Contraste Cromático

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Ante la noticia de que Mauren sería madre, las tres amigas se dedicaron a brindar con jugo de frutas por tan maravillosa alegría. El hecho para Florencia era tan emotivo que no podía contener su lágrimas, tal parecía era ella y no su mejor amiga la que estaba esperando él bebe. Jazmin en cambio mostraba su júbilo con reserva porque desde el momento en que fue develado el secreto, a su cabeza volvieron los recuerdos de lo dicho por su padre ese día en que ella les conto a ambos su preferencia por las chicas. Esas palabras creía las había olvidado pero en ese momento regresaron para atormentarla. "No querré a un hijo tuyo si no estás casada con un hombre" Recordarlas ahora mientras celebraban la perturbó y se le hizo difícil disimularlo.

─¡Amor! ¿Qué te ocurre? Por un instante te apagaste.

─¡No, perdónenme! Me deje llevar por un asunto que debo resolver en una reunión a la que no debo faltar. Me disculpan pero debo irme. Mauren no sabes lo feliz que estoy por los tres. Debemos planear algo para que todo el grupo lo festeje.

─¡Gracias, Jaz! Yo estoy que no me lo creo. Uno de mis sueños está por hacerse realidad y en parte se los debo a ustedes.

─¡Qué dices amiga! Nosotras y más Flor que yo solo te presentamos a Boris, lo que vino después es mérito de ambos.

─Eso es cierto. Ese hombre resultó ser un príncipe.

─Te puedo asegurar Mauren no se convertirá en sapo. Nuestro amigo te adora. ¿Imagino todavía no se lo has dicho?

─¡No, Flor! Quiero hacerlo esta noche de una forma especial cuando salga de guardia.

─¡Bueno! Tengo que irme, ya saben el deber llama. ─Con un fuerte abrazo y dos besos Jazmin se despidió de Mauren y con otro tierno y corto en los labios de su amada.─ ¿Saben qué? Debemos repetir estos almuerzos más seguido pero integrando a las demás chicas.

─¡Es una muy excelente idea, amor! Voy a programarla. Te amo, cuídate.

─También te amo, hermosa. Mauren me encanta que te haga tan feliz la dulce espera. ─Jazmin ya no podía permanecer más tiempo en el restaurant debía apurarse a llegaría atrasada para su encuentro con la nueva realidad que le esperaba en Sminka. Sólo imaginarse la cara que pondría Anastasia y su posible reacción ya la mantenían con incertidumbre y algo nerviosa. Este insospechado panorama quizás la haría enfrentar los peores momentos con su anterior jefa y ahora su socia. Deseosa estaba por saber que llevo a la señora Ferruchino a vender parte de su patrimonio familiar después de mantener una lucha a muerte con su anterior marido para no dejarle nada de lo que por ley le pertenecía. Lo cierto es que algo muy grave debió pasar para que tomara esa decisión.

─¡Buenas tardes, Jaz! Hice pasar a tú oficina al Dr. Aguirre.

─¡Buenas Tardes Claudia! Gracias ya lo atiendo.

─¡Doctor! ¿Cómo ha estado?─ Jazmin saludaba al hombre que se convertiría en su mano derecha.

─Muy bien Jazmin. ¿Y tú?

─La verdad algo inquieta. En mi vida hubiese soñado estar en la posición que me encuentro ahora. Imagínese de empleada a dueña, son pasos agigantados los que me han hecho dar. Y le seré sincera Doctor estoy con cierto susto de cómo se lo va a tomar Anastasia el saber quién es su nueva socia.

─Te diré que a mí ella me parece una mujer muy ecuánime y segura de sí misma. Al menos esa fue mi apreciación cuando me comunico él porque debió vender parte de las acciones de la compañía que fundo su padre.

─Esa es una de las cosas que quisiera saber si es que me puede contar.

─Hasta donde sé el señor Ferruchino adquirió deudas de juego impensables de pagar y amenazaron su vida. Por eso viven en el extranjero y de allí la decisión de cubrir ese grave problema con la venta de las acciones.

Entre Flores y CosméticosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora