Cuidando la Autoimagen

326 32 4
                                    

Jazmin no se maquillo para poder besar a Florencia las veces que quisiera hasta que la dejará en la sede de Sminka. A las dos les costaba dejar de verse por unas pocas horas, eso significa enfrentar pruebas que al final si eran superadas consolidarían su reciente relación y con ambas mostrando su mejor disposición por lograrlo las llenaba de ilusión y les vislumbraba un futuro juntas más que prometedor.

─¡Jazamor! Quiero comentarte mi agenda de hoy solo para que sepas dónde ando por si no podemos comunicarnos. Ahora voy a mi apartamento a cambiarme y luego a Pasionaria. En unas cuatro horas estaré rumbo al aeropuerto para recoger a Mauren y en la tarde voy por mi auto al taller de mi hermano.

─¡Copiado Floramor! Extrañare muchísimo tus besos y abrazos.

─Yo también preciosa. El tiempo contigo se me pasa muy rápido lo bueno es que lo disfruto cada segundo.

─¡Yo igual! Supongo que debemos manejar nuestra impaciencia ahora más que nunca. ─Con caras afligidas las dos se miraban al momento en que Jazmin debía bajarse del auto.

─¡Jazamor! ¿Puedo dejarte algo para que lo guardes hasta que nos veamos?

─¿Qué cosa hermosa? ─soltando su cinturón de seguridad Florencia se acercó hasta su oído y le susurro un te amo que hiso estremecer cada fibra en Jazmin.─ Espero que te alcance hasta verte otra vez.

─¡Dios! Me endulzas la vida con estos gestos, eres la ternura hecha mujer. Pero ¿Sabes qué? Es muy poco para tantas horas. ¡Ves el tamaño que tengo! Todavía puedo guardarte muchos, además recuerda lo ordenada que soy.

─¡Ok! Hagamos lo siguiente tu guardas los te amos y yo guardare los besos.

─Me encanta esa oferta. Cuando nos encontremos podemos intercambiar roles.

─Todas las veces que quieras. ─Jazmin dejaba suaves besos en la boca de Florencia cumpliendo el trato mientras recibía los te amos. Luego de unos 5 minutos se regalaron un te amo entre labios seguido de un largo beso que les durara hasta la noche acompañado de una mirada que reflejaba el sentimiento que las tenía felices y sintiéndose suspendidas.

En la cocina de Sminka, Tamara y Amelia hablaban distraídas tomándose el primer café de la mañana y preguntándose a qué hora daría señales de vida su amiga colorada.

─¡Buenísimos días Amigas!

─¡Jaz! Pero qué radiante que estás. Tu expresión lo dice todo.

─Yo jamás había visto ese brillo en tus ojos, el amor definitivamente transforma.

─Y cuando es correspondido, queridas es la más maravillosa de las experiencias. ─Acercándose con sus brazos extendidos para abrazarlas Jazmin sonreía llena de agradecimiento.─ Son las mejores por lo que hicieron ayer para hacerme salir de aquí y pasar hasta hace minutos las más espectaculares horas con Florencia, las amo de corazón se los dijo y Florencia también se los agradece.

─Me encanta saber que contribuimos a que la pasarán bien.

─Más que bien Ame. Flor y yo estamos muy enamoradas que dijo enamoradas nos amamos.

─¿Queeé? ─Tamara no ocultaba su sorpresa─ ¿No te parece que van muy rápido?

─Solo a tener intimidad le pusimos pausa por ahora. Por lo demás todo está fluyendo de una manera que nos tiene flotando, ya saben cómo de ensueño a resultado todo entre nosotras.

─Estoy más que feliz por ambas, amiga. Ya nos pondrás al día en el almuerzo yo invito.

─Gracias Ame. Les contare con lujo de detalles la hermosa noche que pasamos.

Entre Flores y CosméticosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora