harás hoy?- le pregunté.- ¿tienes guardia?
- Hoy no.
- ¿Quieres ir a cenar?
- ¿Cómo una cena de reconciliación?- preguntó.
- Mas bien como "pizza casual en jueves"- comenzó a reír
.
- Perfecto-dijo y dejamos de hablar porque mis compañeros llegaron para la clase.
A partir de ese momento, el mundo se volvió color de rosa y no hubo nadie que pudiera quitar mi buen ánimo.
La clase pasó volando y volví a mi casa para poder usar algo que no fuera el uniforme para ir con Nayeon, a quien Alcancé en su casa algunas horas después.
-¿Vamos?- se ofreció a manejar porque solo ella tenía auto, al parecer yo aún era bastante torpe para tener la responsabilidad de uno, según mis papás.
Subimos a su auto y manejó hasta un lugar donde servían pizzas bastante buenas, según Nayeon, yo jamás habia visto ese lugar.
-Vas a pensar que soy masoquista al preguntar esto, pero...- comenzó a decir Nayeon y se detuvo un momento - la chica de la fiesta…
- Es una amiga de mi generación, el idiota de Suho la convenció para que me besara, los tres estábamos lo suficientemente ebrios para hacer eso- expliqué con algo de pena; no me gustaba ser del tipo de personas que se dejaban llevar por sus impulsos aunque estos fueran muy tontos.
- Okay- dijo algo Incómoda.- te juro que quería matarla en ese momento y de paso a ti, por besar a alguien más que no fuera yo.
Reí por lo que decía, se que en cada frase, había mucho ego de fondo.
Seguimos pasando la noche comiendo y hablando de las ultimas dos semanas, se sentía como si en realidad los últimos quince días no hubieran pasado e intentamos no tocar más el tema de Irene.
Después de un par de horas decidimos volver a casa, Nayeon se ofreció a llevarme a la Mía y no pude decirle que no, aunque era totalmente capaz de pedir un taxi.
-Nos vemos mañana, guapa- me dijo y me tomó de las mejillas para besarme, yo no podía moverme, asi que me limité a dejarme llevar, era realmente incómodo estar en el auto.
Hasta ese momento fui consciente de que había extrañado a horrores sus besos.
- ¿Quieres quedarte?- le pregunté después de alejarnos, fue algo, inconsciente, de verdad no esperaba que malinterpretara la situación, ella comenzó a reir y bajó la mirada.
- Cariño, la única manera para quedarme sería si tuvieras Marfan- dijo riendo, me dio un beso rápido y bajé la mirada a mis manos riendo por su comentario, definitivamente malinterpretó la situación- buenas noches Minari.
Se alejó de mi y bajé de su auto, no podía estar mas sonrojada. Como pude seguí caminando a mi casa y fui directo a dormir.
*Solo por aclarar, lo de "Marfan" es un sidrome que afecta algunas cosas que no explicaré, lo importante, es que las personas con este síndrome, suelen tener extremidades y dedos largos 🔫
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Mi Doctora Favorita [Minayeon][FINALIZADA]
FanfictionEl problema con ella, era que al igual que muchos de los medicos residentes en el hospital era: a) Narcisita. b) Odiosamente egocentrica. c) Tenia complejo de Dios. d) Si no eras un residente, no existias ante sus ojos. ¿Como se supone que actuas fr...