Drama familiar.

9: Porque no.

Cuando Allen era pequeño (tan pequeño que las hormonas calenturientas no despertaban, por allá a los seis años tal vez), una vez escuchó a Tyki decirle a Devit que cuando a un niño le gusta una niña empieza a molestarla.

Porque los niños son tontos.

Como todos ellos.

Como Cross en ese momento, mientras molestaba a Mana y a Nea en su momento de familia.

Aunque también lo dijo cuando Wisely comenzó a molestar a Narein, por no mencionar lo que sucedió cuando uno de los vecinos comenzó a molestar a Dero pensando que era una linda rubia con hermanos extraños.

Que lo de los hermanos extraños no era mentira, pero sobre ser niña...

¡El punto es!

Suspiró siguiendo a Narein.

—Creo que le gusto a Sheryl.

Porque le estaba jodiendo con un maldito reglamento en el que le dejaban claro que su sola existencia estaba prohibida en el plantel. Comenzando desde los colores llamativos en el cabello, pasando por las perforaciones y los tatuajes para acabar todo con lo que lo representaba totalmente.

Prohibidas las relaciones impuras.

Narein bufó exasperado y colocó las maletas del chico frente a la puerta de la que sería su habitación, se cruzó de brazos y miró a su besto.

—En realidad, deberías considerar que es todo lo contrario —señaló el equipaje—. Ahí está, por ahora no fastidies. Mi habitación es la 112, Wisely dormirá en el pasillo hoy así que si tienes problemas... Por favor, te lo pido como amigo, no me busques.

—Estoy considerando tener una relación impura contigo —comentó, ignorando claramente todo lo que el otro pedía, levantó la mirada del reglamento—. ¿Qué opinas? ¿Quieres romper un poco más el corazón de Wisely? Me encanta la idea de ver a Sheryl, quien aparentemente me ama, hervir en celos.

¿Qué le había hecho pensar que Allen le pondría atención?

Suspiró y colocó su mano sobre el hombro de su amigo.

—Querido, toda relación tuya es impura —el chico asintió ligeramente, de acuerdo con la afirmación—. Sea nuestra amistad, tus lazos familiares o las muchas personas que te odian. Tú eres lo que sale en el diccionario cuando se busca la definición de "impureza".

Walker parpadeó, desconcertado y extrañamente halagado.

Se llevó una mano al pecho.

—Jamás me habías dicho algo tan bonito...

—Puedo decirte cosas mejores —aseguró sonriendo y soltándolo para alejarse—, como sea. Sólo no mueras antes de la conferencia de esta tarde, la ceremonia de entrada será en unos minutos así que deja tus cosas en la habitación y ve de inmediato al gimnasio, Road debió darte un mapa del campus.

—¡Es tan injusto! —espetó mirándolo alejarse— ¡Me amas y te amo! ¡¡¿Por qué no me llevas contigo?!!

—Tenemos reunión del comité para los preparativos de este nuevo semestre —se encogió de hombros sin girarse hacia él y se detuvo un momento antes de perderse totalmente de la vista del otro—. Hablando de eso, nuestro presidente quiere verte esta noche, ha escuchado de ti y tiene muchas ganas de conocerte.

—¿Por qué?

—¿Sinceramente? —le miró de reojo— Creo que eres su tipo.

—Vaya... Esto comienza a ponerse interesante...