conoce a DANIELA

6.Entre el bien y el mal.

Montserrat luego de unos días subió la información falsa a la plataforma del mercado negro, una noche se vio obligada a salir de su casa y abandonar a su madre y resto se su familia.
En la cama solo una nota que decía:
Los amo, cuidense mucho. Tengo algo que hacer lo cual me llevará tiempo. Saldré de  país y no se cuanto tiempo me llevará, no me despedí formalmente debido a que no quiero llorar más, pero no olviden que siempre serán lo más importante para mi.
Att: Montserrat

Ahora bajo el nombre de Daniela se fue a vivir a una comunidad a alejada de la ciudad donde vivía anteriormente.
En una libreta apuntaba las cosas que le pasaban día con día durante 5 meses más, hasta que un día realizó su último escrito, el cual decía:
Vivir en este lugar es sumamente difícil, estar lejos de mi familia es aún más, han pasado 5 meses más y por fin  logré llamar la atención de los coronel, esto apenas comienza. Montserrat dejo de existir y es momento que Daniela se encargué de acabar con lo que Montserrat inició.

Daniela estaba a solo minutos de verse a la cara con integrantes de la organización de los coronel, en  una zona alejada de la ciudad y de la comunidad donde vivía.
Mientras Daniela se dirigía hacia ese lugar, en esa misma zona ya la esperaban algunos integrantes de aquella organización.

- Espero sea la clase de persona que necesitamos- dijo Carlos, el cual era el jefe de la organización.

- Una persona se acerca señor- dijo un hombre por medio de un radio.

- Tranquilos, es Daniela.- dijo  Carlos.

Sin duda alguna el cambio fue radical en Montserrat debido a que era físicamente diferente; su pelo castaño tenía un ligero toque de tono rojo, su peinado aún seguía siendo de lado, sus ojos cafés tenían una mirada muy fría y no mostraba algún tipo de nerviosismo. Con ellos demostraba que dejó de ser Montserrat y ahora se trataba de Daniela de la Garza.

- Para ser una simple gatillera eres demasiado hermosa- dijo Carlos.

- Gracias por el alago, pese a todo sigo siendo mujer y me gusta verme bien- dijo Daniela con serenidad.

- He buscado información de ti y sigo asombrado de tus logros como gatillera en Nuevo León.- Comentó Carlos asombrado.

- Solo hago mi trabajo- dijo Daniela muy tranquila aunque interiormente asombrada por que Rodrigo nunca comentó nada de eso en la carta.

-Te llevaré a la casa mayor para acabar con la conversación, sube a la camioneta, pero espero comprendas que tendré que cubrirte la cara- explicó Carlos.

- Algo injusto privarme de poder ver el lindo paisaje del camino, pero esta  bien- respondió Daniela.

Le cubrieron la cara a Daniela y se dirigieron a la llamada casa mayor la cual se ubicaba a varios kilómetros de la ciudad. Daniela mientras transcurría el camino, pensaba en que estaba entre el bien y el mal ya que en cualquier momento tenía que acabar con la vida de alguien y en ese momento se convertiría en la clase de personas las cuales ella aborrecía y odiaba, más sin embargo por su hermana haría lo que fuera.

Al llegar a la casa mayor, a Daniela le descubrieron la cara, ella se asombró al ver esa casa tan lujosa en color blanco, con un extenso jardín y una enorme pared de ladrillo que aseguraba el perímetro de la casa, además de estar en medio de un bosque.

Carlos hizo que Daniela pasará a la sala, la cual era muy elegante con una serie de fotos y pinturas en la pared.

- Regreso en un momento, estás en tu casa- dijo Carlos mientras se dirigía a su recámara.

Daniela veía los alrededores de la casa asombrada, veía detenidamente las fotos pero tomó una foto donde aparecía aquel hombre el cual mató a su hermana. De pronto escuchó una voz la cual se le hizo conocida.

- ¡¡Padre!! Ya regresamos-