63: Reflexiones.

128 24 5
                                    

Wisely lo hizo.

Wisely Pomeranian Kamelot, que jamás se ha enorgullecido del nombre que le dio su padre, reflexionó sobre muchas cosas a lo largo del período de su vida en que todos sus deseos se hicieron realidad, pero se fueron antes de que pudiera comer. Oye, no es fácil. Wis no está orgulloso de su nombre, pero lo está de su propia disciplina.

Ha estado enamorado del mismo chico desde los nueve años, sin siquiera pensar en mirar hacia otro lado y ha vivido a base de oxígeno para demostrar su firmeza ante la duda del otro. Narein piensa que no lo sabe, pero la persona que mejor lo conoce jamás será Allen. Allen no lo ama, podrán ser amigos que juran estar juntos en vida o muerte, pero al final del día, sólo Wis mira al chico sin deseos de pestañear. Es un poco espeluznante, Wis también se siente así, pero no hay nada que hacer. Cuando Narein está en la misma habitación, sólo respira ante la idea de que están compartiendo oxígeno y dióxido de carbono. Su amor es extraño, excesivo y un poco maníaco, pero al menos es sincero. Así que, es como es, y solo él puede decir que conoce más al otro de lo que se conoce a sí mismo. Es tan así, que Wisely, siendo un puberto hormonal de los fuertes que se calienta ante la idea de existir en un mismo universo que bae, es reacio a tocarse. Hay que decir, prioridades. Wis no está interesado en el placer, a menos que ese placer se obtenga dando placer a su amor.

No es como Allen y Kanda, tan superficiales, que el amor comenzó con pasión. Su amor es más extraño, así que todo lo que hay en su mente es Narein, todo el día y todos los días. Road, su hermana, alguna vez dijo que lo suyo era casi una enfermedad. Wis cree que sí, pero probablemente esta no tenga cura. Ha estado lejos de Narein, ha conocido a otras personas, pero nunca ha sentido interés y toda su atención está en él. Cuando están separados, como en el último tiempo, Wisely se siente un poco irreal. Cuando no están juntos, el cerebro funciona con normalidad y hace muestra de su habilidad como una élite reconocida, pero más allá de eso... ¿Qué más hay?

Wisely miró la cama vacía nada más entrar en su habitación, todo estaba desolado y siempre sentía que el mundo era gris. Los genios tienen un serio problema, y es que el mundo es demasiado aburrido para ellos. Es por eso que, los grandes científicos, dedican sus vidas a darle sentido al universo. La mayoría se sumerge en la investigación, es una manera de preservarse a sí mismos. No les importa la humanidad y tampoco están tan interesados en los temas a tratar. Es todo para desafiarse a sí mismos, como un juego de niños o una novela entretenida para pasar el tiempo. Porque el mundo es realmente aburrido e incoloro para ellos, es insípido.

Mana es un caso raro, todo el Clan lo es. Nadie de ellos se dedica a la investigación para pasar el tiempo, se dedican a otras cosas, en su mayoría, se enamoran. Wisely siente que él puede entender muy bien lo que Mana siente por Marian, porque es parecido a lo que siente por Narein, solo que no es lo mismo. Wis puede pensar obsesivamente en atar a su amor a su lado, unirlo a sí mismo para que jamás lo abandoné y adorarlo como un dios que sólo necesita un único devoto, pero es sólo pensar. A fin de cuentas, Narein y todo lo que implica su persona es lo que Wisely más ama.

Ama su viveza, ama su terquedad, ama su ingenio, ama la manera en que lo mira y siempre quiere darse media vuelta para no cruzarlo en el pasillo. Oye, las cosas que ama nunca fueron comunes, pero son las cosas que caracterizan a Narein, solo recientemente Wis se dio cuenta que ama la manera en que los ojos del chico lo miran, con una mirada que intenta ser renuente, pero en el fondo se llena de inseguridad. Porque Wisely conoce mejor a Narein y pudo convencerlo de aceptarlo al fin.

Y es diferente de Mana, el jefe pierde la cabeza cuando piensa en Cross estando con alguien más. Finge ser estúpido para capturar y su amor es egolatría. Porque Mana ama a Cross, porque es lo suficientemente bueno para él. Marian ha intentado huir de la obsesión, pero hace mucho tiempo que ha caído en un círculo enfermizo donde ambos se aman hasta querer matarse a mordiscos, porque ninguno sabe bien qué es lo que sienten por el otro. Wis no está interesado en nada que no sea Narein, pero ha notado a Mana, porque su mirada maníaca es parecida a la mirada que encuentra en el espejo todas las mañanas. Esa mirada que inspira profundo terror si no puede moderarse, porque son todos genios que buscan entretenimiento y decidieron dar su todo al amor.

Drama familiar.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora