|•64•|Locos de Amor

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Esteban

Se llama pareja porque es cosa de dos, ambas forjando un camino juntos amándose y con ello cada defecto. Alguien que te ama jamas querrá cambiar nada de ti porque se supone que se ha enamorado por eso que tenés. El amor es libertad y es consciente, el no hace ciego a nadie. La vida da segundas oportunidad que aveces no empiezan con el buen pié. Es cuestión de tiempo siempre el tiempo.

Estamos de pie desde las ocho de la mañana, son muchas emociones, muchos pensamientos y tantas cosas que hacer. Es el cumpleaños de mi hijo, dos años. Hace dos años que mi vida cambio. Hace dos años que he aprendió y valorado tantas y tantas cosas que creí perdidas. Dos años donde ella no esta físicamente pero se que vive entre nosotros y dentro de mi corazón y mi hijo. Jamás me hubiera imaginado que estaría como estoy ahora. Jamás pensé que yo mismo podría dar decisión de salir de un punto donde yo mismo me metí muy profundo.

La miro a ella y fue ella quien la escogió para mi... Para esto y para él. Es su madre, esta impaciente organizando todo junto a Nereida. Esta tan hermosa, tan única. Lo ha dejado hermoso. Saludo algunos compañeros que invite con sus hijos.

Lo toma en brazos y baila con el mientras aplauden y juntos cantamos el feliz cumpleaños mientras mi pequeño sonríe enseñado sus dientes que tiene. Se ve tan feliz. El espacio que hemos alquilado aquí en el Mall es cerca de unos juegos donde hay pequeños como él. Por lo cual dejo que se acerquen con sus padres y estén.

—Mi amor ven —me acerco sonriente mientras con ayuda corta su tarta con sus muñecos favoritos. Muchas fotos, risas, canciones que le hacían bailar haciéndome reír. Y hasta cambiarle varias veces el vestuario por ensuciarse.

—¿Estas feliz? —me mira con esos ojos verdes que me han cautivado desde el primer día, abrazados mirando a Nereida poner orden junto a Fabián metiendo a los niños en una piscina de bolas a jugar.

—Muy feliz. Mira —pongo su mano en mi corazón que late por él y por ella.

—Yo también estoy muy feliz.

—Gracias por hacer esto realidad. Ha quedado todo perfecto. Está todo hermoso y él esta feliz y divirtiéndose. Aveces me parece que fue ayer que llegaste a nuestras vidas.

—Sin ti no hubiera sido posible —me acerco hasta dejar un beso en sus labios pintados de rojos y justo siento el flash de la cámara en nosotros.

Hemos contratado a un fotógrafo para que tire las fotos y no se nos escape ningún momento especial. Sonrió al ver a mi pequeño llorar y abrir sus brazos a mi. Creo que se esta cansando de jugar o todos mirarle y querer cargarlo. Lo sujeto con cuidado de los brazos bailando con el haciendo que estalle en risas. Esta mañana tuvo su primera fiesta en casa, pues Aurora había decorado un poco la casa para cuando despertara y justo la pasamos genial los tres. Me alejo un poco de todos y por un momento me sentí melancólico al recordarla, es imposible no hacerlo. Siento sus brazos abrazarme y me doy vuelta para abrazarla fuerte.

—No tienes que decir nada mi amor.

—Gracias.

Pone sus manos en mi rostro y me abraza fuerte a ella.







Aurora

Sería descabellado decir que me siento mal de saber que el un día como hoy la recuerda. Seria injusto de mi parte y al contrario me siento feliz porque en un hombre con grandes sentimientos.

Me ayudo a poner todo en una mesa recta que pusimos para la picadera. Los invitados y algunas parejas que pasaban con niños pequeños le invitamos a comer. Me sentía muy feliz, Fabián a traído a un niño encantador de la misma edad que Gabriel, ambos son ahora inseparables. Siento mis pies doler por los tacos de punta fina negros que me he puesto y me siento un momento. Se sienta a mi lado, se vistió tan apuesto que me dan celos. Unió su mano a la mía tocando el anillo.


...

Las seis de la tarde ya ha llegado y hemos dado por terminado el cumpleaños. Gabriel lo veo muy cansado casi durmiéndose en los brazos de su padre. Dejamos todo organizado y despedimos a los invitados. Nereida repartió las golosinas y la tarta a los niños al irse. Y por fin a casa. Jamás me imagine que un cumpleaños de un niño podría ser están agotador.


...

Lo pongo en el asiento de atrás en su silla con el cinturón y lo acomodo mejor porque se esta durmiendo y paso adelante con el.

—¿Estas cansada mi amor? —pone su mano en mis muslos y los acaricia despacio mientras conduce saliendo del estacionamiento.

—Un poco —recuesto mi cabeza de su hombro.

—Nereida se fue con Fabián ¿cierto?.

—Si —cierro los ojos sintiendo sus labios en mi frente.


...

En el ascensor voy agarrada de su brazo mientras carga a un Gabriel ya dormido y mis zapatos en mi otra mano. En la casa aún hay globos por algunos lugares de esta mañana y en la mesa de la entrada residuos de algunas cosas. Esteban se lo llevo a la habitación para quitar su ropa y pasar una toalla suavizante en el rostro y manos. Me acuesto en la cama cerrando mis ojos. Y llega sentándose en la esquina de la cama. Me siento en la cama mirándolo quitándose los zapatos.

—Ya te había dicho que estas muy guapo —me cruzó de brazos.

—Solo unas cuentas veces —sonríe poniendo mis piernas en las suyas dando masajes en mi pies.

—Ay si que rico —levanto mis brazos sonriendo.

También me ayudo quitando mi vestido por los botones de atrás. La verdad no se porque me siento tan cansada. Tampoco hice gran cosa, ya que mi amado contrato unas personas para que estuvieran el espacio un poco listo. Sin darme cuenta me quede dormida.

Papá soltero Donde viven las historias. Descúbrelo ahora