#69

983 94 6
                                    

Veía a su Omega comer feliz. Tenía la boca manchada al igual que alrededor de su boca.

— ¿Serás capaz de comerte todo eso? —pregunta Blaine. Mirando a su pareja.

El menor asiente — Si. Más que seguro. No te preocupes.

— De acuerdo. Iré abajo. Cualquier cosa que necesites me gritas.

— Si, Alfa.

Blaine sonríe y se inclina para dejarle un beso en su frente.
Baja las escaleras y suelta un suspiro.

Todo esto es muy nuevo para él. No sabía cómo cuidar a su Omega estando en estado. No sabía si podía comer todo lo que esta comiendo. No sabía si era sano.

Claro que el menor no sabe que él ya se entero de su secreto, pero aún así necesita decirle ya que tiene que llevarlo al médico. Necesitaba saber si todo estaba bien ahí dentro. Saber si su cachorro estaba creciendo como es debido.

Hace unas cuantas llamadas al médico y en unos quince minutos ya tiene una cita.

Sabiendo del mal humor que luego Kurt tiene, no sabe como se lo vaya a tomar. Asume que nada bien y tampoco es como si fuera a mentirle en ir a otro lugar cuando en realidad van a ir a medico.

Da un suspiro profundo y procede a subir las escaleras y entrar a la habitación encontrando a su Omega comiendo mientas ve televisión.

Kurt sonríe cuando lo ve — Alfa, ven. Estoy viendo Bambi, ven a verlo conmigo...

Accede aunque sabe que no tiene tiempo. Si tardan más, van a llegar tarde y perderán la cita.

— Amor... Vamos a salir...

Kurt frunce el ceño — ¿Salir? ¿A donde? —cuestiona, curioso.

Blaine respira — Al médico...

Kurt jadea y se pone un poco pálido. Se separa de su Alfa y queda parado frente a él — ¿Al-al médico?

El mayor asiente y se levanta — Si, amor. De hecho, ya tengo una cita.

— No, no... Pero, pero... ¿Por qué? ¿Hay alguna razón? ¿Estás mal? —se acerca a él, aún estando nervioso y sus manos temblando un poco.

A Blaine le parece tierno que este preocupado por él — No, bebé. Está vez es para ti...

El Omega vuelve a alejarse — Pero estoy bien. Me siento bien, no me duele nada... ¿Tu me ves mal? Porque yo no, estoy perfectamente —habla rápido sin detenerse y sin tomar respiración.

— Me preocupo por ti, Omega. No se me hace normal que estés vomitando todo lo que comes y que tengas mucho apetito.

El menor se sienta en la cama, comiéndose las uñas — Pero-pero no... Estoy bien. Lo juro. Lo prometo.

— No me harás cambiar de opinión, bebé. La cita ya está y no podemos cancelarla.

El Omega boquea, sin poder decir algo.

— Nos iremos en una hora. Espero que estés listo... —Blaine sonríe y besa a su Omega en la frente.

Deja a su Omega solo en la habitación con un miedo y pánico terrible. Abraza su estómago y suspira.

Blaine ha demostrado ser un Alfa excelente, bueno, romántico, respetuoso y amable. Todos los adjetivos que se te ocurran. Pero tiene miedo de que no vaya a aceptar a este bebé que está creciendo dentro de su pancia. Aún no han hablando bien acerca de tener cachorros, y teme a que su Alfa no se lo tome bien.

Miedo. Esa es la palabra que lo describe en estos momentos.

Miedo.

Alpha&Omega • OMEGAVERSE •Donde viven las historias. Descúbrelo ahora