Bruno mi pasión 2

Capítulo 41

Me relajé con los chicos, y menos mal, porque si hubiera tenido a mano el móvil al momento de saber que Bruno se había ido, la hubiera liado y mucho, una cosa es que tuviera cosas que hacer, y otra totalmente diferente es que no me dijera nada, ya no me sentía invisible, era invisible para él.

No sabía lo que le estaba pasando, había pasado de un extremo a otro, antes inseparables y ahora como si no nos conociéramos.

Bueno Ari, no exageres, es el segundo día, no es que lleves una época así, pensaba, estará agobiado, estresado, pero eso no implicaba que subir a la habitación y por lo menos decírmelo, lo podría haber hecho, o si tenía mucha prisa, por lo menos un mensaje, algo para saber que me tiene presente, hubiera sido lo mínimo.

Esa noche nos íbamos a cenar a un restaurante, todos juntos, lejos del hotel, era una alegría para mí, por lo menos salía algo.

Nos fuimos todos a las habitaciones, para ducharnos y arreglarnos, entré y miré mi móvil, Bruno no me había mandado nada, ya estaba cansada.

Te acuerdas de mí? Gracias por avisar que no te iba a ver, muchas gracias de verdad, no sé qué te pasa, pero existo¡¡ Llevo dos días para decirte algo importante¡

Me fui al baño a empezar a arreglarme y mientras estaba en la ducha recibí un mensaje.

Lo siento¡¡¡ me estoy agobiando, lo siento de verdad!! Esta noche estaremos juntos, te quiero.

Se notaba que Bruno no estaba bien, y me sentía mal, pero esa noche estaríamos juntos, aunque fuera en el local, no se lo iba a contar allí, pero seguro que estaría cansado y nos iríamos al hotel pronto. Y aunque no fuera de la forma que había pensado, en nuestra habitación, solos los dos, sería también especial.

Estuve mucho tiempo intentando decidir que ponerme, quería ponerme un vestido estrecho, pero ya algo de barriga tenía, al estar tan delgada se me empezaba a notar pronto, por lo que decidí en ponerme unos leggins, y una camiseta negra con dibujos por delante, estrecha de las caderas y algo más suelta de la cintura, mis botines negros.

Casi nunca me maquillaba, siempre iba bastante sencilla, pero esa noche me maquillé algo más.

Me recogí mi pelo con una trenza baja que se acomodaba en mi hombro descubierto ya que la camiseta era cuello barca.

Esperé a los chicos abajo, en la recepción, estaban tardando y luego decían que las mujeres éramos más lentas y necesitábamos más tiempo.

Vi como ya llegaban, y me levanté, señalándoles el reloj. Todos se reían.

Es que claro tú lo tienes fácil, con cualquier cosa estás preciosa - me dijo Eric, mientras me besaba.

Estás preciosa - me dijo Phil.

Gracias!! - esperaba que esa noche, no fuera invisible para Bruno, y fuera una buena noche.

No de verdad, en estos días, no se, estás diferente - insistía Phil.

No exageres!! Que al final voy a pensar que estas coqueteando conmigo - le cogía el brazo para ir andando hacia la salida con él.

Llegamos al restaurante, era un pub típico inglés, nos sentamos, yo como siempre al lado de mis dos hombres, mientras Dre estaba delante de mí.

Ari, quieres vino? Está el que tanto te gusta - me decía Eric.

No, no me apetece - Eric puso cara rara, y era normal yo siempre estaba mirando sí donde íbamos estaba mi vino, sí estaba lo pedía, y sí no me daba rabia.

Pedimos todos y esperamos a que nos trajeran los platos, mientras hablábamos todos y como siempre no faltaba la alegría y las risas.

Trajeron la cena y Dre se había pedido un chuletón.

Te vas a poner las botas! - le dije, mientras le guiñaba el ojo.

De repente vi como su tenedor se clavaba en la carne, mientras el cuchillo dio un corte sacando sangre por los lados, en ese momento me vino una angustia, algo subió por mi estómago, me sentía con náusea.

Perdón, perdón - me levanté con las manos en la boca, corriendo me fui al baño y allí empecé a vomitar, de golpe tenía calor y más calor, tiré de la cadena y fui al lavabo a mojarme un poco la nuca.

No, entra tú - decía Phil.

Entramos los dos, vale - decía Eric - venga que lleva mucho tiempo, puede que esté tirada en el suelo y nosotros discutiendo quien entra antes.

La puerta se abrió y vi como Eric y Phil entraban al baño de mujeres.

Estáis locos - les decía.

Que pasa que en el baño de mujeres, no hay puertas? O meáis con la puerta abierta - dijo Eric.

Lo ves igual que el de tíos - dijo Phil - siempre he querido entrar para saber que se siente - me miraba y nos reíamos todos.

Venga fuera de bromas, cómo estás? - dijo Phil.

Bien, ya está! - les dije, pero parecía que mi contestación no era suficiente.

Ari? Tú no estarás..... - dijo Eric.

Venga vamos a cenar que tengo ganas de ver a Bruno - le corté, necesitaba primero que lo supiera Bruno.

Cuando llegamos Dre se había cambiado de sitio, era el único que lo sabía, yo se lo agradecí con una sonrisa.

Empecé a cenar, ya casi el resto había terminado, cuando ya habíamos acabado, nos fuimos hacia el local.

Vi a Bruno de lejos y él me vio, así que los dos fuimos a nuestro encuentro.

Hola chicos - saludo a todos - hola guapa, estas preciosa. - me cogió de la cintura y dimos vueltas, yo me estaba mareando.

Te he echado de menos - me dijo. Sus labios rozaron los míos, muy despacio, su lengua paso directa a encontrarse con la mía, no dejaba de suspirar, no sabía lo que me estaba pasando pero estaba caliente, las hormonas las tenía revolucionadas, sí hubiera estado a solas hubiera estampado a Bruno contra la pared.

Que te pasa? - me preguntó mientras no paraba de acariciar mi espalda - te noto agitada...... - sus manos fueron hacia mi trasero, y lo apretó con fuerza, provocando que diera un pequeño grito y todos se giraron para ver que sucedía - has puesto culo ehh???

Bruno estoy muy sensible - le dije, mientras me mordía el labio.

Mmm ya veo, esta noche pronto a casa, que hace días que tú y yo nada de nada - me susurraba al oído y yo me derretía.

Alguien llamaba a Bruno, desde lejos, Bruno se dio la vuelta - amor, te dejo, pero te busco, vale? - me besó para luego irse.

Estaba contenta y me fui con los chicos a la barra para pedir algo para tomar.

Que quieres amor? - me preguntó Eric, mientras yo me sentaba en el sofá.

Un refresco - le dije, mientras le guiñaba el ojo.

Ya sabía que ibas a decir eso - me acercó a mí - enhorabuena, pero no te preocupes no se lo diré a Bruno - me dio un beso en la mejilla y fue a por mí refresco.

OTRO CAPITULO¡¡ ERIC LO HA ADIVINADO SOLITO, SUPONGO QUE YA TENÍA ESPERIECIA, POR AHORA TODO VA BIEN, BRUNO SE MARCHO SIN DECIR NADA A ARIADNA, PERO AL VERLA ESTUVO CARIÑOSO, PARECE QUE ESTAS AGOBIADO, PASARA ALGO CON ESTA SITUACION? ESPERO VUESTROS COMENTARIOS, ESPERO QUE OS GUSTE....

MIL GRACIAS AMORES¡¡¡