A la mañana siguiente, el mago británico se levantó temprano, necesitaba ver y alimentar a sus criaturas. Antes de meterse en la maleta se aseguró que Tina estuviera bien, ella aún dormía bastante cómoda en la cama, se apresuró a taparla y le dejó una nota en la mesa de noche indicándole que iba a estar en la maleta.
Luego de todo esto finalmente bajó a la maleta, las criaturas lucían tranquilas, a diferencia del Demiguise quien a penas vio al magizoólogo le reprochó su ausencia.—Lo siento pequeño, en verdad perdón. –Acarició con cuidado a la criatura frente a él.– Prometo que no volverá a suceder, pero por lo que veo, Jacob hizo un buen trabajo aquí.
Comentó el magizoólogo que miraba con atención su alrededor, estaba limpio y los animales lucían cómodos, después de observar todo con cuidado decidió tomar cubetas con alimento para todos y así poder alimentarlos, por cada hábitat que pasaba se quedaba un rato para hacerles cariño y pedir disculpas por su ausencia. Al llegar al hábitat de los Bowttruckle le costó encontrar a Pickett, hasta que dio con él.
—Hey pequeño. –acercó su mano a la criatura y esta no quiso subir.– Vamos Pickett... Sabés que tuve cosas que atender.
El pequeño Bowttruckle le saco la lengua un buen rato y se volvió a esconder del magizoólogo.
—Esta bien, te daré tiempo...
Después de eso el mago se dirigió a limpiar las cubetas en las cuales había llevado el alimento de los animales, estaba en eso cuando Tina se asomó por la entrada.
—Aún sigues aquí... –la Auror se acercó al mago y le depositó un beso en la mejilla.
—Si, estaba conversando con todos, les explique por que no tuve tiempo de venir, la mayoría comprendió, pero Pickett no quiso escucharme.
—Él está tan acostumbrado a tí, debes haberle echo falta. –miro hacia el hábitat de los Bowttruckle y vio a Pickett sentado en la orilla de una rama. – ¿Quieres que hable con él?
—No, esta bien así. –acercó a la bruja por la cintura hacia el.– Adoro que te sientas a gusto con mis animales, adoro todo de tí, nunca lo olvides. –La tomó con suavidad por la nuca y la acercó para besarla de manera lenta pero profunda. Hasta que se les acabó el aire se separaron.
Por un momento Tina recordó lo que había sucedido ayer y es que la forma de besar de su pareja era realmente distinta en ocasiones, podía ser dulce o provocativa y ella lograba distinguirlo, para ser un chico tan tímido sabía muy bien como manejarse cuando ya tomaba confianza. Mientras lo observaba limpiar algunas cubetas que faltaban se decidió a hablarle, lo haría, no podía estar reprimiendo ese sentimiento de duda por más tiempo.
—Cariño, quisiera hacerte la pregunta de ayer. –soltó rápidamente la Auror, tanto que sus palabras chocaron en sus labios al salir de su boca.
Newt quien ya estaba listo se acercó a ella mientras asentía con la cabeza suavemente.
—Me parece, subamos a la habitación para hablar con tranquilidad. –dejó que la bruja subiera primero y luego el subió después.
Al estar en la habitación Tina se sentó en la cama y se arreglo el cabello, de manera nerviosa mordió su labio como era de costumbre, espero que el mago se acercara a ella para poder hablar.
—Querida, ¿te molestaría si me doy una ducha? –pregunto el magizoólogo mientras miraba a la bruja.– Es que la necesito, pero, lo hago rápido.
—B...bueno no te preocupes, vé. –Le regalo una sonrisa suave al mago para darle tranquilidad y tratar de lucir normal a pesar de sus nervios.
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•Conociendo el amor• [NEWTINA]
Bilim Kurgu_________________________________________ Luego de lo ocurrido con Grindelwald, los chicos van a Hogwarts a hablar con el profesor Dumbledore. En el proceso, el aroma del amor va creciendo entre Newt Scamander y Tina Goldstein considerablemente. __...