Llegaron a la casa del Alfa en poco tiempo. La casa era enorme para que solo una persona viviera en ella.
— ¿En serio vives aquí? —le preguntó el menor. Anonadado.
— Si —se paró a lado de el. Tomando su mano — Solamente yo. Aunque... Deseo que vivas conmigo.
Kurt se volteó hacia él, lastimando su cuello. ¿Había escuchado mal? — ¿Q-que dices?
— ¿No te gustaría? Solo seremos nosotros dos —lo abrazó — Y tal vez después con nuestros cachorros corriendo por ahí. Si no te gusta podemos buscar una casa más grande. Con un enorme jardín y una piscina. No se. Tu solo pide y lo haré. Haré lo que quieras —beso sus mejillas y se aferró al pequeño cuerpo del Omega.
Kurt estaba en un pequeño estado de shock. Vivir con él teniendo solo unos cuantos días de ser pareja era algo de otro nivel. Y eso le demuestra que Blaine de verdad está interesado en él. Y que ya tenga el futuro predeterminado era algo que no podría describir. Era genial.
— ¿Me... me ves contigo en tu futuro? —le preguntó.
— ¡Claro que si, Kurt! Te veo en todos lados. Quiero casarme contigo y tener hijos únicos y exclusivamente contigo. Con nadie más —beso sus labios y mejillas — ¿Q-que... A caso tu no? —su tono de voz bajo.
— Si, si, si. Claro que si. Pero es que es demasiado pronto. Vendré a vivirme contigo, pero no ahora. Al menos deja que cumplamos al menos los tres meses o el año, ¿No? —y es esperaba a que el Alfa aceptará.
— Si. Está bien. Estaré esperándote el tiempo que sea necesario —Blaine estaba feliz. Feliz de que el Omega este pensando en irse a vivir con él. Sería genial. Se sentía soñando. Pero es, al menos, un hermoso sueño.
Entraron a la casa. Las paredes eran blancas, con pequeños detalles en color negro. Los sillones eran blancos y el posa-brazos de color como de plata o algo así. Se veía lindo y acogedor. En lo que era la sala, que era lo primero que se veía al entrar, al fondo en una de las paredes había una televisión de plasma y justo debajo de esta había una chimenea. Y en la sala a lado estaba la enorme cocina.
Habían unas escaleras al fondo a la derecha, que es donde llevaba al segundo piso y en donde supone que esta la habitación de Blaine. Tal vez iría a visitarla después.
— ¿Te gusta? —susurró Blaine en su oído. Sobresaltándolo, ya que estaba demasiado entretenido en mirar toda la casa.
— Si. Es muy bonita. Me gustan los colores —dio su opinión.
— Me alegro de que te guste. Vamos a la sala a ver películas —fue a la sala a prender la televisión y poner Netflix.
— ¡Si, películas! —Kurt corrió detrás del Alfa y se aventó en uno de los sillones, que lo cierro era demasiado cómodo.
— ¿Que películas quieres ver? —le pregunta el Alfa, sentándose a su lado.
— No lo se —se encogió de hombros — Ya se. Pon la del Titanic, es una de mis películas románticas favoritas.
Blaine le hizo caso y después de estar buscando la película por un buen rato, la encontró al fin y la puso. Viendo como el menor veía la película embobado.
La película a Blaine estaba aburriéndola. Saco su celular y le mando un mensaje a Noah diciéndole que Kurt estaba con él y que no tenía que preocuparse.
Bufo frustrado y le puso pausa a la película. Recibiendo un chillido por parte del Omega.
— ¡Yo estaba viendo eso! —miro a Blaine mal cruzándose de brazos. Enojado.
— Lo se y lo siento... Pero es que quiero hacer otra cosa —se acercó a Kurt poco a poco. Viendo como se ponía nervioso.
— ¿Q-que... qué haces?
— Quiero besarte —dijo tranquilo. Mirándolo fijamente y posando su vista en los labios apetecibles del menor — ¿Que no puedo?
— Si... Puedes.
El Alfa no espero ni un segundo más. Se lanzó a los labios del menor, comenzando a besarlo con algo de desesperación. Tomando se sus mejillas y acercándolo más a él y un momento introduciendo su lengua a la de Kurt. El menor intentaba seguir el ritmo del beso de Blaine, pero no podía ya que no sabía cómo besar con lengua. Jamás lo había hecho. Pero imito a Blaine y saco su lengua tímida y la choco con la Blaine, y este gruño al sentir la pomposa y húmeda lengua del menor chocando con la suya. Blaine fue acostando poco a poco al menor al sillón, aún besándolo, y parecía no querer separarse de él.
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Pero, Blaine al intentar escurrir una de sus manos al interior de la camisa de Kurt y tocar su piel; este se separó de el al instante. Empujándolo del pecho.
